Amores

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Tris recibió una llamada, se escuchaba la respiración de quien estuviera al otro lado y segundos después colgaron.

Al día siguiente Tris se encontró a Yves y Chris hablando, el primero parecía disgustado y el segundo intentó tranquilizarle, y así y todo Yves se marchó echando humos.

> Vale, esto sí que es raro

— ¿Chris?—ella llamó la atención del director— ¿Va todo bien? Yves no parecía lo que se duele decir contento.

— No es nada, otra de sus rarezas —dijo Chris para tranquilizar a Tris— Bonita camisa, yo tengo una igual.

> ¿A que se refiere? Se va a enterar...

— No sabía que te gustará llevar ropa de mujer —dijo sonriente y con tono sarcástico.

> Vaya, eso me a pillado de imprevisto —pensó Chris

— Ve a prepararte, yo avisaré a los demás —informó a Tris.

Tris se fue sin decir nada, y Chris vio cómo se iba ella.

Cuando estaba volviendo para empezar a rodar, Tris se vio arrollada por Yves.

> Tengo que decirselo ya, venga.

— Tris, escuchame, no puedes estar así con Chris. Estás jugando con él y no lo voy a permitir —hizo una pequeña pausa para que sus palabras calaran en Tris— he visto cómo os miráis y está mal.

— Yves no se de que me hablas— contestó ella confusa.

— Lo sabes perfectamente— dijo Yves indignado.

— Pues no tengo ni idea, lo único que se es que pareces una novia celosa —dijo Tris disgustada.

Yves tardaba en contestar.

— Ay madre. ¡Ay madre! —Tris estaba atónita— ¿Va en serio?

— La última vez que le rompieron el corazón lo pasó mal, era la segunda vez que rompía con Minka— se defendio Yves— no dejaré que nadie vuelva a hacerle daño, ha estado sólo fingiendo que estaba bien, pero yo sabía que no, yo sabía que el sólo quería encontrar a La Chica y sentar cabeza. Le conozco mejor que nadie, sufro por él —supo que contó demasiado pero no pudo contenerse, se sentía furioso, de todas formas así tenía más oportunidad de que Tris averiguara lo que no era capaz de decirla.

— No, yo... no sabía nada, no pretendo nada de eso —Tris apoyo su mano en el hombro de Yves— entiendo que te sientas así. Creo que ya entiendo por que te caigo mal. Igualmente él nunca se fijaria en mi y lo sabes —aseguró

— Espléndido —dijo con una leve sonrisa —la verdad es que me cae mal casi todo el mundo...Aunque tú no me caes mal en realidad, me ha cegado verte como alguien peligroso para Chris —.No se le ocurrió decir algo mejor.

Tris dedicó una consoladora sonrisa a Yves y se dieron un abrazo.

— Entonces ¿Me perdonas? —Tris extendió la mano- seamos amigos.

Yves se lo pensó, se fue de allí sin decir nada más. Ella, sin embargo, paralizada pensó en que ahora ya entendía el comportamiento de Yves.

Tenía que volver al trabajo, la estarían esperando. Resultó que no era la única que faltaba y menos mal.

— Ya pensé que era la única que llegaba tarde.

— ¿Por qué será?— bromeó Alyson.

— Chicas, que hayáis venido por separado no me engaña, sé que habéis estado juntitas —bromeó Sebastian.

— Pensaba ir contigo pero ya vi que preferiste a Chris —contestó Alyson.

— Así que vistes con ropa de mujer y ahora te vas con Sebastian...

—Tris, nunca has pensado en ser humorista.

— Oye Chris, un día tu y yo nos vamos de compras —dijo Alyson guiñando un ojo a Tris.

— Bueno ya está bien, sigamos con lo nuestro, a trabajar. ¡Alé, alé!

Ese día no hubo nada de especial en el rodaje, sólo alguna lagrimilla más o menos falsa por las escenas en que los personajes recordaban a sus difuntos amados, sin contar con la broma de antes. Después todos se marcharon a casa o quizá no todos pero Tris y Evans sí se fueron a sus respectivas casas.

Tris no acababa de entender el comportamiento de Yves, sólo había una explicación viable. >  En ese caso todo encajaba, estaba coladito por Chris y tenía celos, eran amigos de hace tiempo y aunque sabía que lo suyo con Chris nunca podría ser había visto como fracasaban todas sus relaciones. Él siempre estuvo ahí apoyar a Chris, y ahora con la llegada de Tris no permitiría que le decepcionaran de nuevo. >

Por otra parte, cuando Yves se tomó un descanso en su sofa dejó que la inseguridad le invadiera, que pensaría Tris que pasaba. Haría lo que fuera por proteger el corazón Chris de otro golpe, así y todo no estaba del todo convencido en apartar a Tris. Por alguna razón, aunque la odiaba por ser la chica en la que Chris se estaba fijando, le gustó desde la primera vez que la vio. Había en ella algo que le inspiraba confianza.

Tenía mucho en que pensar, lo principal sería su amor platónico.

Desde que Chris llegó a su casa no paró de dar vueltas, apenas tuvo tiempo antes para hablar con Tris. Notaba cómo ella invadía a pasos agigantados cada uno de sus pensamientos. Tenía miedo, ya habia sentido antes algo parecido, pero era tan embriagador.

Decidió llamarla.

> Buscó su número en vano, no lo tenia allí. Su paciencia se agotaba, así que llamó a Yves con esperanza de que él lo tuviera.

— ¿Chris?— contestó Yves a la llamada— ¿Qué necesitas?

— Tío, siempre me sorprende que me conozcas tan bien— escuchó una breve carcajada— escucha necesito que me consigas el número— hizo una pausa— de Tris.

— ...el número de Tris..¿Para qué?— no pensaba darselo.

— Es por algo del guión, es secreto ya sabes dos finales alternativos y esas cosas para evitar filtraciones— no escuchó nada— Vamos tío dime que lo tienes— cruzó los dedos.

— Lo voy a mirar, te enviaré el número en un mensaje, pero no te prometo nada— aquello le daría tiempo para pensar.

— ¡Te debo una!— dicho esto James colgó.

A Yves no le hizo falta buscar el número, obviamente lo tenía, la llamó el otro día con su móvil para comprobar si lo tenía bien apuntado. Tomó una decisión arrepentido, elegir algo así tan rápido era una pésima idea pero no contaba con el tiempo que le gustaría haber tenido.

>Mensaje enviado

Una Vida Soñada. I © (TERMINADA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora