ʻOHANA ||HOPEV||

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Hefesto.

Miraba y miraba la pantalla, y seguía sin creerlo.

Todo había comenzado.

Se les acababa el tiempo.

No lo podía creer.

Sentía en su cuerpo una presión tan grande, se sentía bajo la mirada de miles de ojos como si lo estuvieran juzgando internamente por lo que iba a pasar.

Miró como su novio cargaba una pistola y temió más porque supo que el peligro estaba cada vez más cerca de ellos, y que un paso en falso podría arruinar el plan que llevaban ideando desde hace meses.

Su cuerpo temblaba, sus manos sudaban. En su mente pasaban miles de imágenes diciéndole que todo podría terminar mal.

¿Debía estar preocupado.

Tenían planeada la coartada perfecta, Hyeon se creía perfectamente el papel que llevaban actuando jimin y jungkook . Cada miembro ponían de su parte para que todo resultara bien.

¿Entonces porque temía aún?

Porque en el fondo, muy en el fondo, sabía que tenía más posibilidades de morir intentando que de vivir feliz.

Pero aún así no quería morir, Minsu era muy pequeño como para perder a toda su familia en un par de años, amaba mucho a hoseok, tanto que no se imaginaba el dolor que sentiría el mayor si él moría.

Habían tenido muchos problemas y discusiones últimamente, si, pero aún así se amaban demasiado y aún así aprovechaban cada instante para recordarse lo mucho que se amaban, cuando estaban enojados intentaban no dejarse llevar por sus emociones sino que respirar calmarse y hablar.

-¿Qué se siente saber que estamos tan cerca de la gloria?- Preguntó Hoseok, entregándole un arma.

-¿Sinceramente? estoy temiendo mucho. Todo es tan complicado, y si damos un paso en falso todo se arruinaría- Tomó el arma y la dejó a su lado en la cama -Odio arriesgarme y odio tener que arriesgar a todos, pero si no hacemos esto nunca se terminará y estoy seguro que si Hyeon llega a salir de la cárcel lo primero que hará es intentar matar a cada uno con sus propias manos.

-En este momento Hyeon tiene que ser la menor de tus preocupaciones. Debemos concentrarnos plenamente en como atacaremos sin olvidar ninguna parte de plan- Hoseok le sonrió, intentando calmarlo -Debes estar tranquilo, amor, yo estoy aquí para ti y créeme que nada malo te pasará ni a ti ni a Minsu si estoy cerca para impedirlo.

Taehyung sonrío completamente enternecido de las palabras de su novio. Lo abrazó fuerte, hundiéndose en el pecho del contrario, sintiendo su latido del corazón y pensando en lo  afortunado que era en tenerlo aún a su lado después de tantas discusiones.

Hoseok sonrío al sentir a Taehyung entre sus brazos, sintiendo su aroma y cerrando los ojos.

Se sentía afortunado, completamente feliz de tener a alguien como Taehyung junto a él. Poder verlo despertar cada mañana, ver su pequeña sonrisita mientras abría un poco sus ojos y de su boca salía un 'Buenos días Hobi'.

Minsu se notaba inseguro, como si supiera que algo malo ocurriría. Preguntaba continuamente si es que su hermano seguiría junto a Hoseok, preguntaba continuamente también si todo estaba bien y temía del color naranja.

Taehyun se había ofrecido a llevarlo al psicólogo varias veces, sabía que su hermano había adquirido un trauma con el fuego después de aquél incendio.

Pero el menor siempre se negaba, se negaba y se escondía cada vez que Taehyung había intentado llevarlo con un profesional.

Era entendible, Minsu temía de cada persona mayor que él desconocía.

Y algo que Minsu nunca le reveló a su hermano, fue que observó como moría su madre.

Él no sabía que estaba ocurriendo, sólo logró mirar y, cuando abrió los ojos, vio a su madre temblando debido a las balas que la atravesaban y como la sangre salpicaba a todo el mundo.

Cada vez que cerraba los ojos, aquella imagen volvía a su cabeza. Se repetía una y otra y otra vez en bucle sin dejarlo tranquilo ni descansar en ningún momento.

Pero, tristemente, era el recuerdo más vivido que tenía de su madre.

Al igual que Taehyung, el rostro de su madre se mantenía clavado en su mente, aún con una palabra que susurraban sus labios.

"Culpa"

¿Por qué la gente sentía la necesidad de encontrar un culpable?

Aún sin saber la respuesta, Taehyung ya lo había encontrado.

Y dentro de muy poco lo haría pagar por todos sus pecados.

-¿Jimin y jungkook te han dicho como van con sus misiones?

-Bien, jungkook se ha ganado con esfuerzo la confianza de Hyeon. Aunque Jimin se mantiene un poco lejano, igual se ha ganado su confianza.

-¿Ya tenemos todos los materiales listos para el fuego?

-Absolutamente. Namjoon se ha encargado de que estén absolutamente todos, que no falte nada y que todos estén listos.

Taehyung dudó un momento.

Quería saber más, pero no se atrevía a preguntar.

Temía que si nombraba nuevamente a esa persona, la pelea comenzaría.

Y sinceramente, no tenía más ánimo de cansarse mentalmente.

Chaeyoung se mantenía con ambos niños, jugando en su casa, bastante alejados porque últimamente Taehyung no había andado muy bien.

Con toda esta situación, el menor andaba con los nervios a flor de piel y cada pequeño ruido lo hacía exaltarse en demasía.

Además, con Seulgi rondando, lo último que podría tener era paz.

La había visto un par de veces más, pero no le había hablado. No tenía ganas de volver a escuchar su voz, ni de verla en realidad, pero eso era algo que no se podía evitar.

Si hubiera sido por él, hubiera dejado que Suran la apuñalara ese día, pero si eso hubiera pasado, ellos tendrían más dificultades para realizar el plan.

Suspiró, y dejando de lado por un momento sus pensamientos, habló.

-¿Cómo está Seulgi?

-No lo sé- Hoseok lo observó, alejándose un momento- Últimamente habla lo necesario y pasa el resto del rato en silencio,  solo nos mira de manera juzgativa y guarda silencio.

-Ella no está bien.

-En realidad, si lo piensas bien, ninguno de nosotros está bien- El mayor suspiró -Todos estamos hundidos en nuestras propias mierdas, tratando de apoyarnos como podamos, pero es complicado. Nadie quiere morir Taehyung, estamos intentando mantenernos de pie, firmes hasta terminar esta misión.

-Espero, con muchas ansias, que la podamos terminar luego. No aguantó ni un segundo más metido en esta situación asquerosa.

Y posterior a eso, Hoseok salió de la habitación, dejándolo completamente solo, hundido en el silencio.

-Te vengaré, mamá, aunque sea lo último que haga.