Venezuela-Caracas.
14/03/2019.Ambas miradas se encontraban en una lucha interna, los ojos marrones llenos de molestias, miraban directamente a aquellos color miel cargados de sorpresa. Realmente aquel encuentro de cierto modo fue inesperado, para ambos. Pues la joven que había capturado el asiático, la misma que había intentado robarles, no era otra más que Azul Guerrieri.
Una gran amiga de Lizabeth, y la cual la solía llamar hermana menor.
Aquella chica se había ido a comienzos de febrero a las casas de sus abuelos, la cual quedaba Caracas, esto debido a unos problemas familiares, que tenía que resolver su madre, referente a una herencia de una casa que le había dejado su difunto marido. Por ello la sorpresa del asiático, no se debía a haberse encontrado a la joven en aquel estacionamiento.
El motivo realmente era el hecho de que ella siguiera viva.
Aquel repentino rugido provocó que ambos giraran sus cabezas, encontrándose con un tanque infectado. Aquellos infectados de dos metros y cuerpo corpulento, con algunas zonas cubiertas por costra, las cuales realmente se veían muy resistentes, con venas de tonalidad moradas casi al punto de ser negras, y aquellos característicos ojo blancos cual perlas.
Un escalofrío recorrió el cuerpo de Azul.
El asiático no tardó en levantarse con destreza, provocando que la chica siguiera su ejemplo. Apreciaron como el tanque corría en dirección al vehículo, atraído por la alarma anti-robos. Los hermanos quienes se encontraban más cerca, no dudaron en correr lejos de aquel vehículo, en dirección a la camioneta de F.A.E.S
Los puños del tanque impactaron en el campo, provocando que este se hundiera, mientras el regía con fiereza, igual que un orangután salvaje. La hojalata se dobló cual plastilina moldeable, mientras que todos los supervivientes miraban con terror la escena.
Pero él no sería su único problema.
Pues múltiples rugidos y gruñidos comenzaron a acercarse a grandes velocidades, uniéndose con el resonar de millones de pisadas. Un grupo desvió la mirada hacia la entrada del supermercado, apreciando como los infectados, comenzaban a salir en muchedumbre siendo atraídos por el ruido.
Si no escapaban rápido morirían en aquel lugar.
El asiático no perdió tiempo, tomando el fusil en mano y tras apretar el gatillo, lanzó una ráfaga de balas en dirección a los infectados, los cuales comenzaban a salir del establecimiento. Los cuerpos fueron perforados y empezaban a caer cual peso muertos, provocando que aquellos seres tropezaran pero no dejarán de correr hacia sus objetivos.
El repentino Click, click que avisaba que el cargador estaba vacío se hizo presente . Kai chasqueó la lengua, entonces divisó por el rabillo del ojo, como una tapa de hojalata volaba en dirección a ellos. En un reflejo automático, se abalanzó contra Azul y ambos cayeron al suelo rodando, mientras lo que alguna vez fue el capó de un vehículo, impacta dónde hace segundos estaban parados.
Al levantar la mirada, se encontró que el titán estaba rugiendo en su dirección, a veces se preguntaban si realmente eran ciegos.
—Corre hacia la caminata—Ordenó el asiático decidido. Mientras colocaba las llaves en las manos de Azul.
—¿Qué? —cuestionó ella.
—Que corras hacia la camioneta.
Antes de que ella pudiera rechistar, el asiático sacó el revólver de asalto, apuntando y disparando a la derecha de la joven. La detonación provocó un pitido en la oreja de la joven. Mientras un infectados preparado para encajar su diente, en la piel de ella, caía muerto a su lado y un charco de sangre se comenzaba a formar.
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【✜ Vida Entre Muertos ✜】【Saga Ángeles Exterminadores】
Ciencia FicciónUna nueva amenaza se extiende por todas las regiones de Venezuela, hasta hundir el país en la desesperación y las tinieblas. No importa a donde mires pues lo único que encontrarás será aquellos muertos vivientes, personas que, por azares del destino...