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Chan entró estrepitosamente en la casa de los Kim y con decisión fue hacia el salón donde lo esperaba Kim Yunsuk, tranquilamente tomándose un té.

―Veo que no guardas las formalidades cuando Woojin no esta presente ―dijo serena dejando su taza en la pequeña mesa de centro.

― ¿Tan lejos tuviste que ir? ―preguntó Chan conteniendo su furia y sus ganas de estallar ahí mismo.

―Te avisé, te dije que iría con todo ―respondió con toda la calma del mundo. Chan la fulminaba con la mirada pero nada parecía hacer inmutar a esa mujer. ―Y bien, ¿qué harás ahora?

― ¿Cómo que qué haré? ¿Piensas que voy a rendirme? ―dijo Chan con una media sonrisa y cruzándose de brazos.

― ¿Y vas a permitir que tus amigos se vayan, que dejen todas sus vidas aquí solo porque tu te niegas a renunciar a un simple amor? Te creía más considerado ―atacó Yunsuk fingiendo una expresión de sorpresa.

― ¿Debería dejar de luchar por lo que quiero solo porque tu no aceptes que tu hijo es homosexual? Si lo hubieras aceptado de buena mano no estaríamos teniendo esta conversación ―repuso Chan escupiendo cada una de sus palabras.

―No es que no lo acepte Chan, es que mi hijo no es homosexual. Solo... Se esta divirtiendo un poco, y para tu mala suerte tu eras el que estaba más alcanzable para él ―contraatacó la mujer, feroz y derrumbando a cada poco la confianza que había reunido Chan para enfrentarse a ella. Chan iba a replicar pero rápidamente Yunsuk se le adelantó y empezó a tomar el control de esa conversación.

―Chan, dime la verdad esta vez, ¿cuántas veces te ha dicho Woojin que te quiere? Sintiéndolo de verdad y desde el fondo del corazón.

Chan se quedó en blanco, buscando en su mente algo sobre eso. Pasó por su cabeza aquella vez que a Woojin se le escapó esa pequeña frase aunque estaba seguro que eso no contaba para nada. El australiano se quedó con la boca medio abierta, a punto de replicar con cualquier cosa, pero Yunsuk era más rápida y más habilidosa con las palabras.

―Exactamente, Chan, a eso es a lo que me refiero. Puede que parezca que soy una cerrada de mente que no acepte que mi hijo pueda querer a quien le de la gana pero también es por ti. Te tengo aprecio, y sé que saldrás lastimado. Él solo te esta usando para experimentar, se le pasará esa fase pronto y luego tu, ¿qué harás? Todo por lo que has luchado y todo por lo que has sufrido no habrá valido la pena. Chan, ¿te ha confesado siquiera sus sentimientos? ¿Te ha dicho acaso que le gustas? ―empezó a preguntar la mujer, cambiando su tono a uno más suave y persuasivo. Las palabras entraban en la cabeza de Chan como el agua en un día caluroso y no se iban de ahí. Todo tenía sentido, quería no creer a Yunsuk pero... Era verdad, Woojin nunca le había confesado y afirmado de verdad que le gustaba. Solo él había interpretado los sentimientos del mayor por sus acciones y sus ―puede que― falsas promesas.

Woojin siempre le había dicho que estaría con él para siempre, que lo ayudaría, que lo apoyaría... La mente de Chan se estaba nublando. Todos los sentimientos se estaban mezclando con vagos recuerdos de ambos, sonriéndose en la cama y simplemente hablando. Podía ser... ¿Podía ser que Yunsuk tuviera razón? ¿Que Woojin solo estuviera experimentando su sexualidad con él?

―Me lo temía ―respondió Yunsuk al percibir el silencio por parte del chico. Suspiró resignada, como si ese tema fuera una real preocupación para ella, como si realmente se preocupara por Chan, aunque obviamente nunca fue así. Todo formaba parte de su intrincado plan.

―Pero entonces... Si tan claro lo tenías todo, ¿por qué no me lo dijiste de buenas a primeras...? Lo podría haber entendido mejor... Hubiera... Supongo que hubiera planeado mejor las cosas, lo hubiera hablado con Woo y... ―empezó a balbucear Chan mirándola con los ojos llorosos.

¿Hacemos yaoi? || SKZ ficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora