Cuando entraron a la casa embrujada Jimin abrazó con fuerza al peluche, Jungkook lo notó y rápidamente tomó su mano. El castaño lo vio confundido pero este no le dio tiempo de hablar ya que empezaron a caminar por los pasillos de la casa
Jimin pegaba gritos cada que algo feo salía mientras Jungkook solo reía por sus reacciones pero en ningún momento soltó su mano, estaba aferrado a él como si su vida dependiera de eso. Se sentía muy bien sosteniendo su pequeña mano, se sentía agradable sentir lo tibia que esta estaba.
—¡Jungkook!— gritó Jimin escondiendo su cara en el pecho del más alto el cual solo pudo sonreír ampliamente al ver el acto.
—Tranquilo Jiminshi, estoy contigo— el pelinegro lo abrazó pegandolo aún más a su cuerpo. Mientras Jimin trataba de procesar como lo había llamado.
Ambos estuvieron así por unos minutos hasta que Jimin se alejó un poco y vio fijamente a Jungkook quien aún seguía sosteniéndolo de la cintura
—Perdón...—Jimin bajó su mirada luego de hablar.
—El único que debería pedir perdón soy yo así que no te preocupes por nada—Jungkook volvió a abrazarlo mientras acariciaba su espalda.
(...)
Ambos chicos salieron de la casa antes que Jimin muriera de un infarto o antes que Jungkook muriera de ternura al ver a Jimin.
—¿Porque te gustan tanto si eres miedoso?— Jungkook seguía tomando a Jimin de la mano y no pensaba soltarlo.
—Siempre quise entrar a una pero mis amigos le temían
—Suerte que estoy yo que puedo cuidarte—sonrió deteniéndose haciendo que el más bajo también lo hiciera.
—Vamos Jungkook—Jimin tenía sus mejillas completamente rojas por el comentario de Jungkook y no quería que lo notara.
—Esta bien, vamos
Salieron de la feria aún con sus manos entrelazadas, Jungkook no quería soltarlo ni un minuto y al parecer Jimin tampoco
Iban en el auto mientras Jungkook manejaba con una gran sonrisa Jimin acariciaba al peluche.
—Es...— las palabras de Jungkook fueron cortadas por el sonido del celular de Jimin que indicaba que alguien llamaba.
Jimin golpeó su frente al darse cuenta quien llamaba, había olvidado la cita con MinHyo por estar en la feria. Rapidamente respondió la llamada haciendo que Jungkook borrara la sonrisa de su rostro
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—MinHyo, lo siento mucho. Enserio lo siento—Se disculpó apenado. No le gustaba romper sus promesas y él había prometido ayudarle.
—No te preocupes Jimin, podemos vernos mañana en el almuerzo
Jungkook observaba al chico hablando muy agusto con la chica y no podía evitar sentir celos por eso
—Esta bien, nos vemos luego
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Jimin finalizó la llamada y justo estaban llegando a los edificios de la universidad. Jungkook bajó azotando la puerta del auto, Jimin lo vio confundido pero igual bajó yendo tras el chico.
Cuando entraron a su dormitorio Jungkook fue directo a su habitación, si, talvez se sentía tonto por comportarse así pero no podía evitarlo, sentía que en cualquier momento alguien podía hacer con Jimin lo que él no se atrevía a hacer
Jimin por su parte dejó el peluche en su cama y se quedó en su escritorio tratando de estudiar pero no podía negar que le preocupaba la actitud de Jungkook, hace unos minutos él estaba bien y ahora ni le habló
—Concéntrate Jimin—dijo para el mismo golpeando su cabeza con el lápiz y se enfocó en sus libros.
Pasaron varios minutos en donde Jimin trató con todas sus fuerzas concentrarse pero no podía
—Hola
La voz de Jungkook resonó por toda la habitación haciendo que el corazón de Jimin quisiera saltarse del pecho.
¿En que momento ese chico había logrado tanto en él? Por más que trataba de encontrar una respuesta no lo lograba, Jungkook se había metido en su corazón demasiado rápido
—Hola—respondió al fin Jimin sin moverse de su silla. Jungkook seguía de pie en la entrada.
—Hmm —el pelinegro rasco su nuca con nerviosismo. No sabía que decirle, cuando decidió ir a donde Jimin no pensó que iba a decir.
—Jungkook ¿estas bien?— se adelantó el castaño. El más alto dejó salir todo el aire retenido y se adentró a la habitación.
—No, no estoy bien —respondió sentándose en el borde de la cama.
—¿Que sucede?— Jimin se puso de pie cruzandose de brazos frente al chico.
—¿Sabes que sucede?— se puso de pie sonando fuerte— Me sucedes tú, eso es—soltó haciendo que Jimin bajara sus brazos y lo viera fijamente—Me estoy muriendo de los celos—confesó tomando a Jimin de la cintura.
—Jungkook yo...
—No, ya sé que no tengo porque ponerme así pero me da muchos celos verte con esa chica y...
—A mi solo me gustas tú —Jimin cortó las palabras de Jungkook viéndolo a los ojos, el chico sonrió ampliamente sin poder controlar las miles de sensaciones que estaba sintiendo con esas simples palabras.
Jungkook no perdió más tiempo y tomó la mejilla de Jimin con su mano y lo acercó para juntar sus labios con los de él.
Sus labios se movían suavemente pero placentero, Jungkook apretaba con fuerza la cintura de Jimin mientras el más bajo rodeaba su cuello con sus manos
Era increíble la felicidad que Jungkook tenía en estos momentos, escuchar a Jimin decirle eso y terminar entre besos había sido lo mejor del día
Jimin había intentado tanto darle su espacio a Jungkook pero viendo las cosas así no podía resistirse al menor, no podía solo ignorarlo
—¿Puedo quedarme a dormir contigo?— preguntó Jungkook separándose del beso. Jimin sonrió para luego abrazarlo.
—Me encantaría