Llevaba más de una hora en la cama acostada. Mi cabeza estaba apunto de explotar y tenía unas inmensas ganas de vomitar. Christopher había tenido que irse temprano ya que tenía unas cosas que hacer para la banda pero alcancé a despedirme de él, en una manera complaciente.
Todo había ido bien en nuestra despedida del día de hoy hasta qué tuvo que mencionar lo que en ningún momento cruzó por mi cabeza. Mientras estábamos acostados abrazándonos el uno con el otro.
-¿Ina? -me dice besándome mi cabeza. Yo solo levanté la mirada en muestra de que prosiguiera- quiero llevarte a Ecuador, quiero que conozcas a las mujeres que son dueñas de mi corazón -yo lo miré con el sueño fruncido como una niña pequeña que quería el juguete más caro aún sabiendo que ya lo tiene en su repisa- mi madre, mi abuela y mi hermanita pequeña. Claro que al otro par de tontos también -me imagino que se refiere a sus hermanos- aunque a Jonnathan ya lo conoces.
Yo no había dado respuesta alguna. La verdad es que se me hacía muy precipitado todo pero la felicidad en su mirada me decía que no podía negarme, no ahora que parecía emocionarle.
-Ammm, está bien... -dije sin estar muy convencida.
Me sentía insegura al tal vez en algún futuro conocer su familia. Creo que es muy pronto para hacerlo, tal vez todo vaya bien ahora pero nadie sabe lo que ocurrirá en un futuro. Por más que queramos no tenemos asegurado nuestro destino y nada nos garantiza que seguiremos juntos para entonces.
-¿Qué ocurre? -me dice mientras se sienta a la orilla de la cama y se coloca su camiseta amarilla neón.
-Nada... -le digo mientras yo también me colocaba mi ropa interior de nuevo. Se me iba a hacer tarde para llegar al trabajo. Me convenía dejar varios programas grabados para así tener más tiempo de descansar y pasar el rato.
-Bueno. Ya me tengo que ir -dice colocándose de una manera tonta los tenis que combinaban con su camiseta. Se acerca y me da un beso de pico rápido y en la boca y me abraza- Aunque hayamos hecho de todo hace unos minutos, sigues oliendo a ese delicioso perfume.
Me hubiera gustado que me preguntara en realidad qué es lo que yo tenía. Así somos alguna de las mujeres, sino es que todas, en realidad. Nos gustaba que nos rogaran a pesar de todo. Me hubiera gustado que me preguntara si en realidad estaba lista para conocer a su mamá. Me daba el lujo de seguirla en redes sociales y parecía ser una mujer buena, tierna y que en realidad amaba a sus hijos. Me contaba que era una buena madre, Christopher se expresaba muy bien de ella y de su abuelita que era como su segunda mamá; pero considero que vamos muy rápido ahora. Recién empezamos a salir, a penas vamos a cumplir una semana y ya quiere que conozca a su madre. No quería que todo fuera perfecto y al final del día sea solo un sueño del cual sé que tengo que respetar algún día.
-Que te vaya bien -dije levantándome de la cama en ropa interior y siguiéndolo a la puerta.
(. . .)
-Estoy demasiado cansada. ¿Por qué no me avisaste que me tocaba participar en una actividad? o mejor aún, ¿por qué no me dijiste que íbamos a hacer yoga? Yo nunca he hecho yoga -dije mientras me dirigía a mi camerino con Nancy detrás mío.
-Te fue bien -me responde- no me dijiste que era demasiado flexible -dice soltando una risa. Yo solo voltee los ojos y entré a mi pequeña habitación.
-Bueno. Volvamos a lo que estábamos hablando. ¿Cuánto programas tenemos adelantados? -le digo tomando una toallita para la cara y comenzando limpiarme el maquillaje que tanto me pesaba en mi rostro.
-Unos cinco, ¿por?
-Quería pedir una semana libre. Sé que para eso tengo que tener programas grabados, así que le diré al CEO si me da permiso de faltar -digo para en seguida quitare las pestañas postizas. Odiaba traerlas puestas pero me gustaba quitármelas.
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"𝑳𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒂𝒃𝒔𝒐𝒓𝒃𝒊𝒔𝒕𝒆 𝒅𝒆 𝒎𝒊" #2 ||Christopher Vélez|| TERMINADA
Fanfiction"Bastante te has llevado como para querer tomar lo que algún día te perteneció..." "Estoy tan vulnerable a ti que sé que aunque ya no te quiera en mi vida, te daría todo para que no te fueras..."