EFÍMEROS DIAMANTES { #2 Triología Diamantes }

2: "Bienvenida al equipo Diamantes"

Veo el papel que me ha mandado mi madre. O bueno, el que ha intentado mandarme hace un año, pero acabo de recibirlo ahora. Me importa una real mierda si quiere que vuelva, no voy a seguir permitiendo que me haga daño.

Que le den por el puto culo veinte veces seguidas. Que le jodan bien duro, por perra mala.

Hace apenas una semana que he cumplido dieciocho años, y aunque la sociedad me considera una adulta, yo me veo lejos de eso. Solo soy una chica que sueña con una vida que nunca va a tener. Porque vivo en una casa abandonada junto a unas mujeres que, aunque les he cogido cariño, me obligan a robar carteras por la gran cuidad de Barcelona, para luego solo darme una mierda de sueldo.

Eso hasta hoy, se acabó. Con mi dignidad bien puesta y la cabeza bien alta, cojo todas mis cosas y salgo de allí en busca de la mujer que dijo que tenía un futuro prometedor para mí. O eso creo, porque estoy muy interesada en el negocio que me propuso.

Supongo que todos lo verán mal, pero siempre me ha encantado el estafar, el hurto, las mafias, es algo que me pone realmente cachonda. Y me importa una real mierda lo que opinen los demás. Es mi vida, y me interesan esas cosas.

-Hola- saludo una vez que estoy justo en la puerta del local donde la vi por primera vez.

-Vaya, pero que sorpresa- admite sonriendo- veo que te has pensado mi propuesta.

-Sí, estoy interesada en ella.

-Me alegro mucho, eres la indicada para este trabajo.

- ¿Porqué?

-Porque eres muy atractiva, estás buena, eres mayor de edad, y tienes un rostro envidiable.

Frunzo el ceño porque si, me adoro, me gusta como soy, sé que mi cara es bonita y eso se lo debo a la zorra de mi madre, que la verdad que si era bonita la tía. El cuerpo supongo que lo tengo así de lo poco que como, es imposible engordar, y si tengo buenas tetas y un buen trasero. Unos ojos azules cielo que llaman mucho la atención y unos labios gordos.

Soy sexy, muy sexy, y me encanta.

-Sé que lo soy.

-Encima con ese carácter ganarás mucho más ,créeme.

-Me dijiste que varios miles de euros al mes- vuelvo a recordar, porque ese es em dinero en el que estoy interesada.

-Efectivamente, todo dependerá de tu trabajo, pero generalmente dado el rango al que te vamos a poner, rondará los cinco mil euros al mes.

No puedo evitar sorprenderme a pesar de que ya he mantenido esta conversación con ella. Pero a ver dónde encuentras un trabajo donde te paguen esa cantidad de pasta. Lo necesito, porque quiero una casa, un techo, comida, una cama, quiero muchas cosas que por ahora no he tenido.

-Entro en el negocio.

-Así me gusta, el jefe estará encantado de conocerte- sonríe de forma segura de sí misma.

Esta mujer rondará los cuarenta años, pero está operada de todo el cuerpo por lo que no me sorprendería si todavía tiene un par de años más. Que artificial es. Y no la estoy criticando por ello, porque si tienes un defecto me alegro que lo soluciones. Pero joder, que necesidad hay de destrozarte la cara. Ninguna. La genética se ha portado muy bien conmigo. No me operaría absolutamente nada del cuerpo.

-En el momento en que no obtenga el dinero que me dices, dejaré esta mierda.

-Todas las dudas que tengas puedes hablarlas con él, que no tengo duda alguna de que te tratará como un diamante.

La forma en que menciona diamante es extraña, como si hablara de algo en particular. Pero ni idea vaya, de todas formas, me chupa un huevo el jefe. Yo solo quiero la pasta. Nada más, en cuanto obtenga la cantidad de dinero que quiero, me largo, chao, hasta luego.