Capítulo 23.

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Narra Tn.

Mientras caminaba hacia el gimnasio con Saika a mi lado, veía en mi celular lo que mi papá me había dicho: Joshua aceptando entrar al equipo de los Raging Bulls.

—Tsk.

—¿Eso es malo? —me preguntó Saika que tomaba mi mano.

—La verdad, no sé, creo que no—Respondí y subí las escaleras que daban al gimnasio— Al menos no para mí.

—Eres muy fuerte, nee-chan.

Hoy me tocaba hacer mi rol de entrenadora. Abrí las puertas y todos voltearon a mirarme.

—¿Qué pasa? —pregunté. Saika se escondió detrás mío.

—¡Tn! ¿Podrías ver el lanzamiento de Shasa? —preguntó Valt jalando de mi brazo hacia una de las arenas.

—Veamos —me paré frente de ella— ¿Qué te ocurre?

—Necesito tus consejos, Tn, eres la más fuerte —me pidió Shasa— Mira esto.

Saika volvió a tomar mi mano ya que se había soltado cuando Valt me jaló hacia la arena.

Shasa lanzó, todo parecía normal, pero se detuvo demasiado pronto.

—¿Eh?

—No entiendo porque se detiene tan rápido —Shasa me miró. Con mi mano libre tomé su bey y lo examiné. Luego la miré a ella.

—Ten— le di su bey— Vuelve a ponerte en posición y no lances— Shasa acató lo que le dije. Solté la mano de mi hermano menor y comencé a caminar alrededor de Shasa mirándola— Aferrate más al suelo y pon firme tu brazo.

Acató mis órdenes— Lanza.

Lanzó e iba más rápido, llegó al centro y estuvo girando más tiempo que la vez anterior, pero se detuvo nuevamente.

—Entonces si no es eso, no tengo idea —dije.

—En momentos así me gustaría que Tradd siguiera aquí —dijo Shasa.

—Tienes razón, yo no sirvo para entrenadora... Aunque me guste dar órdenes —susurré eso último.

—¿Es el entrenador que armó sus maletas y se fue hacia algún tiempo?—preguntó Cuza.

—Si, siempre contábamos con sus consejos sobre nuestros beys y su desempeño—respondió un chico que no conozco.

—Supongo que debemos resolver esto nosotros —volvió a decir Shasa.

—¡Ese es el espíritu! —se emocionó Valt— ¡Ya sé que significa esto!

—Por lo menos alguien entendió—dijo Audaz.

—¡Entrenamiento especial! —volvió a decir Valt.

—Creo que estás perdiendo el punto —dije.

Y así todos comenzaron a discutir.

Suspiré y cerré los ojos. En mi mente apareció el bosque al que suelo frecuentar. Y apareció Free en medio de la panorámica y dejé de escuchar los ruidos a mi alrededor. Sonreí. Cuánta paz.

Abrí los ojos de golpe al sentir con alguien me abrazaba por la espalda. Saika parecía asustado por la discusión.

—¡Cierren la boca! —les grité y todos se callaron—Discutiendo no vamos a llegar a ningún lado.

Luego de un rato de silencio, Honey habló.

—Debería haber otro lanzamiento que funcione para tí.

¿Qué... me está pasando? (Free De La Hoya Y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora