EFÍMEROS DIAMANTES { #2 Triología Diamantes }

28: "Ámbar"

A la mañana siguiente Roxy yo nos dirigimos al despacho de Julián para las nuevas misiones que tenemos propuestas.

He descansado como hacía mucho tiempo que no lo hacía y no sé si es por como me divertí ayer, o por que simplemente estaba agotada. He llegado a la conclusión, de que es una mezcla entre las dos cosas.

-Tenemos que volver a repetir lo de ayer- la voz de la peli roja me saca de mis alucinaciones.

-La verdad que si- asiento con la cabeza- fue mejor de lo que me imaginaba.

-Tú siendo tan negativa como siempre.

-Prefiero no emocionarme, así la ostia luego no duele tanto- aunque suene cruel, así es- que es lo que suele pasar.

-Prefiero ver la vida de otro color.

-Blanco, tú sin duda lo ves todo blanco.

-Y tú negro- contraataca entre risas- muy muy negro.

Me encojo de hombros por que tiene razón, para que negar una evidencia que cualquiera puede observar si pasa un tiempo conmigo. No soy miss simpatía, ni miss positivismo, soy una persona realista, tirando incluso a pesimista pero que cuando algo no le sale bien, no se desploma ni se hunde como la mayoría de seres de esta sociedad de cristal en la que vivimos.

Tantas malas noticias me he llevado en la vida, que ahora pocas cosas me hacen caer, solo aquellas que tienen que ver con las personas que más quiero en el mundo: mis amigas o Julián. El resto, aunque suene muy cruel, me la puto bufa.

Entramos al local y vamos directamente a ver al jefe, quien nos recibe con una sonrisa en su rostro dando señales de felicidad. Vamos, que no soy la única que ha dormido muy bien hoy.

-Buenos días chicas.

-Buenos días jefe- digo devolviéndole la sonrisa, por que, ante todo, el trabajo pienso respetarlo.

-Buenos días- le responde Roxy de buen humor.

-Tengo buenas noticias para vosotras, o espero que lo sean vaya.

Las dos nos miramos con curiosidad, porque no es algo habitual en Julián, ir soltando estas noticias, así como así. Tiene que ser algo bueno seguro.

-Adelante- le animo hablar por que me muero de la curiosidad, básicamente.

-Por primera vez, vais a trabajar juntas en un proyecto- esta vez si estamos realmente sorprendidas las dos- ósea que es el mismo proyecto para ambas.

La sonrisa de Roxy deja claro que tenía ganas de trabajar conmigo, y sinceramente, yo también tengo gana de algo así, ya no solo la veré en casa o en el gimnasio, sino también en las horas de curro.

- ¿En serio? - Roxy no puede creerse lo que el jefe está soltando por la boca.

-Se trata de una empresa familiar, donde los accionistas y jefes son dos hermanos, uno de cuarenta años, que será el tuyo Roxy, y otro de treinta y cuatro, que será el tuyo Chloe.

Las dos asentimos con la cabeza sentadas en los sillones frente a él, mientras escuchamos atentas cada palabra que suelta por la boca.

>>Ya os tiene fichadas y saben quienes sois, así que es trabajo fácil para vosotras, solo que esta vez tenéis un mes para lograrlo.

- ¿Y de cuanto será la recaptación esta vez? - pregunto con curiosidad, por que el dinero siempre me ha encantado.

-80.000 euros, cuarenta mil de cada una de las cartillas de cada hermano.

Abro los ojos sorprendida, eso significa que tienen una gran cantidad de dinero, porque, si no, eso es muy exagerado y podrían enterarse, pero si Julián lo dice, no dudo ni un instante de que por algo será, los tiene estudiados desde hace mucho tiempo, como a todos los clientes que escogemos.