4-El pacto con Pegaso

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Aiko junto con Saya, fueron a lomos de Charizar mientras que Eco iba tras Pegaso encima de su Pidgeot, cruzando lo que quedaba de la ruta 30 y la 31 hasta llegar a ciudad Malva.

No era muy grande, algunas casas, un gimnasio, una tienda y centro pokemon, la escuela, aunque lo que le daba más nombre, a parte del gimnasio, era la torre bellsprout que había al norte de la ciudad tras cruzar el rio.

Aterrizaron al lado del gimnasio, dónde Pidgeot alzó el vuelo de nuevo y se perdió en el aire, mientras Pegaso empezaba a andar con el grupo a su lado.

-Os he preparado las habitaciones ya, debéis estar cansados, si queréis os podéis estirar en lo que acabo de hacer la cena.- Dijo Pegaso mientras abría la puerta principal de una casa cercana al gimnasio.- Los pokemon pueden dormir en el sofá.

-Muchas gracias Pegaso.- Dijo Saya con una amplia sonrisa mientras dejaba a Cyndaquil en uno de los cojines del sofá, y al lado se acurrucaron Chikorita y Totodile, que por suerte habían dejado de temblar. Charizar tuvo que volver a meterse en al pokeball para no tener que dormir al raso y Gengar se puso echa una bola en el sillón que había cerca de la calefacción apropiándose también de una manta.

-Que cómodo es.- Murmuró Saya mientas negaba con la cabeza.

-Verlos así me ha dado sueño incluso a mi.- Murmuro Aiko con un bostezo.

-Como si hubiese algún momento del día en que no tienes sueño.- Bromeó Pegaso mientras la despeinaba, mientras Aiko se quejaba e intentaba devolvérsela, haciendo reír a los otros dos.

-Ya te vale.- Dijo finalmente Aiko en el momento que se rendía, escuchando como Eco bostezaba, y al darse cuenta de que era el centro de atención se sonrojo.

-Lo siento.

-No te preocupes.- Comentó divertido Pegaso.-Tu habitación es la que hay a la derecha, la segunda puerta.

-Gracias. Con permiso.

-Descansa.- Dijeron las dos chicas al unisono.

Tras esas palabras, Eco subió las escaleras, y en cuando escucharon la puerta, los tres suspiraron aún cansados.

-Imagino que necesitas hablar con nosotras a solas.

-En realidad solo os necesito hacer una pregunta.- Dijo Pegaso mientras se apoyaba en el sofá, con las manos en los bolsillos del pantalón.- ¿Creéis que Mewtwo está aquí?

Las dos chicas se miraron dudosas y al final Aiko suspiró.

-No le hemos visto, pero, no es algo que se pueda descartar.- Dijo mientras tomaba una silla y se sentaba en la mesa del comedor.-¿Qué sabes de esa noche que nos encontramos con Mewtwo?

-Que habló con vosotras, y luego se fue con Mew. También sé todo lo que estuvo provocando por Kanto, por eso creemos que es el responsable de lo que está pasando aquí. Pero... no le hemos visto por ningún lado, y los ataques de los pokemon cada vez son más seguidos, a este pasó habrá que evacuar Johto.

-¿Y no puede haber otro origen que no sea Mewtwo?

-Tenemos otro, pero sinceramente, creo que es más fácil encontrar a Mewtwo que confirmar el otro.

Las chicas se quedaron algo confundidas ante esas palabras, pero Pegaso se adelantó a la pregunta de Aiko, levantando la mano para pedir silencio.

-No os lo voy a decir.

-¿Por qué no? ¿Temas de líderes? Si es así, Saya debería saberlo... Espera, ¿Por qué Saya no lo sabe?- Preguntó Aiko al darse cuenta de que ella era líder y no sabía nada.

Pokemon. Atrapados en Jotho (Completa)Where stories live. Discover now