Capítulo 24
En cuanto Young min llegó a la casa, Kwang min vio su rostro y supo que lo mejor era no hacerlo enfadar.
Su gemelo pasó directamente hacia su habitación y cerró la puerta suavemente... algo que hacía cuando solo estaba al borde del precipicio.
-¿Qué crees que habrá pasado?- le preguntó mirando a Fei que estaba sentada a su lado.
-No tengo idea pero esta mañana le dije algo y él salió corriendo.
-¿Antes o después de que te besara?
-Antes- le dijo Fei y se quedó mirando a Kwang min mientras éste solo bajó la vista. Se levantó e, inconsciente del terrible moratón que se le formó en la pierna cuando se calló mientras practicaban la coreografía de Obsession, se rozó la pierna con el sofá haciendo que le ardiera en donde su pierna tenía ese color lila.
Cerró los ojos un minuto antes de poder levantarse mejor.
-No entres por más que escuches gritos- le dijo Kwang min a Fei mientras se dirigía a su habitación.
-¿No te parece que exageras?- le preguntó ella y Kwang se giró para verla.
-No, ya ha pasado antes y el Young min furioso no lo has visto nunca. Creeme, no querrás conocerlo jamás- le dijo antes de dirigirse directamente a su habitación.
Entró y observó a Young min acostado con las manos aún en puños.
-Hola Young- le susurró Kwang min sentándose en su propia cama.
-Lárgate, déjame que me tranquilice- le dijo Young min mientras se giraba para darle la espalda.
-Creo que en las clases de control de ira te habían enseñado formas para controlarla ¿o no?
-¡Vete!- le gritó sin verlo.
Kwang min suspiró y se llevó una mano a su cabello para revolverselo un momento. Volvió a mirar a su hermano antes de hablar.
-¿Es sobre Min Woo?- al no recibir respuesta, Kwang lo tomó como un sí- ¿Qué sucedió con él?
Pasaron segundos que lo único que se escuchaba era la respiración de los gemelos. Kwang se paró y se colocó frente a la cama de Young.
-Hermano dime, no me dejes con la curiosidad.
-No te metas en lo que no son tus asuntos- le dijo Young min mientras se giraba para verlo.
-Tú me ayudaste con Fei, ahora yo quiero ayudarte con Min Woo. Vamos amigo, una mano lava la otra.
-¡No es algo que te incumbe! ¡No siempre vamos a estar uno al lado del otro Kwang min!- le gritó mientras se paraba.
-No, pero no me gusta que te encierres en tí mismo cada vez que te enojas ¿entiendes?
-¡Vete o te obligaré!- le dijo Young mientras se acercaba a él.
Kwang min lo miró y negó con la cabeza. Young le lanzó un puñetazo que Kwang lo esquivó, tomó el brazo de su hermano y lo dobló hacia atrás, inmovilizandolo.
-Recuerda quién te enseñó a pelear- le dijo Kwang mientras lo veía- No lleguemos a ésto de nuevo Young, solo quiero ayudarte.
-¿Por qué nunca puedo llegar a ser feliz?- le dijo de repente Young, lanzando un sollozo silencioso.
Kwang suspiró y lo soltó, haciendo que Young quedara parado como si fuera un títere.
-Young ¿Qué sucedió?
-Min Woo llegó en un momento equivocado- le murmuró- Entendió algo que no era...
-Pero eso no significa que hayan terminado.
-Conozco a Min Woo, sé que es así- le dijo Young girándose para ver los ojos de su hermano.
-No todo está dicho- le dijo Kwang- No porque haya pasado antes significa que todo nos puede salir mal. Mírame a mí, he logrado ser feliz con Fei.
Young suspiró y lo miró.
-Hazme recordar. ¿Qué pasó cuando decidí que realmente quería estar con la única chica con la que me acosté?
-Terminó contigo porque tuvo que irse.
-¿Qué pasó con mamá antes de que nos graduaramos de la secundaria?
-Tuvo un ataque cardiaco.
-Cuando estabamos a punto de lograr el viaje que tanto queríamos hacia Tokio ¿Qué sucedió?
-Tuviste un accidente y no pudimos ir hasta después de un año.
-¿Y después de que había decidido recuperar el amor de esa chica?
-Ella no quiso verte más porque dijo que habías cambiado.
-¿Y qué fue lo que había cambiado realmente?
-Ella.
-¿Qué hizo?
-Intentó seducirme y acostarse conmigo. Young...
-¿Te das cuenta que siempre que hemos tenido la oportunidad de ser felices algo lo arruina?
Kwang lo miró y negó con la cabeza.
-Young, yo estoy con Fei desde hace dos años y siete meses atrás. No hemos tenido una pelea en más de una ocasión y solo fue porque Fei quería colocarse un vestido que era demasiado corto para mi gusto. Pero tú con Min Woo llevan cuatro años juntos, pueden arreglar las cosas hablando.
Young lo miró y negó con la cabeza. Se sentó en la cama y miró a Kwang desde donde estaba.
-Kwang, sé que será así. Min Woo ha soportado muchas cosas pero solo le basta una para poder explotar para siempre.
-No todo está dicho- Kwang se sentó al lado de su hermano y le colocó una mano en el hombro- Si hay alguien que puede llegar a conseguir lo que quiere eres tú Young, confío en tí hermano y no te pongas más alterado o de lo contrario me lo vas a contagiar a mí.
Ese comentario, hizo que Young sonriera.
-¿Realmente hay que pensar que somos raros eh?
-No, solo que seguimos ese mito de los gemelos que lo que siente uno, lo siente el otro- le dijo Kwang sonriendo- Además... te perdono- le dijo mirandolo por el rabillo del ojo.
Young lo miró y recordó lo de esa mañana. Sintió que su rostro se puso caliente y bajó la cabeza.
-No tienes de qué preocuparte, a mí... Fei es solo la novia de mi hermano.
-Lo sé, lo sé, no te preocupes. Por cierto, hazme caso. Vé a hablar con Min Woo y trata de convercerlo... él te ama Young, no dejes que todo se arruine por una simple discucion y mal entendido.
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Min Woo dejó el móvil en donde estaba, no lo iba a hacer. No por una simple recaída se iba a acostar con Luhan... no podía caer tan bajo. Aunque esa caída conllevara un gran palcer para él que le permitía olvidar por un cierto tiempo lo que había sucedido.
En el mismo momento en que él se giró para ver hacia su computadora, su móvil sonó, haciendo que Min Woo se diera vuelta para verlo... solo que no atendió a la llamada que estaba esperando.
Era Young min... sin dar tiempo ni siquiera a escucharlo, cortó la llamada. Se llevó las manos a su rostro y suspiró una vez más. Necesitaba tiempo, en el estacionamiento le había dicho cosas de las que no se arrepentía tanto y había visto a un Young min completamente desconocido para él, eso le afectaba.
Jamás habían peleado porque él mismo se había quedado callado... pero ya no más, no cuando lo que quería hacer era decir todo lo que pensaba sobre lo que sucedía con él. Negando con la cabeza se dirigió directamente hacia la computadora... necesitaba una distracción aunque eso significase terminar con una relación en la que había puesto todas sus esperanzas.
°*°*CONTINUARÁ°*°*
