ʟᴏɴᴅᴏɴ [La Casa de Papel] - BERLÍN #WATTYS2019

❈25❈ [Especial]

➤Nota importante abajo

❀Disfruten el capítulo.

—¿Te encuentras bien London?— me pregunta el Profesor entrando a mi habitación después de haber tocado suavemente de ella.

—Es que me duele un poco la cabeza —susurro suavemente y bostezo— creo que tengo fiebre.

Me levanto suavemente y me siento al borde de la cama.

El se acerca donde estoy y se sienta a mi costado.

Toca mi frente suavemente y baja donde mis mejillas, donde se queda un momento razonable viendo a un punto fijo.

—No, no parece que sea fiebre —dice y toca mi frente devuelta— igual ha sido la barbacoa, porque yo tampoco me encuentro muy bien.

—Pues si quieres túmbate aquí —le digo— que hay sitio.

Me mira un poco sorprendido y traga grueso.

—Profesor, que no le voy a morder— le digo y me tumbo en mi cama dejándole un espacio.

Se recuesta a mi costado y mueve sus dedos nervioso.

—He roto sus reglas Profesor —digo sin arrepentirme de cada palabra— ¿me perdonas?

—Eso ya lo he visto London —responde él inmediatamente— ahora dime tú, ¿actuaras cómo profesional allí dentro?

Me siento rápidamente y lo miro.

—Escuché absolutamente todo lo que le has dicho a Andrés —suelto y lo miro seria— bueno —chasqueo mi lengua—no todo.

—Espiar conversaciones está mal London —dice él sentándose igual que yo— y supongo que no quedó claro para ti y para Andrés, nada de relaciones personales.

—Vamos a ver Sergio —digo obteniendo su total atención— ¿Así te llamas no, Profesor? le prometo que seré totalmente profesional y que ya no debe preocuparse por absolutamente nada , Andrés y yo, lo nuestro se terminó, supongo que le dijiste lo mierda que fui y se arrepintió de todo lo que pasó —susurro suavemente— entre él y yo, ya no hay nada.

—Lamento que estés pasando por...—dice él jugando con sus dedos— Berlín es una persona muy complicada —chasquea su lengua— es leal, pero no en el amor Anaís —agarra mi hombro— tiene una forma muy extraña de amar, solo espero que no te hayas enamorado de él, además solo han pasado cinco meses, no te podrías...

—El amor no se cronometra —le interrumpo— ahí me quedé —le sonrío— te dijo que el amor no se cronometra —río sarcástica— no sé en realidad a que tipo de amor se refería, porqué hace unos momentos ha venido a decirme que esto ya no funciona, que no somos, ni seremos, ese tipo de pareja ideal.

—Joder...—susurra calmado— lo he estado pensando y no sé porque escogiste a Berlín —dice con una sonrisa y acomodando sus gafas— o porqué Berlín te escogió a ti —alza los hombros y pasa rápidamente ambas manos por su rostro— yo le he dicho que eres amor sincero, que eres leal, que sabes amar de verdad —dice con un notable nerviosismo— que no eres como sus anteriores mujeres Anaís.

Arqueo mis cejas confundida acompañado de un gran nudo en la garganta.

—No puedo prohibir que ames —acaricia mis manos— no puedo prohibir que os améis —dice suavemente— tal vez eres eso que Andrés necesitaba hace mucho tiempo -me sonríe tiernamente— tal vez él es la persona que necesitas, solo piensen todo con la cabeza fría Anaís, piensen con profesionalidad ante todas las cosas, al menos cuando estén allí dentro.