Aventuras

La confesión de Hernan

Encontraron al culpable de la muerte de Alex y el caso lo cerraron antes de lo que esperaba, nunca nos dijeron quién fue el culpable.
Ya estábamos de vacaciones de verano y Hernán me invitó a pasar unas semanas en la cabaña del tío en Ferd, era una cabaña gigante y muy hermosa, se veía que la habían decorado con mucho esmero, parecía una cabaña de esas que solo se pueden ver en los cuentos para niños.
Al llegar el atardecer, Hernán encendió una fogata cerca de un acantilado, nos quedamos viendo el crepúsculo al anochecer, era algo impresionante, algo que no puedo describir, solo puedo decir que no había visto nada parecido antes.

Hernán: Seba...
Sebastian: Si?, sucede algo?
Hernán: es que..., bueno...
Sebastian: emmm, ¿me quieres decir algo?, ¿quieres algo?, ¿que necesitas?

Era un silencio incómodo, fue tan así que solo me puse a reír de la situación.

Hernán: tu..., tu me gusta.
Sebastian:(anonadado) heee, no se que decir, es algo que no estaba preparado para escuchar.

En eso Hernán se levanta y va a buscar más leña, a pesar de que ya había suficiente junto al fuego como para que durara toda la noche. Lo cierto es que entre Hernán y yo, ya habían pasado cosas, tantas que no las puedo contar, me di cuenta en ese instante que cada vez que me encontraba a solas con Hernán sucedían cosas. Me levante y entre en la casa, necesitaba estar en un lugar en donde pudiese pensar las cosas tranquilo y resulta que siempre me sentí un poco atraído a él.

Hernán: ¡Seba! ¡Seba!, en donde estás?.

Lograba escuchar muy en el fondo a Hernán, me estaba quedando dormido y no podía más con el sueño.