𝐎𝐔𝐑 𝐃𝐈𝐀𝐑𝐘 | viendo una película/jugando

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----- 𝐎𝐔𝐑 𝐃𝐈𝐀𝐑𝐘 -----
día tres

No acostumbraba caminar tanto, Freddy sentía mucho frío, habían salido a una pequeña cita, el menor no había pensado que iba a haber tanto frío, pero lo hizo. Caminaban por las calles, Freddy como fue mencionado, no acostumbraba siquiera a caminar por la calle, siempre era llevado a todos lados en auto, por lo que eso era diferente para él. Chip tenía experiencia, se notaba.

Pasando por la multitud de gente en aquella luminosa ciudad, Chip le agarraba de la mano en todo momento, no queriendo que se pierda o algo. No fue minutos después cuando se dió cuenta de que algo pasaba, mirando a Freddy, notando que temblaba.

—Lindura, te estás muriendo de frío, ven conmigo, te daré mi suéter.—Habló, preocupado de inmediato, apunto de quitarse el suéter, pero Freddy negó repetidas veces; Chip no lo aceptó, quitándose el suéter que traía, se le dió al menor, vistiendo al menor con este, y luego besándole su nariz, estaba fría.

—No tenías porque hacerlo.

—Claro que tenía, mi amor, te estabas congelando, corazón.—Rió suave, besándole una vez más, pero en los labios.

Chip le ofreció su mano otra vez, que con todo gusto la agarró, caminando más cómodo con el mexicano, quien tenía una buena resistencia a esas temperaturas, por lo tanto podría estar así sin un abrigo, todo para que Freddy no se sienta mal o se enferme.

—¿Qué quieres hacer cuando lleguemos a casa, mi amor? ¿Quieres ver una película o algo?—Le preguntó el mexicano, mirándolo, el menor quien no sabía que decir, se quedó pensando.

—La película está bien.—Sonrió, viendo a Chip después.—Con eso me refiero a solo la película. Llevamos casados bastante tiempo, se que cuando vemos una película, para ti solo son los primeros treinta minutos y después sabes lo que pasa entre nosotros.—Dijo, agarrándole de la mano un poco más fuerte, pasando por las calles.

—Pero lo disfrutas.

—¿Cuando dije que no lo hago?

Chip rió con eso.
—Bien, bien. Vayamos a comprar algo antes de que regresemos a casa, mi amor. Cualquier cosa para que podamos ver la película, hace frío, podríamos quedarnos todo el resto del día en cama.

Asintió, yendo al supermercado, entre plática y suaves risas entre ellos, hablando de varias cosas, entrando para comenzar a dejar las cosas que iban a comprar en el carrito de compra. Freddy iba todo el tiempo aferrado al brazo del mexicano que empujaba el carrito.

—Ve por tu lechita, mi amor, yo espero aquí, pequeñito, tengo que ver algunas otras cosas, te veo aquí en unos minutos.—Le dió un beso en la frente, después dejando que vaya.

Chip se quedó a ver algunas cosas que debía de comprar para hacer la comida. Freddy agarró leche y chocolate en polvo. Cualquiera que viera eso, pensaría que Freddy tiene un bebé en casa, pero no, la leche era para él.
Regresó, colocando todo dentro del carrito de compra.

—¿Ya está, pequeño? ¿No quieres algo más? Puedes comprar cualquier cosa que quieras. Por este día no te diré que no a eso.—Habló.

—No, mi lechita es suficiente.

Chip sonrió.
—Cualquiera que viera, supondría que tenemos un bebito en casa.—Rió con eso, viendo al menor, quien hizo un puchero.

—Tendremos un bebé.

—... Era puro pedo.—Cambió su expresión a preocupación y miedo.

—Bueno, ahora ya no es eso, lo hemos hablado, quiero una familia, quiero bebitos contigo, cuidarlos, crecerlos, será lindo, además, el dinero no es un problema, vivirán muy bien.—Sonrió.

—¿Cuántos bebés quieres, mi amor?

—Ocho.—Se dió la vuelta, yendo ahora a buscar unas galletas.

—No me asustes, wey.

—Lo digo en serio.

Miró al mexicano, con esa expresión de seriedad.
Yendo a casa, estando en la cama después de cambiarse la ropa, Freddy se acurrucó, viendo la película con el mayor, dándose besitos de vez en cuando, abrazados. El menor a veces se removia, buscando más comodidad, sonriendo al encontrarla.

Después de la película, ambos estaban besandose, Freddy riendo entre medio, jadeando caliente y ligero.

—Juguemos algo, corazón.

—Mmh, está bien.

Freddy pensó que iban a "jugar" pero ahora está vez si era de verdad jugar. En unos minutos, ambos jugaban Animal Crossing.

—Pensé que si íbamos a tener sexo.—Freddy habló, todavía con las ganas de ello.

—Dijiste que no querías nada de eso hoy. Lo sostengo, wey, no hay cogidota para ti está noche.

𝐎𝐔𝐑 𝐃𝐈𝐀𝐑𝐘 | frechip ; treinta días, terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora