𝓝𝓾𝓮𝓿𝓮 𝓶𝓮𝓼𝓮𝓼･*:.˛ ˚𝗦𝗠

𝓒𝓪𝓽𝓸𝓻𝓬𝓮

Días después

Esos cuatro días se pasaron demasiado rápido, que creí que no fueron lo suficientes. Me había sentido muy bien aquí, con toda mi familia, disfrutando de sus reacciones al enterarse de mi bebé. Era maravilloso.

Estaba muy triste por irme, los iba a extrañar como la primera vez que me fui de la casa. Pero, estaba consciente de que cosas como estas tienen que pasar.

En el aeropuerto, a las cinco de la mañana; todos nos habían ido a acompañar para despedirse de nosotros.

Mis papás me dijeron lo mucho que me iban a extrañar y que cuidara del bebé, al igual que le pidieron a Shawn que cuidara de mi y de su hijo. Yo también les dije que los amaba demasiado y los iba a echar de menos. Después me despedí de Taylor y Marcus, quienes me ofrecieron su apoyo en todo momento. Les dije adiós a Mili y a Alex, incluyendo a mi hermano, diciéndole que lo amaba con todo mi corazón.

Luego, tuvimos que abordar el avión porque si no, se nos haría tarde, así que nos apuramos lo más que pudimos.

—¿Te sientes mejor después de decirle a tus papás?—preguntó Shawn a mi lado.

—Estoy más tranquila—dije abrazándolo porque tenía frío.

—Si, yo también—asintió.

En cuanto el avión despegó, Shawn sacó a relucir el tema de que en cuestión de un par de días tendría que irse a terminar su gira, yo traté de actuar comprensiva pero si me tenía triste la situación. Pero después, nos inclinamos a lo que tenía pensado hacer mientras él no estuviera y le comenté que Dua y yo habíamos hablado sobre ir a la playa un par de días para que pudiera relajarse. Él dijo que era un buen plan, siempre y cuando me sintiera segura respecto al embarazo; yo le dije que de todas formas iría a ver a la doctora Woodley, pero que dudaba de que hubiera algo que me impidiera disfrutar de unas cortas vacaciones en la playa.

Luego de largas horas de vuelo, llegamos a Toronto justo a las ocho de la noche. Y en cuanto salimos del aeropuerto, observamos a Dua y a los papás de Shawn, a quienes saludamos con mucho entusiasmo. No hubo mucha conversación más que unas cuantas breves descripciones de los días que pasamos allá. Casi en seguida nos despedimos porque Shawn y yo teníamos que ir a descansar para nuestras juntas de trabajo. Así que, los tres regresamos a casa.

Días después

Había tenido juntas de trabajo con James, sólo dos; en las que aproveché para darle la noticia personalmente pero también abordamos el tema de un próximo comercial de una marca patrocinadora, pero sabiendo por lo que estaba pasando, decidieron posponer ese comercial hasta que yo estuviera en condiciones. Aunque, estaba bien y me sentía bien, James amablemente me ofreció darme tiempo, sin preocupaciones, sólo para concentrarme en mi bebé y en mi; así que, esas dos juntas fueron las últimas que tuve.

Shawn también tuvo una que otra reunión de trabajo para asegurar lo que se haría en el tour, hasta que finalmente ese día llegó y me dispuse a acompañarlo al aeropuerto. Nos encontramos con Andrew, a quien saludamos con mucho gusto pero igual nos despedimos en cuestión de segundos.

—Te amo mucho, Elle—dijo Shawn yendo a darme un abrazo.

—También yo—dije dándole un beso en la mejilla..

—Los voy a a extrañar demasiado—dijo suspirando—estaré al pendiente de los dos, y si necesitas algo sólo llámame, ¿okay?—dijo acariciando mi cabello.

—Gracias, amor—dije sonriendo tenuemente.

—Van a ser los dos meses más largos de mi vida—dijo separándose poco a poco.

—Tranquilo, se pasarán rápido—dije para consolarlo—estarás bien, y nosotros también—comenté con confianza.

—Nos vemos pronto, amor—dijo volviendo a darme un corto abrazo.

—Te amo—dije dándole un pequeño beso en los labios.

—Yo más—me aseguró sonriendo—nos vemos en dos meses, bebé—dijo tomando mi estómago por lo que yo reí con ternura.

—Suerte—dije en cuanto Andrew comenzó a decir que se les hacía tarde.

—Gracias, cariño; te amo—dijo dándome un corto beso y después se separó para ir con su manager.

Dua y yo regresamos a la casa, y ella me preguntó si ya había echo una cita con la ginecóloga, le dije que al parecer unos días antes de nuestro viaje la tendría. Hablando del viaje, también habíamos comprado los boletos de avión hace un par de días para asegurar nuestros lugares.

Respecto a la despedida de Shawn, me sentía un poco triste, más de lo normal, porque sabía que él se sentía mal por no pasar los primeros dos meses conmigo y su hijo. Pero a pesar de eso, sabía que él no lo hacía porque quisiera, era solamente una demanda de trabajo y tenía que cumplirla.