Good Omens #Fictober2019 #IneffableLATAM

19. Amor

Cuando acabaron de salvar el mundo (aunque no hicieron mucho en realidad) pasaron unas horas en casa de Anathema antes de tomar el autobus que los llevaría de regreso a Londres.

Ahí, Aziraphale encontró que la ocultista compartía su gusto por la lectura, la chica poseía una pequeña colección de libros que a decir verdad era un tanto curiosa para el ángel.

Cuando todos estuvieron reunidos en la cocina el peliblanco se vió unos momentos solo con aquellos libros, un vistazo rápido hizo que uno de ellos llamara su atención prolongando su reunión con el resto para cenar.

"Quod anima in occulto"

Autor desconocido y pareciendo estar escrito en latín, apenas y lo abrió para leer la primera página cuando un estornudo por el polvo lo hizo desistir. Anathema fue a buscarlo al estar extrañada por su tardanza, el ángel por su parte al escucharla llegar regresó el libro a su lugar.-¿Todo bien?.- Preguntó.

-Oh, si querida solo estaba admirando tus libros.-

-Ah...será mejor no abrirlos, no son hmm...'Libros normales'.- Al escuchar aquello se arrepintió de haberlo hecho ya, y se cuestionaba que habría de malo con ellos pero moría de verguenza confesar lo que acababa de hacer.

Crowley averiguaría esa misma noche las consecuencias de aquello, iniciando especificamente cuando tomaron al fin el autobus a Londres, había sido sorprendido por la respuesta afirmativa de Aziraphale a su propuesta de pasar la noche con él, pero más se sorprendió que decidiera sentarse junto a él en aquel vehículo siendo que siempre lo evitaba por las apariencias, aunque ahora parecia ser lo que menos le importaba.

Casi al instante de empezar su camino de regreso el peliblanco hizó otra cosa inesperada, tomarlo de la mano. El demonio no se negó ante aquello aunque ciertamente estaba cada vez más desconcertado y el amor que le tenía oculto comenzó a tomar más fuerza, pero no dijo ni una palabra, pues no quería equivocarse sobre aquello, no con tantas horas de camino.

Llegaron casi a media noche a su departamento, el ángel sonreía más de lo usual y Crowley quería atribuir aquello a la bebida que habían tomado juntos o al pequeño momento de libertad que tenían, pero todas sus teorias se derrumbaron una vez entraron al edificio, donde Aziraphale intentó besarle.

Se había quedado en shock, de manera inesperada el ángel lo había acorralado contra la pared acercandose lentamente a su boca, embelesado por la situación Crowley también estuvo dispuesto a aquel beso pero en el último momento reaccionó, notando que algo estaba mal en todo eso. Lastimosamente para él lo tuvo que apartar.- ¿Estás bien Aziraphale?.-

-Estoy mejor que nunca querido.- Sonrió con ternura.- Solo...creo que es hora de mostrar lo que en verdad siento...-

Sin creerle mucho logró escabullirse por unos momentos con su celular llamando a la chica de las profecias.- ¿Le hiciste algo a Aziraphale?, Por que si es asi...-

-¿De que estás hablando?.- Preguntó somnolienta la muchacha, se escuchó como el otro chico le pedía que volviera a dormir.

-Se está comportando...raro, más cariñoso de lo usual...-

-¿Ha dicho algo raro?.-

Crowley dudó, y con pena admitió.- Algo de mostrar sus sentimientos.-

-Espera él dijo que había visto mis libros tal vez...-No se escuchó nada del otro lado de la línea por unos minutos luego la respuesta llegó a él.- Lo que pensaba, abrió uno...-

-¿Y eso que?.- Preguntó incrédulo y ligeramente molesto, Aziraphale estaba llamando a la puerta del baño donde estaba.

-Soy una 'bruja' eso es magia poderosa, aunque no sabía que tanto. Ese libro, "Lo que el alma oculta" con tan solo abrirlo hace que la persona muestre su verdadero ser.-

-¿Qué?, ¿Incluso un ángel?.-

-Eso parece...-

-¿Cuánto tiempo estará asi?.-

-No lo se, Tal vez solo 24 ya que ni siquiera lo leyó, después de eso todo acabará, no debe de ser un gran problema ¿Verdad?.-

El pelirrojo tardó en contestar solo para decir un leve.- No.-

Terminó la llamada y abrió la puerta encontrandose de frente con el peliblanco quien le miraba con pena. Si lo que Aziraphale mostraba en verdad era amor por él, queria decir que aunque aquel extraño efecto acabara podría tener alguna oportunidad con él.

O tal vez esa noche sería la única en la que se amaran mutuamente, pues aún tenían que arreglarselas para que sus bandos no los acusaran de tración, fuera lo que fuera, necesitaba probar sus labios por quizás única vez.