A VECES SOLO NECESITAS DETENERTELa mañana de las prueban llegan con un Edd ansioso por llegar a la clínica, no hemos tenido noticias de Celine desde la mañana de navidad. Empujo la silla de ruedas de mi hermano por la clínica. Monica va junto a nosotros guiándonos hasta la parte de oncología donde han citado a los chicos para las pruebas. Cuando llegamos hay varios niños cancerosos, me recuerda a esa parte de toy story donde aparecen los juguetes despedazados del vecino, el osteosarcoma es un asco. Ninguno ha pasado la adolescencia, de hecho Edd, parece el mayor de ellos, pero de Celine no hay ni rastro y un mal presentimiento recorrer mi columna vertebral.
Edd parece un niño pequeño preguntándole cada 5 minutos a mamá por su amiga, creo que Mónica tiene el mismo presentimiento que yo, porque no es hasta la centésima vez que Edd lloriquea como crío que se decide a salir de la habitación y llamar a los padres de la niña para preguntar si todo está bien.
Cuando llega no hace falta preguntar, su cara lo dice todo, la manera apenada en la que mira a Edd.
Miro a mi hermano quien parece encogerse en su sitio esperando la bomba. No llegué a conocerla lo suficiente, pero creo que Edd de verdad le tomó cariño a la niña.
Celine murió la mañana de navidad, durante la madrugada, ingresó con un cuadro agudo del que no salió. Su cuerpo simplemente estaba demasiado agotado y falló, fue lo que dijeron sus padres. No pudo lograrlo, no consiguió seguir respirando.
Edd intenta no llorar, lo sé, se agita, y tenemos que ponerle la bigotera de oxígeno. Odio verlo con esa mierda en la cara. Quiero decirle que va a estar bien, que él va a conseguirlo, de verdad quiero que lo consiga.
Los niños a nuestro alrededor nos miran con rostros tristes, creo que lo saben, hay un pequeño que no debe llegar ni a los 6 años que de pronto me toma la mano y me la aprieta como si supiera que algo malo ha pasado, y demonios, es lo más triste que vi en mi vida, los niños pequeños no deberían enfermar.
Monica sale un momento al pasillo y por la manera en la que sus ojos brillan sé que intenta no llorar frente a Edd, Monica es de esas mujeres fuerte que parece estar hecha de acero, lista para enfrentarse a cualquier cosa, pero en el fondo también llora. Supongo que piensa que pudo ser Edd, creo que Edd también lo está pensando, que la vida es efímera, yo solo pienso que no le cumplí la promesa de besarla, saben, sé que no es lo importante, pero mi cabeza se concentra en detalles estupidos.
—Le prometí que iríamos a verlos. Era Fan de ellos, por eso empezamos a hablar—Dice Edd. No entiendo lo que dice hasta que veo los boletos para los Bulet Progect en sus manos. Parece un siglo de que los compró, me había olvidado por completo de ellos.—Nunca vamos a oírlos en vivo. Se acabó.
—No. No para ti. Agarra eso—Dije poniendo el pequeño tubo de oxigeno en su regazo. Edd me miraba como si acabara de perder un tornillo, creo que no entendía nada. Bueno, yo tampoco sabía muy bien lo que estaba haciendo en ese momento.
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Una parte de mi (Gay)
Teen FictionJed Jones a sus 16 años siempre anda con el ceño fruncido, las manos en los bolsillos y su infaltable caja de Malboros. Lleva años enamorado de la perfecta Amanda Green, el problema a todo eso es que Edd Jones, su gemelo, sale con ella, porque de lo...