𝓝𝓾𝓮𝓿𝓮 𝓶𝓮𝓼𝓮𝓼･*:.˛ ˚𝗦𝗠

𝓣𝓻𝓮𝓲𝓷𝓽𝓪 𝔂 𝓽𝓻𝓮𝓼

Días después

Ya era noviembre, y ya habíamos decidido todo acerca de Charlotte y nuestra casa. Incluso, Luis me acababa de llamar diciendo que la casa ya estaba lista para nosotros, así que Shawn y yo planeamos irnos una semana después de que nos dijo.

Al principio se me complicó aceptar todo, pero Shawn me consoló diciendo que no estaría sola porque estaría él conmigo y nunca se separaría de mi. Luego me comentó que sus padres, Aaly e incluso Mark, estarían conmigo un par de meses. También dijo que mi familia podría visitarnos al igual que los chicos de Magcon porque estábamos aunque sea un poco más cerca. Me confirmó que Alessia y Andrew estarían más seguido aquí porque tendrían que revisar lo del próximo tour. Y concluyó diciéndome que Dua y Jack podrían quedarse con nosotros el tiempo que quisieran. Entonces, de un momento a otro, ya no me encontraba sola.

El día de hoy viajaríamos junto a la familia Mendes y Mark, a Charlotte. Ya todo estaba planeado, así que sólo era cuestión de volver a iniciar en un nuevo lugar. Dua, me dijo que se encontraba muy ocupada como para acompañarme, pero me aseguró que dentro de una semana vendría a quedarse con nosotros.

—Elle—llamó Shawn.

—¿Si?—volteé a verlo con atención.

—¿Recuerdas que te dije que estaba trabajando en una canción con Camila?—asentí—bueno, vamos a grabarla mañana en el estudio, y pasado mañana iremos a hacer el videoclip.

—De acuerdo, cariño—dije sin problema—¿por qué esta vez no me diste un adelanto de la canción?—le pregunté con curiosidad.

—Porque Mila no estaba, y era necesario que estuviera para que te la cantaramos completa—contestó causando que lo vea confusa pero no entré en detalles.

—Está bien—respondí sin darle mucha importancia.

—Siento que esta canción va a ser revolucionaria, marcará tendencias—aseguró haciéndome sonreír.

—Eres Shawn Mendes, siempre marcas tendencias—comenté entre risas que después le contagié.

Unas horas después, llegamos a Charlotte en la tarde, como a las cinco. Luego, tomamos un Uber que nos llevó hasta nuestra casa. Estaba muy emocionada por ver el resultado final.

Luis nos esperó en la entrada del vecindario, y nos cubrió los ojos con vendas para que fuera una verdadera sorpresa. Y con cuidado entramos para que en cuanto terminara de contar, pudiéramos quitarnos las vendas y observar la belleza que hizo Luis con nuestra casa. No pude expresarle lo mucho que le agradecía por hacer semejante hermosura.

Luego de observar a detalle toda la casa, decidimos por fin irnos a dormir después de que Luis tuvo que retirarse por un compromiso. Entonces planeamos que el día de mañana sería activo, porque Shawn tendría que trabajar, y yo tenía que ir a comprar algunas cosas al supermercado.

Los padres, hermana y cuñado de Shawn se quedaron en la casa solamente por esta noche porque no se habían dado cuenta de que la renta de la casa iniciaba mañana. Así que por nosotros no hubo mucho problema por que se quedarán hoy a dormir.

—Que descanses, amor—dijo Shawn dándome un beso en los labios.

—Igual, cariño—dije dándole un abrazo mientras él me recargaba en su pecho y acariciaba mi hombro.

Al otro día

Cuando me desperté, observé que ya no estaba Shawn a mi lado pero si una nota. La miré extrañada. Aún así la tomé y leí también.

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Salí más temprano de la casa. Voy a grabar en el estudio pero llegaré para comer