Osomatsu se mantuvo callado sin saber que responder, nunca se había detenido a considerar lo que realmente sentía por el DJ, aunque claro, no era tonto, comprendía que el otro estaba interesado en su persona, de hecho aquella confesión estaba de más porque siempre le repetía cosas similares, pero, ¿Y él? ¿Qué buscaba? A pesar de que su autoestima se encontraba un poco más elevada desde que conoció a Karl todavía no era suficiente para considerarse merecedor de algo tan valioso como el amor – Sigo sin entender lo que ves en mi... - murmuró con desgano – yo no merezco nada bueno – deslizó sus manos con suavidad, resintiendo el frío en la piel por finalizar el contacto.
- ¿De qué hablas? ¿Por qué piensas así? – inquirió con verdadero pesar, él no podía dejar de considerar que Osomatsu era una persona maravillosa y única – Todos merecen recibir amor, y yo deseo la oportunidad de ofrecerte tal cariño si me lo permites, eres grandioso Osomatsu, estando a tu lado me divierto tanto, eres directo, gracioso, encantador y llegaste a iluminar mi vida – indicó sin lograr evitar esbozar una amplia sonrisa.
El de rojo suspiró ante lo escuchado, ¿Estaría bien aceptar los sentimientos del otro? No podía negar que tenía miedo, aquello era un terreno completamente nuevo, ¿Y si al final nada funcionaba o sólo resultaba un simple juego? Además, estaba su situación actual, ¿Qué pasaría con Tougou? Dudaba bastante que aquel hombre simplemente le permitiera tener una relación, ¡Ni siquiera sabía de sus salidas!, tampoco podía escapar a sabiendas de las consecuencias, el trato de hace años lo mantenía prisionero. No podría ser feliz con el DJ, ni con nadie – Lo lamento, pero no puedo – musitó esquivando la vista y sintiendo un repentino nudo en la garganta.
Karl no insistió, comprendía que existía un impedimento en la vida de ese chico que lo mantenía atado al miedo, aun así, quería seguir intentando mantenerse a su lado, de momento quizá, podría conformarse con su amistad, con permanecer a su lado pese al dolor que se acrecentaba en su pecho.
- Lamento interrumpir – Choromatsu estaba en el marco con un celular en mano, los chicos se colocaron de pie – papá acaba de escribirme, están a poco de llegar, si planeas llevarle a casa es el momento indicado – finalizó al guardar el teléfono y retirarse sin decir más.
Karl busco el reloj de piso que se hallaba cerca de los estantes, faltaba poco para la media noche – Ya es bastante tarde, será mejor llevarte de regreso.
Osomatsu de inmediato negó con la cabeza – está bien, puedo regresar solo.
- ¿Bromeas? Sería peligroso, además, ¿Sabrás regresar desde aquí a tu hogar?
El de rojo bajó la mirada, no tenía idea de donde estaba y ni siquiera podía considerar usar el transporte si no cargaba ni un centavo.
- SI tienes miedo de que te lleve en la moto podemos ir en uno de los autos, llamare a un chofer – se giró con intención de llevar a cabo lo dicho, pero fue frenado por el suave agarre del otro -¿Osomatsu?
- Tú... ¿Podrías dejarme sólo en el club? – solicitó nervioso.
Karl meditó la petición, le era claro que el otro no deseaba volver a su hogar – Puedes quedarte a dormir aquí, mañana te llevare temprano a casa.
Osomatsu se sorprendió ante el ofrecimiento, con tal oferta tenia mayor oportunidad de ser dejado en el club al día siguiente sin tener que revelar su dirección. Considerando que Tougou aun no estaría de vuelta no tenía nada que perder - ¿No hay problema si me quedo?
- Claro que no, ven, puedes ocupar la habitación en donde te cambiaste – le fue guiando sintiéndose de mejor humor, ahora sólo debía evitar al resto de la familia para poder llevarse temprano a Osomatsu.
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Juguete
FanfictionOsomatsu no es más que un simple juguete, un peón que no tiene derecho alguno de soñar y recibir la más mínima muestra de afecto, o al menos, eso creía hasta que conoció a un singular DJ.