Piper
Era el día de la cita de Piper, para no darle importancia había decidido que fuera en el restaurante de su hotel. Fue muy formal, casi que una reunión con algún inversionista, tocando temas sin importancia, dando datos y referencias que no le parecieran interesantes ni atrayentes a su acompañante, tan fría, tan calculadora, sin una sonrisa, sin ningún gesto agradable. El amor y esas cosas inútiles no formaban parte de su futuro, solo estaba cumpliendo la cita para satisfacer a su tía y que le dejara en paz de momento.
En una mesa continua a Piper, de espaldas a ella una chica escuchaba atenta la platica de ella, no era que le interesara lo que decía, ponía los ojos en blanco cada que Piper decía algo presuntuoso. Después de una larga espera, y después de mucho jugo de tomate que había tomado, su pierna rebotaba impaciente, necesitaba ir al baño, pero si se movía puede que Piper desapareciera de su vista. Voy o no voy se cuestionaba, se estaba aguantando lo más que podía sus ganas de ir. En un intento de acercarse más a escuchar la platica y detectar algún indicio de si esta terminaba, movió su silla hacia atrás, la movió tanto que cayó de espaldas derramando sobre ella el jugo de tomate que recién tomaba para disimular su movimiento.
La silla cayó justo al ras de la silla de Piper, uno de los meseros salió corriendo para socorrer a la chica, Piper solo observaba la escena cerca de ella, esperando este solucionara y atendiera al cliente en aprietos.
Piper observó con atención a la chica, frunció el ceño, y soltó una risa sarcástica. Seguía observando la escena sin hacer algo. La chica no se levantaba, ninguna seña de estar consciente. Piper vio por última vez a la chica y seguir en lo suyo, hasta que entendió de quien se trataba.
Bajando la cabeza y posando sus manos en la boca, rio un instante, un micro segundo bastó, se levantó de su silla y se disculpó con su acompañante diciéndole que tenía que resolver el asunto, se despidió de él, y se levantó de su silla.
No camino mucho, solo dio la vuelta a su silla y quedó frente a frente a la chica, su mirada fija en ella. Volteo a ver al mesero y le dijo que la cargara y la llevara a una de las habitaciones mientras llamaban a un médico.
Piper iba detrás del mesero y la chica, justo al llegar a la habitación, por milagro de las tres divinas personas, la chica despertó y se fue corriendo directo al baño, bajo su pantalón, y entre suspiros deposito lo que tanto le urgía. (Orinar mal pensadas).
Piper esperaba en la habitación, sola, había pedido las dejaran a solas.
La chica se estaba tardando demasiado, su paciencia estaba en menos uno, fue a golpear la puerta del baño, invitándola a salir de una vez por todas.
Alex no sabía que excusa dar ante tan bochornosa caída. No tuvo de otra que salir del baño a penas Piper había golpeado la puerta.
Estuve sentada por mucho tiempo y mis piernas se durmieron, fue lo primero que se le vino a la mente a penas salió del baño.
Podría haber una contusión, así que vamos al hospital a hacer placas - dijo Piper en tono serio
Esta bien, realmente estoy bien - Contestó Alex. Mi cabeza es bastante dura, así que no sucederá nada malo seguía diciendo muy apenada y conciliatoria.
Vamos a asegurarnos de todos modos, será una molestia si dice algo más luego - Soltó Piper.
¿Algo más? - Dijo Alex con el ceño fruncido y algo molesta por el tono de su voz.
Oh! Ya entendí, como me herí aquí.... darme una compensación.... ¿Por quien me toma? - Una Alex más molesta recriminó a Piper
¿Luzco como si fuera a amenazarla? - Dijo Alex.
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Lie To Me
أدب الهواة¡Hola! Bueno, no se que poner, había escrito un "prólogo" lo guardé en algún lugar donde según sabría donde lo tendría y pues ni al caso. Lo siento. Esta es la primera vez que hago algo como esto. Es una pequeña adaptación con cambios que iré hacien...