¿Quién es San? [WooSan/SanWoo] (EN EDICIÓN)

Capítulo 19

—¡San! ¡San! —llamé entrando a la casa. Llevaba ya como diez minutos fuera de la suya pero éste no abría y yo ya me había preocupado. Estaba todo en completo silencio y solo. Cerré la puerta a mis espaldas y busqué alguna señal de vida a mi alrededor. Comencé a subir para ver si estaba arriba. Después de haber escuchado su mensaje en mi buzón, salí de casa rápidamente. Molestó o no con él, siendo amigos o no, me preocupaba lo que le pasara—. San, ¿estás? —pregunté abriendo una puerta, la cual resultó ser la del baño. La cerré y caminé hasta a siguiente puerta—. San... —vi un cuerpo al lado de la cama y me acerqué de inmediato—. Mierda, ¡San! —lo levanté como pude y lo llevé al baño de su habitación—. Tienes que darte una ducha, joder, estás hecho un asco —lo dejé con cuidado en el suelo de la ducha y abrí la llave de esta para que despertara. Abrió los ojos  y su boca en una "o", tratando de mirarme con los ojos entre cerrados por el agua que caía en su rostro.

—¿¡Qué mierda!? —exclamó levantándose del suelo mojado de la ducha.

—Qué mierda pero contigo, San —pregunté molesto—. Ni siquiera recuerdas nada. Me llamaste pidiendo que viniera pero por tu estado, creo que fue mejor venir a ver si seguías respirando. 

Salí del cuarto de baño molesto. Me senté en su cama, esperando a que él saliera. Después de unos minutos, San salió con una toalla alrededor de su cintura, mirándome con vergüenza. Solamente negué con la cabeza y me levanté para salir de su habitación y así el pudiera vestirse cómodamente. 

—WooYoung, espera —dijo siguiéndome.

—Vístete, San —lo miré con seriedad y salí de su habitación.

***

—¿Sí?

—Hola pequeño bobo —dijeron del otro lado del teléfono.

—Hyung —sonreí—. ¿Qué pasa Hong? 

—¿Estás en casa?

—No, por el momento no, estoy en casa de San —dije mirando escaleras arriba.

—¿Qué haces allá? —preguntó extrañado.

—Me dejó un mensaje de voz pidiendo que viniera pero lo encontré desmayado y bañado en vómito.

—Oh... Ya veo —hubo silencio por unos segundos—. ¿Tardarás?

—No lo sé. Espero que no —me dirigí a la sala—. ¿Por qué hyung?

—Quería que fuéramos a comer.

Sonreí. HongJoong se ha vuelto un gran amigo.

—Te aviso cuando salga de acá, ¿bien?

—Sí, y me mandas la dirección para recogerte. Y no acepto un "no" como respuesta y no rezongues.

—Está bien —reí—. Te hablo luego.

—Adiós Woo —colgó.

Cuando terminó la llamada, suspiré y caminé por toda la sala, esperando a que San bajara. Ya se me hacía mucho de él y me frustraba que tardara tanto. Subí nuevamente dando zancadas en las escaleras. Caminé hasta su cuarto y estaba sentado en el centro de su cama, llorando.