Narra Niall.-¡No ves que está lastimado! ¡No voy a dejar a mi mejor amigo así!- me dijo Zoey, histérica, mientras la arrastraba a mi auto de su antebrazo derecho.
¿Cuándo sería el día en que se deje de quejar?
-¿¡No te puedes callar un momento!?- le escruté con una mirada fría. Zoey me ponía de los pelos..., no había nadie más insoportable que ella.
Me miró con odio mientras se mordía el labio inferior, su habitual gesto cuando se enfadaba demasiado.
-Súbete.- le ordené mientras trataba de evitar su mirada.
-No- se negó mientras se soltaba-. No tengo por qué subirme contigo.
-¡Vamos Zoey, no tengo todo el tiempo del mundo!- dije agitando las llaves del auto y mirando mi reloj de muñeca. Ella era bastante testaruda y odiosa cuando se lo proponía.
Se quejó, bufó, pataleó. Pero nada de ello me afectó. Al final, se dio cuenta de que no tenía posibilidad alguna de quedarse en la fiesta y se dio por vencida.
Abrió la puerta sin dejarme reaccionar, se subió y la azotó de un portazo. Auch.
Entré al carro y antes de poner las llaves en contacto la miré desafiante. Me estaba volviendo loco, ¿cómo podía siquiera hacerle eso a mi auto? Maldita perra. No sabe lo que costó conseguirlo.
Tendría que rendirme, ya no podía seguir con la apuesta... ¡Zoey era asquerosamente insoportable! Juro que me sacaba de las casillas. Pero no se la dejaría tan fácil a Louis. No quería ser el hazme reír de todo el instituto, además necesitaba estar en la banda, si no lo hacía...-¿Eres estúpida o qué?- la espeté, acuchillándola con los ojos- ¡Éste carro me salió una fortuna!
-Pues, lo siento- dijo con evidente sarcasmo. Maldita apuesta.
-¡Lo siento... lo siento! ¿Eso es lo único que sabes decir? Deberías de buscar otra frase para repetir constantemente.
Zoey, que en ese momento estaba mirando la pantalla de su celular, levantó la mirada y comenzó a morderse el labio inferior cada vez más fuerte. Se llevó su mano derecha al lóbulo de su oreja y comenzó a hacerle una especie de... ¿masajes? Parecía tocarlo con nerviosismo... ¡Pues eso era! Estaba enojada y nerviosa. La había echo enfurecer.
-¿Qué pretendes hacer conmigo Niall Horan?- dijo y sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas- ¡Pareces que no te cansas de hacer sufrir a la gente!- me gritó- Primero a los "nerds" de la escuela, como le llamas tú... un horrible apodo, ya que ellos no hacen más que estudiar para pasar de año..., luego conmigo, y ahora con mi mejor amigo. ¡Eres un estúpido idiota! ¡Nunca jamás me metí con tus amigos! Y tú... no tienes por qué hacerlo con los míos, ¿entendiste?- se resfregó los ojos e intentó ocultar algunas lágrimas que se le habían caído.
Sus palabras me habían dolido. No sé que estaba pasando, pero me había quedado sin palabras. Y Niall Horan nunca se queda sin palabras.
Observé a Zoey directamente a sus ojos, nunca me habían gustado sus ojos marrones, incluso me habían parecido sosos, sin gracia... hasta ahora. Ahora que la veía sin juzgarla, sentí que sus ojos me transmitían profundidad y sinceridad.
¿Qué clase de hechizo había esparcido sobre mí? ¡Qué clases de cosas estoy pensando!
Cuando al fin abrí la boca para contestarle, sin pensarlo, dije:-¡Ese tarado de tu amiguito dijo que nunca te podía tener! ¡Que no te merecía! ¿Crees que me sentí bien?- achiné los ojos y cuando me dí cuenta de lo que había confesado deseé que la tierra me tragase. ¿Qué mi sub-consciente no se puede quedar callado?
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Si tú lo dices ||n.h||
FanficZoey se sentó en su vieja cama rechinadora con lágrimas en los ojos. ¿Por qué siempre tenía que ser tan estúpida? ¿Por qué siempre terminaba con el chico equivocado? ¿Qué había hecho mal en la vida para que le tocara ese destino? Las lágrimas corri...