Gaara tenía baba en su boquita.
Naruto le pasó la manito por el frente de su bello rostro y el niño ni siquiera se inmutó.
Entonces el blondo siguió la ruta de su mirada. Se encontró con un niño de cuarto grado que al parecer dibujaba algo en su libreta.
—¿Te gusta Sai?— le pregunto el blondo mientras limpiaba los restos de baba de su amiguito.
Gaara parpadeó y miro asombrado al chiquillo de ojos azules. —¿Es así como se llama?,¿Lo conoces?,¿Puedes hablarle de mi?,¿Crees que yo podría gustarle?
Naruto dio dos pasos hacia atrás alejándose de tanto hiperactividad y tan preguntas. —eh, ¿Cuál fue la primera pregunta? —se rasco la cabeza.
Gaara lo tomó de la cabeza y le hizo mirar al chico de cabellos negros.
—Que. Si.lo.conoces.
—¡Oye tú rojito no te atrevas a maltratar a mi prometido! —Sasuke bufó y se acercó para salvar a su bello príncipe de ojos azules y cabello rubio de su maltratador amigo, lo arrancó de sus garritas.
Gaara lo soltó pero no por qué el pelinegro se lo pidiera sí o por qué deseaba información sobre el niño de cuarto año.
—¿conoces a ese niño de allá?
Sasuke elevó una ceja — sí, ¿por?— el foco se le prendió— ¡Oh!, Oh,te gusta,¿Cierto?
Gaara asintió y él supo que la oportunidad está ahí.
—Se llama Sai, le gusta dibujar y es muy lindo— dijo alargando la "o" de más.
Naruto gruño a su espalda por esa alargamiento en la vocal. Sasuke le sonrió y lo calmó. El blondo entendió a lo que se refería. Por qué ellos ya se entendían hasta con señales.
Gaara asintió por las palabras de Sasuke. —Es muy guapo.
—Debes pedirle al Dios Deidi, que te haga su novio.
Gaara se angustió un poco —hable con mamá por teléfono y ella dijo que no existe ningún Dios llamado Deidi.
Naruto y Sasuke jadearon.
—¡Existe tú mismo nos ayudaste a salvarlo y dijistes que creerías en él! ¡hereje!
Gaara no sabía la definición de esa palabra pero sonaba bastante fea. Los ojos se le llenaron de lágrimas. Sorbió los mocos.
—Niños,qué le hacen su compañero Gaara—intervino aburrido el profesor Hatake.
—¡Nada!,¿Verdad Gaarita? —el pelirrojo se limpió la única lágrima que le salió. —Sí, profesor yo solo les decía que el amor es cruel.
Kakashi apretó los labios lo más que pudo, pero las ganas de reír fueron más fuertes y termino riendo mientras se alejaba.
Los chiquillos encogieron los hombros.
—Esta tarde irás a mi casa y le pedirás a nuestro Dios en persona que te ayude.
El pequeño niño asintió. Haría todo para que ese niño lo mirará. Suspiró.
,💕🖤
El niño pelinegro dejo de dibujar cuanto la campana anunció el final del receso. Miro hacia donde unos minutos atrás estaban los niños que no dejaban de verlo. Suspiró y guardo su color rojo en los bolsillos de su pantalón.
🖤💕
Deidara entro a la casa junto con Itachi. Manos enlazadas y sonrisas llenas de amor.
Sasuke rodó los ojos y se acercó siendo lindo.
—Hola Deidi—pestañeo— tenemos unos dulces para ti en nuestra habitación —pestañeo— ¿puedes ir por ellos ahora?
Deidara miro a Itachi y su novio le sonrió— ve, te alcanzó en un rato, iré por algo de fruta.
Deidara entro y encontró un montón de cajas de cereales "Kyubi", sus favoritos. Sonrió contento; ya tenía que desayunar, comer y cenar durante las vacaciones.
Gaara se acercó he hizo una reverencia y se mantuvo con la cabeza abajo, evadiendo la mirada color azul de señor Deidara. —Con todo respeto quiero pedirle que me ayude a conseguir novio.
Deidara miró la salida y luego la ventana, estudio las posibilidades de salir de ahí ileso, estaba rodeado por tres enanos locos y su cómplice (Itachi) lo había enviado ahí sin tocarse el corazón. Salió de su drama personal al escuchar a su cuñadito
—Gracias a tí Naru y yo somos novios, tú nos instalaste "wangouts"y luego nos mantuviste juntos cuando yo enferme de manchas rojas. Ahora queremos pedirte novio para el rojito y se mantenga alejado de lo mío.
Entonces Deidara entendió lo de las fotos y ese extraño apegó hacia él. No le gustaban los mocosos pero estos le empezaban a agradar.
—¿Cómo se llama el niño que te gusta?
Gaara apretó sus dos manitas y miro a sus amigos feliz.
—Se llama Sai y va en cuarto grado.