Jed Jones a sus 16 años siempre anda con el ceño fruncido, las manos en los bolsillos y su infaltable caja de Malboros. Lleva años enamorado de la perfecta Amanda Green, el problema a todo eso es que Edd Jones, su gemelo, sale con ella, porque de lo...
El ENEMIGO DE MI ENEMIGO ES MI ENEMIGO ?
NO, NO ERA ASI…
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No hay nada que una más a dos hermanos que el afán de salvar la PS de las garras de su madre. Se firman tratados de paz y se anulan guerras.
Eso fue lo que pasó entre Edd y yo en cuanto Mónica comenzó su travesía anti-cáncer.
Verán, la cosa es que si alguna vez te cruzas con el cáncer vas a descubrir todo un mundo. Tiene sus propios términos, sus propios folletos, películas, libros, testimonios, ficciones, grupos de apoyo, hay tanta mierda alrededor del cáncer que lo único que hace es asustarte. Yo tenía miedo. No me imagino Ed, debía estar cagado como la mierda.
Agosto fue el mes más largo de mi vida.
De un día para el otro comenzó la maratónica aventura de ir de hospital en hospital, horas en salas de espera, estudios que nos costaron vender uno de los coches, escarnes y más mierdas, todo para confirmar que Edd definitivamente tenía un Osteosarcoma multicéntrico de tipo 1, refractario a la radiación con compromiso de vasos.
Sí, lo tuve que repetirlo mil veces en mi cabeza para poder decirlo de una. La cosa era un jodido trabalenguas.
He aprendido muchas palabras en el último mes, pero lo importante es que todo ese montón de mierda solo servían para decir que Edd estaba jodido, como de verdad muy jodido.
La cosa con Edd y los moribundos, es que parecen decidirse a hacer todo aquello que nunca hicieron, y para Edd eso incluía decirle que no a Mónica.
Por primera vez en mi vida vi a Edd plantarse frente a mamá y llevarle la contraria.
Estaba empecinado en no someterse a la quimio y se rehusaba a hacer el tratamiento, decía que quería irse al otro mundo con todos sus cabellos dorados sobre la cabeza.
Parecía imposible de creer, porque era cosa de verlo, se veía igual que hasta hace unos días atrás y entonces creí que moriríamos a los 80 años por sobredosis de viagra o algo de eso.
Edd no parecía haber cambiado, tenía una pierna y un brazo jodido pero cuanta gente se rompe algo sin que le den una sentencia de muerte, a los 12 me fracturé la muñeca intentando usar una patineta y no morí.
Digo, de los dos él era el que llevaba la vida sana, de todas las personas en el mundo parecían algún tipo de broma que justo él estuviera enfermo, casi estaba esperando que en cualquier momento alguien se acercara a decirme que era el día de los inocentes y nos riéramos juntos.
Pero no era el día de los inocentes, no era broma ni un error.
Todas las segundas opiniones que habíamos buscado dijeron lo mismo y las Moni-crisis que estallaban cada dos por tres solo confirmaba la realidad de los hechos.
—Hay un buen tratamiento en St.Patric—Dijo Mónica una noche en medio de la cena.
Este era uno de esos momentos de Intervención familiar que tanto nos había insistido en hacer. —Tienen un buen plan…
Mónica era de esas personas que cuando se le metía algo en la cabeza no había manera de quitárselo y esto, definitivamente era una redada.
