toma mi mano ; martín vargas [en edición]

5.

martín vargas.

—¡martín ya me cansé de discutir por esto! —gritaba mi hermano mientras caminaba detrás mío.

—yo también estoy cansado de muchas cosas ¿crees que es fácil para mí? No lo es. —dije tirando la puerta de mi cuarto.

Me senté en la silla de mi escritorio, me concentraba en no llorar. Oí como tocaban la puerta de mi habitación y antes de que me pusiera de pie para abrir esta se abrió.

— marto —dijo abrazándome— mira soy tu hermano mayor, siempre voy a querer que estés bien pero tú y yo sabemos que lu te daña, aunque ella no lo sepa y lo haga inconscientemente. No me gusta verlos peleados, ustedes están juntos desde siempre.

—¿puedes llevarme a casa de lu? —pregunté mientras secaba las lágrimas rebeldes que se escaparon.

mi hermano asintió y ambos bajamos para ir hasta el auto. Antes de salir le expliqué a mi mamá lo sucedido, aunque no amplíe muchos detalles como el de mis sentimientos por mi mejor amiga.

—con cuidado. —dijo mi mamá besando mi mejilla, nos despedimos y salimos de la casa para subir al auto. No era un camino meramente largo pero que se sentía muy extenso a causa de los nervios que cargaba.

simón detuvo el auto para que yo pudiera bajar, me dijo que estaría donde villamil y que si necesitaba algo lo llamara. Caminé hasta la puerta de la casa, toqué dos veces y la puerta se abrió dejándome ver a Damaris que se veía bastante seria.

—martín vargas morales —dijo cruzando sus brazos, me encogí entre hombros y pronuncié un "hola" en voz baja. —pase, vamos hablar. —se hizo a un lado para dejarme entrar y caminé hasta el sofá para sentarme ahí.— sería bueno que me cuente qué le dijo usted a la niña y porqué pelearon.

—no han sido fáciles, he tenido muchas cosas en mente y muchas peleas en mi interior y sé que no debería ser justificación pero usted sabe que cuando uno anda así, no piensa mucho en lo que dice o hace. Estoy consiente de que no estuve bien y que debí medir mis palabras, estoy muy arrepentido. —respondí.

—mira martín, ustedes desde que se conocen andan juntos en todos lados, sé que si hablas con lu ella va a entender pero también sabes que cuentas con ella para todo. Trata de cuando estas cosas te pasen, se lo digas para que ella sepa; luci está arriba, sube.

le di las gracias a damaris, subí las gradas y caminé hasta la habitación de lucía, la puerta estaba entreabierta y por la pequeña endija pude verla de espaldas acostada en su cama. Tomé aire y toqué la puerta, se levantó de la cama y la abrió por completo.

—lu, antes de que me digas cualquier cosa perdóname por favor. Yo no quería decir eso, no estaba pesando bien y no supe utilizar las palabras pero yo jamás, jamás me cansaría de ser tu mejor amigo. —dije y ella me miró, caminó hasta mí y me abrazó para después esconder su cara en mi pecho.

—sentí horrible que me dijeras eso —dijo para después sorber su nariz— eres mi mejor amigo martín y te amo muchísimo, me dolió que dijeras eso.

—lo sé bebé perdóname, no debí decirte nada y al contrario debí informarte sobre cómo me he estado sintiendo —decía mientras subía y bajaba mi mano por su espalda.

—te perdono pero por favor, deja de ocultarme cosas martín. —dijo mientras envolvía mi cuerpo con sus brazos.

—perdóname de verdad, yo jamás me cansaría de ti lu.