"Mi Chico Malo" [Editando]

13. |La Ley de Hielo|

13. |La ley de Hielo|

"Cada que un Demonio pierde de vista a su ángel, pierde la voluntad de volver a ver la luz divina "
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<<Santiago>>

Voy a perder la cordura.

¿Alguna vez han sentido que lo tienen todo pero al mismo, lo pierden en un abrir y cerrar de ojos?

Por que yo si. Creí que me iba bien por una vez en mi vida.

Hace una semana que cada que veo a Maddie, por casualidad cuando nos encontramos frente, pasa de largo, ignorando mi presencia. ¡Me ha ignorado!.

Es como si para ella no existiera.

La primera vez que nos vimos fue por un pasillo de la Universidad, al momento que sus bellos ojos verdes dieron con los míos, se dio la vuelta para irse a otro pasillo. Para el segundo encuentro, la vi sentada en una banca comiendo fruta y cuando estaba por acercarme rápidamente, se apresuró a levantarse e irse. En el tercer intento, estaba por una máquina expendedora y cuando estaba por hablarle simplemente me rodeo, sin ni siquiera dedicarme una mirada.

Prácticamente huye de mi persona.

Y ayer casualmente saliendo de una clase me la tope en el pasillo que daba a la cafetería, con Sharon y Maddie al verme se fue directo a los baños.

Y está mierda me duele.

¡Me esta evitando! Se aleja como si fuera una apeste.

Pero, ¿Por qué? ¿Que hice? ¿Será por lo paso el pasado fin de semana? ¿Fueron por los besos? Aunque, no creo, porque ella también me correspondió a los besos.

Algo paso para que Maddie me este esquivando cada vez que me ve. Lo cual me está matando de desesperación.

Pero la pregunta es, ¿Que fue lo que hice?

Mi único delito fue robarle besos a esa preciosa rubia que me está volviendo loco cada que la veo.

—¡Joder!—mascullo con frustración despeinando mi cabeza.

¡Carajo! ¡Carajo! ¡Carajo!

<<¿Que hice güerita para que me ignores así? Yo solo quiero volver a tener tu atención. Quiero que tus bellos me miren, me sonrías y me hables como antes.>>

Estoy jodido. En mi vida jamás me vi queriendo llamar la atención de un chica. Sobre todo muriendo por volver a tener su atención.

Necesito volver a tener sus deliciosos labios.

Deseo que esos preciosos ojos verdes me vuelvan a ver a mi y no me esquive.

Mantengo mis ojos cerrados, respirando profundo y tratando de recordar que pueda haber hecho, para tener está Ley de Hielo.

Esto es una maldita tortura. Se suponía que me gustaba ver a las personas a mi alrededor huir de mi, pero, ahora, no me esta gustando para nada el ver a la chica que me gusta ignorarme.

Me pasó mis manos por mi rostro irritado por toda esta situación.

<<Un momento Santiago>>, me incorporó de golpe abriendo mis ojos.

Será que ella, ¿se entero sobre esos malditos rumores que hay de mi?

Maldita sea, por su propio bien de Frank mas le vale haber mantenido la boca cerrada y no se le haya ocurrido abrir su maldita boca.

—¡Maldición!—pateó el bote de basura que tengo a mi lado. —Maldita sea— murmuro mal humorado.

—Hola, romeo, ¿Que haces?— ni siquiera me tengo que dar la vuelta para ver al idiota de Alex.