Lie To Me

Capitulo VI

Piper

Otro nuevo día empezaba para Piper, se dirigía como todas las mañanas hacia la oficina, pero esta vez, al poner el pie en el hotel, había algo diferente, por donde pasaba, los empleados murmuraban a sus espaldas, ella los ignoraba pero al mismo tiempo sabía que algo pasaba.

Un par de días habían pasado del encuentro con Alex. A partir de ese día, todo fue diferente, sus empleados no eran los únicos a los que había captado murmurando a sus espaldas, ya en el club le había pasado lo mismo, muchas miradas sobre ella, nadie se atrevía a decirle algo, y ella menos preguntaba, siempre fría, siempre engreída.

Entro a su oficina, Lorna iba tras de ella.

¿Has escuchado extraños rumores sobre mi? - Preguntó sin más.

Lorna la quedo viendo con cara de susto, no sabía si decirle o no. Trago saliva, estaba pálida, hasta que al fin lo soltó.

¿Te refieres a los de que estás casada?

Piper quedo sorprendida, anonadada de la tontería que acababa de escuchar. Estaba furiosa.

¿Quien diablos está esparciendo ese rumor? - Preguntó. Se sentó en su silla suspirando profundo y con enojo.

¿Realmente no lo hiciste? - Preguntó Lorna intrigada, viéndola con ojos achicados como diciendo no te creo.

¡Lorna! - Gritó Piper, ¿Como puedes si quiera pensarlo?

Pudiste haberlo hecho sin yo saberlo - Respondió Lorna en tono de burla y sonriendo coquetamente.

¡No lo hice!, Dije que no lo hice - Soltó exasperada Piper.

No me sorprendería que lo hayas hecho a escondidas, tu tía anda sobre ti, le urge que te cases - Le dijo Lorna.

Además, que lo hayas hecho a escondidas tiene lógica, tenias que proteger a tu esposa. Una típica historia de Romeo y Julieta, amor imposible, y solo porque se trata de dos mujeres cosa que a tu tía no le agradará del todo. Ella hubiera preferido verte casada con un hombre.

¿Esposa? - Dijo sorprendida Piper, con ojos fulminantes. ¿Tiene nombre esa Esposa?

¡No! - Contestó Lorna. Solo sabemos que es una mujer.

Necesito que investigues quien es esa mujer - Le dijo Piper. Y déjame sola.

Piper estaba como alma que lleva el diablo, no tener el control sobre lo que se dice de ella la molestaba y la hacía perder la calma. Se recostó de momento en el sillón de su oficina y puso sus manos sobre su frente dando un leve masaje en la sien, necesitaba pensar, necesitaba saber que iba a hacer, de repente vino a su mente el recuerdo de lo sucedido con Alex, ese momento que hasta la fecha no se había dado a la tarea de analizar que había pasado.

Lo único que sabía era que se llamaba Alex Vause . Alex Vause dijo entre suspiros profundos, ¿Que hubiera pasado si esa chica no las hubiera interrumpido? Se preguntó a sí misma.

Su única reacción ante lo sucedido fue separarse de Alex e irse lo más pronto posible de su vista, al caminar sentía que su corazón iba a salirse de su pecho. Subió al ascensor, dio una última mirada a Alex la cual no sabía en qué momento Piper se alejó de ella y con un asentimiento de cabeza, antes de soltar una última palabra que definiría lo que seguía, el ascensor cerró sus puertas.

¡Alex Vause! - Volvió a decir ahora en voz Alta. Se levantó sobresaltada del sillón y se dispuso a salir de la oficina.

Fue en busca de Lorna, le dio el nombre de Alex y pidió que investigara dónde podía localizarla, regreso a su oficina, y se encerró con miles de pensamientos respecto a los rumores y Alex. En su mente se estaba tejiendo toda una teoría de lo que pudo y no haber pasado.