Capitulo I

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Piper

Como todas las mañanas muy temprano Piper hacia su recorrido por las instalaciones del hotel, siempre cuidadosa y atenta a cualquier simple detalle que pudiera afectar la imagen de este. Nunca faltaba el grupo de jefes tras ella observando cada movimiento y observación que hacía al respecto. El resto de empleados temblaba ante la inspección exhaustiva que realizaba, los nervios y el estrés eran tan notables, que gotas de sudor caían de sus frentes.

Iba con un pañuelo pasándolo por cualquier superficie para comprobar el estado de la limpieza en los muebles, repartiendo miradas y buenos días a todos los empleados, pero con mirada penetrante dando a entender si había algún rastro de polvo hasta algo mal colocado.

Estaba supervisando los preparativos de un evento que se daría al siguiente día. Una boda, todo tenía que salir perfecto, desde las luces hasta el audio y video. Era un hotel con alto prestigio y renombre internacional, no podía permitirse que algo saliera mal.

Un auto rechinó sus llantas en la lujosa entrada del hotel, un grupo de mujeres exaltadas gritando y en particular una llorando hacían acto de presencia en la recepción exigiendo le dieran la información sobre un huésped.

El recepcionista por supuesto por políticas de seguridad y privacidad se negó a darlas. Una de las mujeres exigía a gritos se la diera. La mujer en llantos le suplicaba, Esas dos personas son mi prometido y mi mejor amiga soltó en lágrimas.
Ellos van a casarse mañana exclamaba la amiga a la par, ¿en que habitación están? gritaba.

Lo siento, no podemos, debemos mantener la privacidad de nuestros clientes repetía el hombre.

Diles - Dijo Piper
No te apegues a las normas en estas situaciones.

Sorprendidos ante semejante acción los empleados quedaron con la boca abierta.

Llegaron hasta la habitación, Piper y unos cuantos empleados estaban a la espera de lo que seguía. La mujer y sus amigas estaban al frente de la puerta, la novia indecisa si tocar o no la puerta lloraba, las amigas la motivaban a que lo hiciera.

Espera espera - dijo la mujer
Si lo confirmo ahora, probablemente no habrá boda mañana ¿Verdad?

El depósito para el salón de la boda, los gastos del matrimonio, los regalos de los novios la luna de miel. ¡Todo será cancelado!. Ni siquiera alquile el vestido, fue diseñado para mi. ¿Que voy a hacer con todo?.

Piper solo escuchaba atenta con cara seria y de pocos amigos todo lo que la mujer exclamaba. Se sentía exasperada ante tanta estupidez según ella. - La mayoría de las mujeres no se casan con el hombre, sino con la idea de la boda pensaba.

¿Que debo hacer?- exclamó la mujer hacia Piper
Es mejor simplemente no mirar ¿verdad? siguió diciendo. ¿Usted piensa así también, ¿verdad?.

Sin dar respuesta Piper se acercó a la puerta y tocó.

La mujer sorprendida se acercó de manera exigente hacia ella - ¿Que está haciendo? ¿Quien es usted para hacer eso? le reclamaba.

Es mi hotel - dijo Piper 

La mujer retrocediendo, huyendo de la presencia de la persona tras la puerta se alejó hasta no ser vista por este.

¿Que es esto? - dijo el huésped

Gracias por elegir nuestro hotel exclamaba tan pulcra Piper. ¿Hay algún comentario o queja del servicio? Finalizó diciendo.

Muchas - dijo el huésped. Ordene servicio de habitación hace mucho, ¿Por que no ha llegado aún? decía en tono enojado, cuando de repente vio una mujer acercarse y estamparle un pedazo de pastel a la cara que había tomado del carrito que portaba la comida en espera, al momento que también gritaba: ¡Este es tu servicio a la habitación!. Entro a la habitación junto a las amigas gritando y haciendo el escándalo del día.

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