Amigas.

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Alyson escuchó atentamente a Beatriz. En cuanto acabó se tomó un tiempo para asumir lo que estaba escuchando.

— La verdad es que no sé por dónde empezar —la expresión de su cara transmitía incredulidad— Yves te hizo creer que era gay y luego te confiesa en el hospital que le gustas. ¡Wow!

Beatriz se tapó la cara para evitar reírse al tiempo que asentía.

— Tienes que hablar con él, cree que estabas dormida y quizá no le escuchaste pero sobretodo porque tú y Chris... —Beatriz cortó a Alyson.

— Estaba drogada Alyson, deliraba, por eso le dije "te quiero" y el me lo dijo por no hacerme sentir mal... —aseguró apenada.

Alyson miró a Beatriz con indignación.

— Me parece que no te estás oyendo. Mira, os he visto en el set, vale que es vuestro papel eso de que os enamorais, pero quien no se haya dado cuenta de vuestra química es tonto. Hazme caso, yo calo muy bien a la gente para éstas cosas.

— Tú lo has dicho, sólo actuamos. Me temo que con nosotros te has equivocado.

— Sabes que no, a ti te gusta y yo lo sé, nunca me lo has confesado pero créeme que lo se. No puedes engañarme. Y Chris también siente algo por ti.

Beatriz bajo su mirada.

> Tiene razón la jodida.

— Está bien, está bien... Me gusta Chris, me gusta mucho -se sinceró.

Las dos se rieron y Alyson la dió un abrazo.

— Sin embargo no creo que Chris sienta lo mismo por mi.

— Tienes un problema con eso de no escuchar lo que dices —Alyson miró a Beatriz a los ojos fijamente mientras la agarraba de los hombros— Chris siente algo por ti, te ha llevado a una cita romántica, te llevó al hospital y estuvo allí todo el tiempo y...¡te ha dicho te quiero.!..—entonces zarandeó a Beatriz en plan broma— ¡Chris te quiere!

Beatriz no aguantó la risa, además se puso como un tomate. Alyson también se rió.

— Pero no sé que somos, yo le quiero —Beatriz no podía creer lo que decía— y él me quiere —dijo bajando la voz, asumiendo sus palabras.

— Estoy segura de que va a llamarte para quedar mañana contigo.

En ese instante el móvil de Beatriz comenzó a sonar, la estaban llamando. Las dos amigas se miraron con la boca abierta y segundos más tarde Beatriz aceptó la llamada, era Chris.

— Beatriz ¿estás mejor? Siento no haber podido estar ahí contigo cuidandonte.

— Sí, Chris, ahora estoy genial y no te preocupes, me has dejado en buenas manos.

— Mañana paso a visitarte, si quieres...

Beatriz tenía el manos libres, Alyson la indicó que dijera que sí.

— Claro, ven cuando quieras —Beatriz miró a Alyson buscando su aprobación, quien asintió.

— A las diez estaré allí

— Perfecto, aquí te espero.

— Adiós, te quiero

— Yo también te quiero adiós —colgaron el teléfono.

Las dos chicas gritaron emocionadas. Las mejillas de Beatriz estaban ardiendo a causa de esas dos simples palabras "te quiero".

— ¡Te lo dije, él te quiere!

— ¡Ay Alyson que me va a dar algo! ¡Parecemos dos adolescentes!

— ¡Lo sé y no puedo parar!

— ¡Yo tampoco!

Y así volvieron a partirse de la risa, aquella noche se hicieron muy buenas amigas. Beatriz miró el reloj.

— ¿Ya son las 11:30? Qué rápido se pasa el tiempo.

— Sí es tarde...

— Muchas gracias por quedarte conmigo, anda vete, que ya estoy bien —insistió Beatriz.

— Ya veo que estás bien pero, ¿seguro que no quieres que me quede contigo?

— No seas tonta. Dos preciosas niñas están esperando a su mamá, así que vete.

— Está bien, pero mañana me lo tienes que contar todo.

— Claro que sí, buenas noches y ten cuidado.

— Lo tendré, cuidate. Hasta mañana.

Se despidieron con un abrazo.

Beatriz se asomó a la ventana para asegurarse de que Alyson llegaba bien a su coche. Se quedó mirando por la ventana un buen rato incluso cuando perdió de vista a su amiga. Después se fue a dormir, estaba muy emocionada.

La luz del día despertó a Beatriz, en cuanto abrió los ojos escuchó el timbre. ¡Eran las 10:05! Se había quedado dormida. Fue corriendo a abrir a Chris, no quería hacerle esperar, con lo que olvidó mirarse al espejo. (Tenía aspecto de recién levantada).

Abrió la puerta. Allí estaba Chris, sonriendo.

> ¿Soy yo o cada día está más guapo?

— Veo que acabas de levantarte

Beatriz estaba embobada, tardó unos segundos en reaccionar.

— Eh... ¡Ay! Perdona, qué tonta. Pasa adentro.

Chris entró y esperó detrás de Beatriz a que cerrara la puerta.

— Bonito... Pijama —por el tono Beatriz no sabría decir si lo afirmó o era una pregunta.

> ¡Mierda! No me he cambiado.

Huyó rápidamente a su habitación y cerró la puerta.

Chris esperó al otro lado.

— Justo cuando has llamado estaba despertandome... y —dijo en voz alta, he hizo una pausa mientras se ponía unos leggins negros— no me ha dado ha dado tiempo... —se puso una camiseta azul turquesa con puntos negros, de manga corta y que la llegaba a las caderas—...a cambiarme pero ya casi estoy, lo siento —se puso los botines del día anterior (lo primero que vió), se peinó— siéntate en el sofá mientras —y se lavó la cara y los dientes.

Cuándo terminó fue al salón, Chris estaba allí sentado sonriendo al verla. Evans sintió un gran alivio con el actual aspecto de ella, se notaba que ya estaba bien, no como el día anterior.

Una Vida Soñada. I © (TERMINADA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora