Idiota² |Vhope|Finalizado|

Capítulo 24: Sueño hecho realidad

Hoseok estaba seguro que en cualquier segundo llegaría a tener un ataque de nervios. En ningún momento de su vida se había sentido de esa manera como hasta ahora. En ese instante comprendió y esos malos pensamientos regresaron a su mente de nuevo. Taehyung, su acosador, tal vez se sintió de la misma manera en la que ahora él lo hacía.

Suspiró, en qué realmente estaba pensando. Tal vez el castaño lo odiaba. Ya no era lo mismo, parecía que lo evitaba. Se lo merecía al fin de cuentas, todo por ser un maldito inseguro. Nunca entendió el hecho del porqué Taehyung entre tantas personas en la preparatoria se fijó precisamente en él.

No era divertido, se avergonzaba con facilidad y su risa era demasiado ruidosa. Nunca antes nadie había confesado su amor de la manera en la que el castaño lo hacía tan abiertamente, sin sentir pena por gustarle.

Sus manos sudaban y el hecho de que el menor nunca llegara le generaba una opresión en el pecho. Como hace más de veinte minutos que Namjoon le envió un mensaje de texto informándole que Taehyung vendría.

Apretó sus sudorosas manos. Las cosas cambiaron, debía de aceptarlo Taehyung ya no correría hasta sus brazos. Ya no, cabizbajo se resignó y se dio vuelta.

A lo lejos divisó la cabellera del castaño casi ríe, siempre era muy malo en ocultarse. No engañaría a nadie cuando sintió a su corazón dispararse por las nubes.

Su teléfono sonó, era un mensaje de texto de Taehyung.

Rarito

Hyung, no sé si realmente quiero escucharlo

Tengo miedo

Con sus manos temblorosas se las arregló para responder. Si no era sincero con sus sentimientos, se arrepentiría toda la vida.

También tengo miedo

Miedo de perderte

Levantó la vista, mierda, tal vez sonó demasiado cursi quería salir corriendo de allí y esconderse detrás de un árbol no era tan ridículo después de todo. Pero, al sentir los brazos de Taehyung envolver su cuerpo valió la pena la bochornosa confesión. 

—Te extrañé tanto, que no tienes idea —Escuchar al menor susurrar aquello muy cerca de su oído y sentir como aspiraba su aroma hizo a Hoseok estremecerse.

—Escucha, lo que tengo que decirte primero. Por favor —A regañadientes el castaño se separó por unos pocos centímetros —Después de esto quizás pienses que estoy perdiendo la cabeza con todo lo que sucedió.

—Yo ya perdí la cabeza por ti hace bastante tiempo, así que no soy quién para juzgarlo —Hoseok no pudo dejar escapar una sonrisa.

—Me gustas, mucho —hizo una pausa y prosiguió—: A-antes de que te confesaras, ya lo hacías. Todavía me sigo culpando por ser tan inseguro, nunca me he sentido antes así. Todo esto es tan nuevo para mí que, aún no sigo creyendo que alguien como tú sintiera algo por mí. Es estúpido lo sé, solo estoy aterrado por ser tan vulnerable a ti. No deseo que todos esos malos pensamientos influyan, así que, sí. Quiero intentarlo.

—¿Puedes abofetearme? —Hoseok lo miró sin entender —Descuida yo mismo lo hago —Un sonoro golpe se oyó —¿No estoy soñando? Dime que no —Taehyung volvió a aferrarse a él.

—No, no estas soñando —rio Hoseok por su exagerada reacción —Porque si estuvieras en un sueño no sentirías esto —El pelinegro no supo de donde salió aquella valentía para acercarse al contario y juntar sus labios en un suave roce de labios.

En todas las infinidades de películas románticas que Taehyung vio, realmente no bromeaban con los fuegos artificiales cuando finalmente se besaban. Él, incluso podía escuchar a Freddie Mercury cantar de fondo “We are the Champion”.

—Wow, nunca pensé que llegaría tan lejos —admitió todavía en shock —Estoy tan feliz que podría morir ahora mismo —Se lo pensó mejor —Bueno, mejor no. Si muero no podremos besarnos de nuevo —murmuró para él mismo y volvió a disminuir la distancia. Oh, besar a Hoseok podría considerarse como la octava maravilla del mundo.