JaeHyun estaba nervioso, sumamente nervioso, el día semanal en el que iban a su lugar especial se acercaba.
Inicialmente escribió en un papel lo que podría decirle al mayor, bueno, realmente no fue un papel, fueron muchísimos, todos desechados, luego decidió grabarse diciéndole, odio todas las notas que hizo y también las borro.
El viernes por la media noche se paro frente al espejo y suspiro.
—Bien, debo imaginar que Kun está aquí y...— se sonrojo mientras imaginaba la escena. Es que incluso pensarlo lo ponía nervioso, sudaba, sí, estaba sudando, se miro fijamente y suspiro profundo antes de comenzar.
—Kun, mi querido Kun, hace años que nos conocemos... Eramos niños y desde el primer día que te vi, jure ver un ángel. Kun, eres tú quién me anima a sonreír todos los días, cada vez que te veo le agradezco al universo de que existas, eres hermoso, precioso, divino, sublime, Dios... No puedo describir cuanto te amo, ni cuan hermoso eres. No lo quise admitir pero aquel vídeo de YukHei y tú si me dolió, quería ser él, quería ser yo a quien besaras... Me gustas, me gustas muchísimo y quise negarme a sentir algo por ti, pero es inevitable, cada que te veo solamente quiero protegerte, quiero abrazarte, besarte, cuidarte, porque Kun tú eres a quién más amo, tengo muchísimo miedo de perderte por confesarte mis sentimientos, pero me es inevitable ocultarlo más— después de finalizar, sonríe, sin duda le salió mejor que en escrito o audio.Podría seguir hablando más pero todo aquello sonaba bien. Le había gustado y había expresado bien sus sentimientos. Siente mariposas en su estómago, quiere ir a despertar a Kun y de una vez decirle todo. Pero no, debía ser más especial.
Se acuesta a dormir y sueña con Kun, sueña con él y eso le hace levantarse de buen humor, desayuna junto a sus padres y corre a la casa del mayor para levantarlo porque ha tomado la costumbre de levantarse tarde los fines de semana.
La madre de Kun lo saluda desde la sala y él la saluda de vuelta mientras corre a toda prisa a la habitación del mayor, Kun pinto las paredes de un dulce color durazno el día anterior y la habitación se notaba hermosa.
—¡Despierta bebé! — grita abriendo la puerta de golpe y sí, Kun aún esta bajo las suaves mantas, JaeHyun en lugar de tirarse encima de él, lo observa dormir y se acerca.
El mayor duerme como un bebé, sus ojitos están cerrados y su cabello totalmente desordenado, la vista de YoonOh baja hasta sus labios y en serio quiso retener el impulso pero no aguantó y terminó dejando un casto beso en los labios de Kun, un beso pequeño.
El chico solamente cambia de posición y se cubre con las mantas aún dormido, JaeHyun esta totalmente sonrojado, los labios de Kun son tan suaves, Dios, no se imagina como será un beso real, Kun nuevamente se mueve y abre sus ojos con lentitud soltando un bufido.
—¡Jae! Aún es temprano, ve a dormir.— se queja tallando sus ojitos.
—No, son las 11 ya debes despertar.— Jae se deja caer a su lado y le sonríe.
—¿Por qué me besaste?— Kun sonríe con levedad y Dios, el rostro de JaeHyun esta súper colorado.
—Y- yo no... ¡No! No te bese... ¡Me voy a mi casa!— se levanto y salió de su habitación. —¡Te veo en la noche — y huyó
Kun se sonroja y toca sus labios.
YoonOh va a declararse.
Kun lo escucho anoche sin querer y ahora desea con todo el corazón que llegue la noche para poder decirle que sí, que sí quiere ser su novio.¡Hola! Ay, volví ya mejor :<
Esperó les haya gustado el capítulo.
aHH. Casi olvido, quería avisarles que habrá una historia en celebración (? De Halloween/día de muertos. <3
Será publicada mañana ♡
Las amo mucho y gracias por leerme, votar y comentar.