Un resplandor blanco cegó sus ojos nada más abrirlos, lo que provocó el acto reflejo de enterrar su cara bajo sus manos.
Desorientada, perdida, fuera de lugar, así es como se sintió en ese momento.
Entonces lo recordó.
El dolor, los gritos, sangre, el coche. El accidente.
Eso era, sufrió un accidente de coche, antes de volver a casa la atropellaron. Recordaba todo eso, segundos eternos, hasta que quedó inconsciente.
Ahora recordaba que seguramente sufrió una contusión, quedó inconsciente debido al impacto de su cabeza contra el asfalto y por la pérdida de sangre.
Pero había sobrevivido, ahora estaba despierta, y siguió despertando hasta que por fin escuchó a su alrededor esas voces tan familiares, hasta que vio sus caras.
- He vuelto, ¿me echabais de menos?
- Hija mía, ya estás despierta -exclamó alegre la madre de Beatriz.
- Cinco minutos más... -bromeó mientras se abrazaban- ¿Cuánto he dormido? -preguntó curiosa.
- Trece meses cariño -contestó con lágrimas en los ojos.
- ¡¿Qué?! -exclamó sorprendida- Pero... Eso es mucho tiempo. Entonces estamos en... ¿2011?
Sabiendo todas las cosas que se perdió ese año estalló en un llanto. Su madre la consoló sabiendo la razón de la tristeza de su hija.
- Quiero irme ya de aquí, mamá.
- Claro que sí, el doctor debe estar al caer -dicho esto el médico entró en la habitación.
- Pero mira quién a despertado, no tendrás sueño ¿no? -bromeó
- Para nada -contestó rápidamente.
Las pupilas, las constantes vitales, la examinó por completo.
- Está todo perfecto, mañana a primera hora estarás de alta.
- Gracias doctor -exclamó contenta.
- Lo único que debes hacer es tener cuidado de no hacer mucho esfuerzo de repente.
- Eso hará, muchas gracias por todo -dijo su madre que salió de la habitación junto con el médico para hablar en privado.
Poco después entró Paula, al ver a Beatriz despierta se quedó en el sitio, muy quieta, durante unos segundos para brincar y saltar seguidamente.
- ¡Paula has venido! Y me has dejado sorda... -bromeó.
Paula dió un fuerte abrazo a su mejor amiga recién salida del coma.
Después de más de un año tenían muchas cosas que contarse, bueno más bien... Paula era la que tenía mucho de qué hablar, tanto que necesitaría más de un día.
El día pasó volandoe, claro que se había despertado por la tarde.
- Mamá, vete a casa a dormir, estaré bien -ordenó a su madre, hasta ese momento no se dió cuenta de lo cansada que se veía- necesitas una cama de verdad, por favor ve a dormir a casa.
- No puedo dejarte hija, no quiero que... -Beatriz la interrumpió.
- Por favor, ve. Te prometo que no va a pasar nada -aseguró.
Con poca convicción al final la madre cedió a la petición de su hija.
Beatriz estaba tan impaciente por volver a casa que no durmió en toda la noche, no sólo por haber estado así tanto tiempo.
- Son las ocho, ya tiene que ser primera hora, ¿no? -pensó en voz baja.
Pese a que para Beatriz la sensacional fue que pasaron horas su madre y el médico apenas tardaron media hora en aparecer.
<<Por fin>>
- ¿Impaciente? -preguntó el médico sabiendo de sobra la respuesta- Bueno, mejor será que no nos demoremos más. Firma estos papeles y podrás irte.
- Y ¿ya está? -cuestionó ilusionada.
- Sí, sólo eso -afirmó el médico con una sonrisa sincera.
Beatriz firmó tales papeles con ayuda de su querida madre. Ya podían irse a casa.
- Os echaremos de menos -dijo el médico de parte también de las enfermeras- pero no se os ocurra volver a no ser que sea para una visita.
Ese comentario provocó que los presentes soltaran una carcajada.
- Adiós a todos, gracias por cuidarme.
Al fin se fueron del hospital.
<<¡Aleluya!>>
En poco tiempo llegaron a casa. Para sorpresa y agrado de Beatriz todos sus seres queridos estaban esperándola en casa. Su abuela, sus tías, su tío y sus dos amigas.
Era una fiesta sorpresa, contaron varias anécdotas y después comieron. Fue un día muy especial.
Pasaron semanas hasta que recuperó las fuerzas, incluso podría decirse que estaba más en forma que nunca.
El verano estaba al caer. Ya que se perdió uno decidió que este sería inolvidable. Había estado planificando irse veinte días con sus amigas a la playa y otros veinte con su madre a donde ella quisiera.
Tenía que recuperar el tiempo perdido con ellas.
De esa forma pasó el tiempo hasta que fue agosto.
Paula llamó a Beatriz, tenía una sorpresa.
- Hola, te perdiste muchas películas pero... Ya lo verás. Paso a recogerte a las seis.
Aceptó encantada.
No era tonta, era viernes y estaba hablando de películas. Seguro que la llevaba al cine.
Lo que desconocía era qué película iban a ver. Desde que despertó a penas dedicó tiempo a ver la tele y a Internet. Lo único en lo que pensaba era en disfrutar del aire libre.
Se arregló y Paula llegó a la hora indicada. Efectivamente iban al cine. Al parecer estrenaban Capitán América, el primer Vengador.
No tenía no idea de quién saldría en esa película ni nada, pero aún así sintió emoción por verla.
Antes de entrar a la sala Paula se paró y agarró a Beatriz del hombro. Ésta se volvió y se apartaron de la puerta.
- Bea -dijo Paula buscando algo en su bolso- antes de que se me olvide quería darte esto -sacó algo del bolso y se lo ofreció a Beatriz- lo llevabas puesto aquel día. El médico me lo dió para que te lo guardara.
Era una pulsera de plata, tenía una C y una pequeña figura de una cría de ciervo. Beatriz la cogió, nada más tocarla recordó algo, recordó abriendolo en su cumpleaños, recordó una voz masculina y recordó sentir un gran amor.
- I will love you till the end of times -susurró.
Sin previo aviso unas lágrimas recorrieron sis mejillas.
- Es muy bonito -confesó Paula- ¿Quién te lo regaló? ¿Estas bien? -preguntó al darse cuenta de que su amiga estaba llorando.
- No lo recuerdo... Estoy bien -tranquilizó a su amiga. <<Estoy mejor que bien>>
Se secó las lágrimas y entraron a la sala de cine.
- Vamos ya, que empieza la película.
¿FIN?
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.Vuelvo a hacer spam pero primero daros millones de gracias, esta es mi primera novela y con tantos votos y lecturas estoy muy alucinada.
FINDING
BLOOD LOVE (en la cuenta @Oblivioners)
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Una Vida Soñada. I © (TERMINADA)
FanfictionComo suele decirse "demasiado bonito para ser verdad". La vida la sonríe, y mucho. Sin embargo, no todo es rosa, hay algo oculto, algo extraño de lo que no Ella hace caso. Chris Evans será la parte más o menos buena de su historia. Todos los derecho...