31. Servicios Especiales.

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No sabían cuánto tiempo estuvieron abrazados, pero era mejor así, aliviados, podían descansar después esa mala experiencia en donde habían visto morir a sus propios amigos. A no ser...

—¡No se preocupen, estoy bien!

Los chicos se soltaron al escuchar esa voz y lloraron de alegría al verlo allí, parado en la puerta. No sabían cómo, pero lo veían frente a ellos.

— Pero...

—Tranquilos, no es como que una maldita mujer de mil kilos me hubiese asesinado —Alex hacia estiramientos, los cuales hacían tronar sus huesos ruidosamente—. Sigan abrazados, solo me echaré al suelo; para llorar del dolor y del trauma que viví...

Y dicho y hecho, Alex se tiró al suelo. Jonathan fue el primero en levantarse y acercarse a su amigo, le estiró la mano. Alex la vió, la tomo y con un impulso se levantó.

—Lo logramos, hermano.

—¡Por luz de luna, Salazar! ¡¡Dime algo que no sepa!!

—Connie Cyaran nos ayudó a vencer a Gibson -—Dijo Jonathan sonriente y Alex puso expresión aturdida.

—¿En serio?

Alex miro por el hombro de Jonathan y vislumbro a la peliazul, parecía tímida entre todos los demás.

—Vaya, vaya... ¿Soy el único que tiene hambre?

Todos se quedaron callados por unos segundos y después comenzaron a reír. Incluso Alex.

El mayor se acerco a sus amigos, le dio un abrazo a Greg y le revolvió el cabello a Rodrigo.

Se acercó a Ximena y junto con Connie la cargaron, estaba demasiado débil y debían de sacarla de ese lugar. La pesadilla había terminado.

Uno a uno fueron saliendo de la oficina de Norberto y se toparon con otra enorme sorpresa. Una pelirroja, con agujeros en la ropa, ensangrentada y cicatrices en brazos y piernas caminaba lentamente, confundida.

—¡Jaz!

La chica los vio y emocionada, corrió al encuentro de ellos. Abrazo a Jonathan con fuerza y le sonrió a los demás.

—¡Lo lograron!

—Si tú y Alex están vivos —Gregory tenía expresión pensativa-, eso significa que los demás...

Y sin esperar respuesta, Greg echo a reír. Todos lo vieron con cierta confusión. No era una risa burlona, era una risa combinada con llanto. Parecía que Greg estaba alegre. Algo dentro de él sentía emoción. Jonathan fue el primero en percatarse del motivo de esa risa.

—Quieres verla ¿No? —Pregunto Jonathan colocando la mano en el hombro de su amigo.

Greg lo miro, se seco las lágrimas y asintió con emoción.

—Creí que Casandra había muerto... Y ahora que sé que no es así...

Todos pusieron expresión de ternura, a excepción de Alex quien volteo los ojos y negó con la cabeza.

—Hablas cómo en una telenovela mexicana —Dijo con irritación—. Y créeme que soy experto en el tema...

Jazmín le jalo la oreja a Alex y el mayor la miro con reproche. Sin embargo, al notar la mirada de la pelirroja no dijo nada. Continuaron la marcha, cuando llegaron al desnivel donde Jazmín había muerto, se percataron que no había rastro alguno de los Sangaree. Ni siquiera un cadáver, era como si jamás hubieran existido.

—¿Pero que rayos? —Connie parecía confundida—. Estaban allí...

—Quizás... Quizás todo eso se fue con Norberto... Su magia... No sé cómo explicarlo —Alulusa los miraba—, siento que al morir él, toda su magia y presencia abandono este lugar.

Escuela de EscritoresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora