Recalienta||Joerick||Terminada||

III

—¿Qué?

—Solo tienes que decirle cosas como que tiene buen culo y que es hermoso, si se acerca- pidió el rizado- es más, tal vez si digas eso se asusté y se alejé más rápido.

—¿Te estás haciendo pasar por mí? Eso es robo de identidad- reclamó.

—¡Zabdiel!- chilló.

—No voy a hacer eso, Joel- declaró rodando los ojos.

—Joder, solo te estoy pidiendo una cosa ¡una!- chilló enojado- siempre estoy a tu maldita disposición haciendo lo que me pides por que se supone que somos amigos pero yo te pido un maldito favor que ni siquiera es seguro que tengas que hacerlo y en cuyo caso no pierdes nada no lo puedes hacer. Vete a la mierda- espetó enojado queriendo alejarse del rubio que lo tomo de la muñeca para que se volviera a sentar.

—Dios, Joel, no es para tanto, no seas tan dramático por favor- dijo el más alto, irritado- ¿qué quieres que le diga?

—Cosas como que es muy lindo, qué está muy bueno, que tiene buen culo- se encogió de hombros aún enojado con su amigo.

—¿Tiene buen culo?- cuestionó el mayor.

—¿Te importa?- cuestionó el rizado entre cerrando los ojos con furia.

—Quiero tener una base por sobre lo que digo, se que es muy lindo pero no sé qué tan bueno ni qué tan buen culo tiene- se justificó- y sinceramente no sé de dónde secas eso sí siempre usa ropa holgada que no deja ver nada- observo el rubio.

—Y-yo... eso no importa- rodó los ojos.

—Vamos, se supone que soy tu mejor amigo, cuéntame ¿te lo cogiste diciendo que soy yo?- cuestionó, era una exageración pero sabía que con eso el rizado le contaría lo que verdaderamente pasó.

—¡No!- gritó llevando todas las miradas hacia él- lo siento- les sonrió- sólo... nos pasamos un par de fotos- murmuró ya que aún habían algunas miradas sobre ellos.

—¿Qué?- exclamó sorprendido, el ojiverde no parece el típico chico que va por ahí pasando fotos de su cuerpo pero bien dicen que no juzgues un libro por su portada- ¿puedo ver?- pidió, el rizado negó.

—No.

—Pero, como ya te dije, necesitó tener una base por sobre lo que digo- sonrió haciendo que Joel gruña.

Sacó su celular del bolsillo buscando dicho chat, era la forma más fácil de evadir a Zabdiel; dándole lo que quiere.

Le mostró una foto del ojiverde que se encontraba boca abajo, se venía la mitad de su cara algo desenfocada y de fondo se veía perfectamente su trasero desnudó.

En el instante que vio esa foto Zabdiel no pudo sentirse más arrepentido de haberle dado otro número y no el propio.