Aventuras

De regreso a la Ciudad

   Después de lo sucedido, mi mamá no quería estar en un lugar en el cual habían pasado cosas malas, decía que si seguíamos allí podrían pasar cosas peores, así fue que decidió el volver a la ciudad.
Ya de vuelta a como todo era antes de partir de la ciudad, algo había cambiado no era gran cosa al decir verdad pero, se podía sentir en el ambiente, era algo tenso e incomodo y no me gustaba. Mi mamá quería que volviese a ser el de antes, someterme a los cuidados constantes de ella pero, eso ya no iba a volver a pasar.
Pasado tres días desde que llegué a mi casa, Hernán y yo nos volvimos a juntar, mi mamá le había contado todo a la maestra y ella a Hernán. Las preguntas iban y venían, quedé muy agotado ese día, no quería más. Al llegar a casa había un vehículo estacionado en el ante jardín, era negro y con los vidrios oscuros.

John: hola, soy el detective John McKinsey, me encargo de la investigación de la muerte de Alex G.
Sebastian: ¿que...?, ¿está muerto?.
John: me gustaría decir otra cosa, pero lo asesinaron y uds son los primeros sospechosos.

Para mi sorpresa, la persona que era como un padre para mi y que me había causado tanto daño lo habían asesinado y creían que mi madre y yo lo habíamos hecho.

John: no es que los esté culpando de hacerlo, pero si hay un motivo por el cual ustedes son sospechosos.
Después del incidente ocurrido en Jothurn y que además se cambiaron de casa, eso los deja como los primeros en la lista.
Alejandra: ¡nos mudamos por culpa de él, no podía seguir cerca de alguien que le hizo daño a mi y a mi hijo!
John: la entiendo, no hace falta que se altere, es más sólo me enviaron a por unas muestras.
Sebastian: lo que sea necesario para comprobar que nosotros no fuimos, solo debe pedirlo y lo tendrá.
John: bueno, solo deben acompañarme a una estación de policía para realizar el procedimiento, solo necesito sus huellas dactilares para el informe del caso y para poder comparar a las que se encontraron en la escena del crimen.

Lo acompañamos hasta la estación de policía más cercana que teníamos y le dimos lo que necesitaba, después de eso se marchó y no volvimos a saber de él.