El Libro Perdido © |Luke Hemmings|

Capítulo 26

 Dedicado a Bianca Valeria Soto, parte del capítulo me recuerda a ella. Ella también me enseño muchas cosas…  :)

—Entonces, pi al cuadrado por b más a, nos daría el porcentaje de... —soy cortada por el sonido de mi teléfono—. Lo siento, espera —le digo a Seth y veo la pantalla—. Es mi madre.

Luego contesto.

—¿Si? 

—Alice, ¿Dónde estas? —pregunta ella.

—En la biblioteca, ayudando a un amigo con una materia, ¿Qué ocurre? —respondo mirando a Seth, él está atento, sus ojos marrones me miran. 

—Estoy en el otro lado de la ciudad, con tu papá, ocupada, y necesito que vayas a buscar a Tim a la casa de su amigo, ¿Te molestarías en ir lo a buscar justo ahora?

Miro a Seth y suspiro.

—Eh... No, está bien. Ya voy ¿Dónde es?

—La casa de los Sangster. De hecho, esta cerca de la biblioteca.

—Oh, de acuerdo —asiento.

—Perdón por molestarte, Alice —se disculpa.

—No, está bien. Bueno, adiós.

—Adiós —contesta y cuelgo.

—¿Entonces? —pregunta Seth, sobre la llamada.

—Lo siento, pero la clase de Mate deberá de dejarse hasta aquí —digo levantándome y recogiendo las cosas—. Mis padres están ocupados, y debo de ir a buscar mi hermanito Tim a la casa de un amigo. De verdad lo siento.

—Hey, no hay problema —dice suave, viéndome mientras se levanta—. Está bien, igual creo que ya entendí esta parte, tenemos al menos una hora aquí.

—Bueno... —digo colgando mi mochila en mi hombro.

—Ya que no tengo nada mejor que hacer, ¿Puedo acompañarte? —pregunta, colgando su mochila de su hombro.

—¿De verdad?

—Sí, me has enseñado, puedo pagarte el favor.

—Verte tocando el piano es el pago —le recuerdo.

—Igual. —Se encoge de hombros, sonriendo—. ¿Entonces?

—Está bien, vamos. Pero deberías de ir a practicar Matemáticas, tu examen es el viernes.

—Na, demasiadas Matemáticas en un día —dice divertido.

Yo niego, sonriendo.

Nos dirigimos a la salida de la biblioteca.

***

Nos acercamos a la casa y veo a Tim sentado en las escaleras del porche, hablando con Ben y su amigo Jordano Sangster, un pequeño castaño de ojos marrones, estando al cuidado del mayor de los hermanos Sangster, Thomas, un chico pelirrojo castaño de mi edad, callado y con mirada fuerte, siempre misterioso, su hermana melliza, Elizabeth, ambos también estudiaron conmigo en la primaria. Elizabeth está en danza con Wendy. Antes él y yo nos veíamos mucho allí, suele pasársela con su hermana o/e ir allá. 

-Hey. -saludo.

-Hey. -saludan los niños.

-¿Qué tal? Thomas. -miro al mayor. Seth permanece a mi lado.

-Todo bien, Alice, ¿Que tal tú? -pregunta este.

-Bien. -asiento- Hola Ben.

-Hola, Alice.