LEGIÓN SANGUIS- LA BÚSQUEDA DE LOS ELEGIDOS

ANDREW ZARAGOZA

EN ALGÚN LUGAR DE ESPAÑA:

Soy Andrew Zaragoza, tengo 20 años, y vivo en España. Sí, la cuna del famoso Real Madrid y Barcelona. Pero no vine a hablar de eso. Les vengo a platicar de mi situación.

Actualmente vivo en un municipio pequeño llamado Segovia, capital de la provincia de Castilla. Por qué quiero escapar de aquí?? Porque un demonio sanguinario me persigue. Les explicaré la verdad.

Flashback hace 3 meses atrás:

Mi trabajo es ser un "pillo" o ladrón. Me escapé de mi casa hace 2 años, por lo q consideraban que era un flojo y un bueno para nada. Así que perfeccioné mis habilidades como ratero en las calles. Muchos turistas venían en época de verano. Y esta noche tenía todo preparado.

Mi ubicación es la Casa de las Cadenas, un punto famoso de la ciudad. Va a pasar algo interesante esta noche, de eso estoy seguro. Estoy esperando a algún torpe q vaya caminando para arrinconar lo en el callejón.

Espero, mi navaja está lista para atacar a mi víctima. Ya son más de las 9 de la noche. Mi compinche, Tomás Lagos, me habla.

T: Oye, creo q no vendrá nadie esta noche.

A: No nos eches las malas pulgas, Tomás. Sólo hay q esperar el momento perfecto.

T: Como sea, mano.

Hasta que al fin, llega el momento. Un señor de mediana edad, va caminando con sombrero y un traje largo, como los de las películas de detectives.

A: Listo, es ahora o nunca!!

Tomás sale del callejón, veloz como una pantera al acecho, agarra al sujeto de la gabardina y lo atrae a una pared.

Le pongo la navaja en en cuello, no puedo ver bien su rostro. Aún así le amenazo.

A: Más te vale q nos pases toda la lana ahora, animal, o vas a perder uno de tus huevos. Ahora!!

S: Tú... Pequeño chaval. Eres justo lo que necesito.

En un instante, veo sus ojos. Unos ojotes rojos, y diabólicos. Me quedo pasmado del susto.

T: Amigo, si tú no vas a amenazarlo, mejor yo lo hago.

Tomás saca su navaja, y se disponía a apartarme del hombre, pero él extiende su mano, y Tomás se levanta en el aire como una pluma.

T: Qué carajo??!! Ayúdame, Andrew!!.

Trato de ayudarlo, pero el hombre me sujeta del cuello, con fuerza, y me levanta. Le clavo la navaja en el brazo , pero ni se inmuta. Con la mano derecha empuja a Tomás con telequinesis a una pared de ladrillo. La pared crea una ruptura por el impacto del cuerpo de Tomás y cae al suelo inconsciente. Sin embargo, eso lo hizo sólo para tener libre esa mano, meterla a uno de los bolsillos de su gabardina y sacar una extraña manopla con forma de estrella en los nudillos.

S:Tú... ERES DIGNO DE ADQUIRIR EL ESPÍRITU ASESINO DE NAVALLA SANGUIS ( navaja, en catalán )!!!!

A: Ayuda!!! Alguien!!

Nadie me escucha. Veo cómo la estrella de la manopla se enciende, adquiriendo color al rojo vivo.

NS: HORA DE INICIAR ESTO!!!

Y con una fuerza infernal, y una sonrisa psicópata, me pone el puño ardiente en el brazo con el q trato de golpearlo. Por más q grito y q lo maldigo, él no retira su mano, hasta q finalmente me suelta. El ardor es insoportable, quedo en el suelo mientras q el hombre grita:

NS: Ayudadme!!! Estos crios quieren atracarme. Alguien llame a la policía!!!

El hombre desaparece. Miro a mi compañero. Está aturdido, y al parecer, la fuerza del impacto le rompió varias costillas.

T: A... Andrew.... Escucha las sirenas. Vienen por nosotros...

A: Tranquilo. Te llevaré al médico si es necesario..

Pero no logro hacerlo, ya unos focos de una moto de la policía iluminan el callejón. Un uniformado saca su teaser y nos apunta.

P: Quédense donde están, pillos!!

Me levanto y señalo a mi amigo.

A: Ayuden a mi amigo. El verdadero criminal está escapando!!

El policía recoje una navaja del suelo.

P: Y esto qué es?? No me vaya a tratar de engrupir. Sé que ustedes son los verdaderos delicuentes.

Con un movimiento ágil, le doy una patada en el abdomen, levanto a mi amigo por los hombros y escapamos por el callejón. Escalamos unas escaleras hasta llegar a la cima de el edificio. Lo acosté en un pequeño muro de ladrillo y esperamos.

A: No dejaré q ese madero nos atrape. Te lo prometo.

Miro mi brazo, tiene la estrella roja, aunque ya no arde tanto.

A: Voy a encontrar a ese sujeto, y le va a saber a cacho lo q nos hizo.

Un policía está subiendo las escaleras. No puedo escapar sin mí amigo. Tomé una de las peores decisiones de mi vida.

A: Lo siento, Tomás. Tengo una vida por delante.

Empiezo a saltar entre los edificios, haciendo parkour, y el único amigo que tenía lo abandoné. La policía lo cogió y no volví a saber de él durante mucho tiempo.

Fin del flashback.

Actualmente, me he dedicado al estudio en la biblioteca, en la q busqué un libro q me informara sobre el tal Sanguis. Algo importante va a suceder, estoy seguro.

Y cuando acabe con ese tal Navalla Sanguis, voy a saldar mi deuda con mi amigo.