"Mi Chico Malo"... [Editando]

9.|Confesión|

9.|Confesión|

¿Quién dice que un demonio no se puede enamorar de un ángel de luz?

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<<Santiago>>

—No pienso preguntar, sobre lo que estabas haciendo — es lo primero que le digo a Christian viéndolo salir de un salón con más antes, viendo salir a una chica toda despeinada.

Esté solo se ríe como idiota, para acomodarse la ropa, pasarse las manos por su cabello y soltar un suspiro.

—Limpiando el salón — responde tranquilamente para colocarse unos lentes.

—Y yo soy millonario —lo rodeó para empezar a caminar hacia mi casillero, y detrás mío, escucho sus pasos para alcanzarme.

—¡Jajaja! Muy gracioso.— se coloca aún lado mío. —Por cierto— me da un codazo. —No me contaste que estás peleado con Monik — comenta, y lo miro de reojo para negar.

—No se de que hablas — le respondo con indiferencia.

—Ay, vamos hombre. Los chicos están diciendo que te enojaste con ella y que están en faceta de "separados"— hace comillas con sus dedos y lo miro con aburrimiento.

—Todo lo contrario, ella se enojo conmigo, pero ahora está más tranquila.— es lo único que le puedo decir.

—Caramba hombre, ¿Tan rápido y la hiciste feliz? — se burla riéndose.

—No, nada de eso. En un principio ella se molestó conmigo, pero al día siguiente estaba como si nada.— le explico, llegamos a mi casillero y me puse acomodar mis cosas.

—Uy, acaso ella ¿te vio con otra chica?— pregunta curioso, recargando  sobre unos casilleros que están al lado del mío. —¿Es por la chica de las carreras?— me vuelve a preguntar.

Suelto un suspiro con cansancio.

—Solo hablamos, ella se me acerco para felicitarme y ella mal interpretó las cosas pero como es Monik se le paso rápido— le aclaro un poco irritado.

—Ah, entonces, si estaba, por dónde te había dicho— susurra, cierro la puerta de mi casillero para mirarlo.

—De hecho, ella no estaba ahí. — le cuento, haciendo que borre de golpe su expresión.

—¿Cómo dices?— pregunta perdido de contexto.

—Lo que escuchaste — miro hacia los lados verificando que nadie nos escuché.

Lo agarro de los hombros para irnos hacia un lugar apartado.

—¡Explícame hombre!— exclama ansioso por saber lo que pasó.

Casi rode los ojos, ante su entusiasmo para saber el chisme. Había olvidado que mis amigos aman los chismes.

—¿Te acuerdas que te pregunté en donde estaba Monik?—

—Ah, si, ¿Que paso?—

—Que me fui hacia la dirección que me diste, pero al  llegar allí, no estaba ella, me equivoqué y en su lugar había otra chica, la cual confundí, en un principio me aclaró que me confundí de persona y cosas asi, el problema fue que en lo que ella estaba hablando, yo solo me dediqué en mirarla.—

—¿Cómo un acosador?—

—Bueno, al decirlo así, suena feo pero si, eso hice. — me paso las manos rostro. —Y al final hice algo.— confieso llamando su atención.

—¿Que cosa?— enarca una ceja curioso.

—La besé — suelto y se queda perplejo.

—¿Cómo?— abre sus ojos sorprendido.