Y meses después me encuentro aquí, sola en mi habitación recordando una historia que solía ser hermosa pero que luego se volvió realmente tóxica.
Creí tener amor, creí amar y ser amada, creí tantas cosas que al final resultaron ser falsas.
El día que rompió mi pobre corazón lo entendí todo, entendí que quizás yo no era lo que él buscaba pero también entendí que él no era lo que yo necesitaba. Me desilusioné, de verdad que lo hice, creí en él y puse lo que restaba de la esperanza que tenía en el amor en sus manos, le dí el poder de hacerme feliz pero también de destruirme... y eligió la segunda opción.
Tardé sí, pero sané. Me volví más fuerte de lo que un día fuí, aprendí que a fin de cuentas jamás se termina de conocer a una persona.
Decidí darme un tiempo, darme un tiempo para sanar, para conocerme y para replantearme seriamente si quería seguir así. Decidí que merecí y merezco muchísimo más de lo que él me podía ofrecer solo que en aquel entonces me dejé cegar por la dulzura de sus palabras, pero ya no más.
Y sí, claro que llegaron otros prometiendo un amor eterno, un amor sincero pero ya no creía en palabras bonitas sino en hechos y ninguno hizo nada para demostrarme que me quería.
Llegué a tener cierta adicción por el helado y las cosas frías, supongo que fue porque quería volverme así, fría. ¿Pero sabes qué? entendí que el hielo es lo mejor para enfriar un corazón que está hirviendo por amor.
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History
Short StoryDespués de tantas despedidas esta vez no me deprimí, quizás fue por la costumbre de terminar y volver y ahí me di cuenta de que lo nuestro no estaba bien. Después de tantas despedidas él no volvió y yo no estaba dispuesta a volver.