QUÉDATE A MI LADO ~JONGKEY~

I. INTRODUCCIÓN

[19 de Marzo del 2018, USA]

—¿Por qué se ven nerviosos? —cuestionó el anciano bisabuelo de Kibum sentado en el extremo de la enorme mesa que vestía siempre como el más fino caballero inglés—, ya hemos comido antes muchas veces juntos.

En aquella enorme mansión, dónde había estado alguna vez una casucha dónde el presidente Kim había nacido, era donde había construido su mansión, donde vivió con su esposa, criaron a sus hijos, donde luego Hyori la madre de Kibum vivió su niñez y dónde Kibum había estado más de una vez.

Enorme, con pisos de mármol, candelabros de cristal, enormes ventanas al estilo inglés y cuadros de toda la familia.

—Gracias —dijo el anciano a la sirvienta que le sirvió su vino, de hecho podría decirse que el gusto de Kibum por el vino, lo había heredado de su bisabuelo.

Kibum comía a pequeños bocados mientras intentaba no mirar a su abuelo que parecía sonreír de una manera traviesa como si trajera algo entre manos, y la verdad era que "algo" había, ya que conocía muy bien al hombre que lo había criado desde que su madre había muerto.

Jonghyun por el contrario frente a Kibum ni siquiera había tocado su comida, se sentía incómodo por siempre vestir de traje, sentía que le apretaba y la misma sensación que invadía a Kibum también lo estaba molestando, no sabía que era, pero sabía que algo había.

—¿Qué ocurre? —dijo el presidente Kim terminando el último bocado de la tierna y jugosa ternera que tenían esa tarde para la comida—, saben que tenemos algo importante de que hablar.

"Eso era"

Pensó Kibum, quien llevaba sospechando que algo pasaba todo el tiempo, su bisabuelo usaba una colonia que solo se ponía cuando estaba nervioso aunque en su rostro no demostrara nada de ello.

Jonghyun solo tragó grueso, era la primera vez que el abuelo de Kibum se veía tan serio a sus ojos, desde que lo conoció en Londres por accidente le había parecido un anciano muy agradable, incluso cuando lo vio meses atrás el día que recibió la propuesta de Kibum.

—Vamos a ser claros —dijo el anciano al dejar su copa y secar sus labios delicadamente con una servilleta que se manchó del rojo del vino para despues acompañar aquella copa—, los padres de ambos están de acuerdo en su relación y su matrimonio, ¿Cierto?

—Sí abuelo —Respondió Kibum dejando los cubiertos en su plano sin hacer ni un ruido pero indicando que había terminado de comer.

—Sí señor —Jonghyun también afirmó.

Dos sirvientas se acercaron y sin emitir sonido se llevaron los platos del presidente Kim y de Kibum.

—Yo también estoy de acuerdo con su relación, siempre que mi único bisnieto sea feliz no podría pedir nada más —el anciano indicó a la servidumbre dejar el salón.

El eco de las enormes puertas al cerrarse hicieron saltar a Jonghyun quién se encontraba nervioso aunque no sabía la razón del porqué y entonces el anciano continuó.

—Kibum.

—Sí abuelo —respondió el mencionado.

—A partir de mañana irás a la oficina conmigo, la mayoría de los accionistas te conocen, pero necesito que conozcas a más personas y que los empleados te reconozcan —dijo el viejo—, después de todo no quiero trabajar hasta mi último día de vida, necesito que te conviertas en el presidente lo más pronto posible para irme a viajar por el mundo —dijo con una sonrisita traviesa.

—Sí abuelo... per-... —Kibum fue interrumpido.

—No solo la farmaceútica —dijo el anciano—, estarás al frente de los hospitales, la universidad y los centros de investigación, serás el presidente de todo el conglomerado.

Kibum se quedó sin habla, él creía que solo heredaría la farmacéutica.

—Por lo tanto necesitas prepararte más —dijo el anciano—, harás un doctorado en administración empresas, no tengo dudas en ti como médico y ya tienes una maestría en farmacéutica entre tus títulos, pero necesitas administrar todos mis negocios.

—¡Jonghyun! —El anciano cambió su tono de voz.

—¡Sí señor! —Jonghyun se espantó tanto que los cubiertos frente a el chocaron con su plato de ternera intacto.

—Hasta el momento te he presentado a varios socios como mi protegido, si vas a casarte con mi único nieto debes ayudarlo con el negocio familiar y olvidarte del negocio de tu familia... ¿Estás de acuerdo?

—Sí señor —dijo Jonghyun.

—Es por eso que estudiarás una maestría en administración de empresas y antes de que Kibum tomé mi lugar como presidente de todo el conglomerado tú debes estar listo para tomar el lugar de director general del conglomerado, es decir, te convertirás en la mano derecha de mi nieto.

—Perdón.. ¿Qu-..? —Jonghyun se sorprendió.

—Somos la familia más rica y poderosa de este continente, si quieres entrar a la familia debes también asumir responsabilidades —dijo el anciano.

—En-tiendo... —dijo Jonghyun, si era parte de lo que debía hacer para estar junto a Kibum no se negaría.

—Los dos irán a la misma institución para sus estudios, pero a diferentes facultades, y desde luego será a la universidad que yo fundé.

—Entendido abuelo —Kibum dio un sorbo a su copa de vino, limpió sus labios y después afirmó—, no te fallaré.

—Otra cosa —el anciano prosiguió—, su matrimonio.

—¿Qué hay con eso? —Kibum se extrañó.

—Aunque tienen mi permiso —dijo el presidente Kim—, solo los dejaré casarse hasta que ambos tomen sus cargos como presidente y director general respectivamente, antes de eso, nadie, incluyendo los medios deben saber que están en una relación, hasta el momento solo lo sabe la familia, sus amigos cercanos y los empleados de está casa, nadie más debe enterarse.

—Entiendo abuelo no causaremos una polémica —Kibum aseguró.

El anciano presidente miró a Jonghyun que parecía un cachorro regañado mirando su sortija de compromiso.

—El lazo que ambos tienen va más allá de esas sortijas, no las necesitan para saber que se pertenecen el uno al otro —añadió el anciano.

Jonghyun no sabía que pensar, nunca creyó que para estar con Kibum tendría que esconderse nuevamente como cuando iban a la escuela en Londres.

Entonces un pequeño sonido metálico lo interrumpió cuando la sortija de Kibum fue depositada en el vidrio de la mesa.

—Por favor cuídala bien por mí —Kibum estaba entregando su sortija a su abuelo—, regrésamela cuando este listo para llevarla una vez más.

Jonghyun miró a Kibum y se perdió en su mirada.

"Entiendo".

Pensó Jonghyun al dejar también su sortija en la mesa.

—Por favor cuídela hasta que sea digno de ingresar a su familia —Jonghyun agacho su cabeza.

La arrugada mano del anciano alcanzó ambas argollas y las guardó en el bolsillo de su saco.

—Las cuidaré bien —Les dijo a ambos.

—¿Puedo retirarme? —cuestionó Kibum quién trataba de asimilar lo que su abuelo acababa de decirle.

—Aun no terminamos de hablar —dijo el anciano.

—Lo lamento abuelo —Kibum se disculpó de inmediato.

—Hay otro asunto importante del que debemos hablar —dijo el anciano—, quiero que sepas que esto ya lo hablé con tu madre.

Obviamente se refería a la tumba de la madre de Kibum.

—Hyori esta de acuerdo conmigo, solo queremos resultados ustedes son libres de usar el método que quieran.

Kibum y Jonghyun se miraban extrañados, no entendían a que el anciano se refería, entonces Kibum decidió dar otro sorbo a su vino pero la copa se detuvo antes de tocar sus labios cuando su bisabuelo al fin dijo.

—¿Quién heredará el conglomerado?

Pero ¿Qué no estaba claro que sería Kibum?

Entonces el anciano continuó.

—Necesito tataranietos con nuestra sangre.

Jonghyun volteó a ver al hombre y a Kibum casi se le cayó la copa.

—Pero señor, nosotros somos —Jonghyun decía pero fui interrumpido.

—Ya sé que son hombres no soy estúpido, ya les di mi bendición, pero yo necesito que alguien continué mi legado después de Kibum, por eso les dije que ustedes busquen los medios que más les convenga, después de que cada uno tome el cargo en el conglomerado que les he asignado podrán casarse, después de eso quiero al menos dos tataranietos y lo más pronto posible ya que no quiero estar en cama todo viejo en lugar de poder jugar con ellos.

Así fue como terminó la charla a la hora de la comida, sin que Kibum o Jonghyun fueran capaces de decir algo.