Capítulo 22

979 51 8
                                        

Me despertó un pequeño rayo de luz que atravesó la ventana e iluminaba mi cara.

Me giré en busca de Iván y allí estaba, dormido con una lijera sonrisa en el rostro.

Me quedé mirándole. Su piel blanca brillaba por los pequeños rayos de los que entraban por la ventana.

Su pelo rubio, resaltaban varios mechones dorados que caían por su frente.

Realmente, este chico, es diferente a los demás.

Por su optimismo, su carisma, su simpatía. Risueño, siempre veía el lado bueno de las cosas.

Sus ojos se abrieron despacio interrumpiendo mis pensamientos.
-Buenos días. -Susurró.

-Hola.-Sonreí.

-¿Te apetecen unas tortitas? Muero de hambre.

-No tan rápido, ¿No me debes una explicación?-dije sentándome con las piernas cruzadas sobre las sábanas.

-Tenía frío.

-Ya, tonto.

Hicimos la cama entre los dos, nos vestimos y salimos a desayunar fuera.

Una vez en el local recibí un mensaje de mi padre que decía: En 2 horas llego a casa para recojer mi equipaje y despedirme. Te quiero.

Desayunamos unas tortitas con sirope y una taza de chocolate caliente. Estamos en otoño y ya va apareciendo el frío.

Por el camino íbamos contándonos cosas que nos pasaron cuando éramos pequeños.

Llegamos a casa, pero Iván dijo que tenía que irse ya. Nos despedimos con un lijero beso y entré en casa.

Esperé a papá viendo la tele. Cuando llegó cojió sus maletas.

-Bueno Anna, ten cuidado, llámame de vez en cuando, avisame si te pasa algo, cuidate-Que siiiiii!.- Le interrumpí.
-Vale, entonces me voy ya. Te quiero.

Nos dimos un abrazo y salió por la puerta. Tras eso, una sonrisa salió de mi boca.

Estaba contenta, no tenia que preocuparme por casi nada. Haré lo que me apetezca y cuando me apetezca.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Hace una semana que mi padre se fué. Todo va aquí bastante bien.

Estoy de lujo con Iván.

Creo que Alexia está saliendo con el chico con el que fué al baile.

María está rodeada de chicos y se puede decir que ya es casi "Popular".

Dylan, bueno. Dylan creo que está por mí. No lo sé muy bien, pero está bastante serio cuando estoy con Iván y no se lleva muy bien con él. En realidad es un buen chico.

Este fin de semana viene Nicco. Ya le hablé de él a Iván y dijo que le gustaría conocerlo.

Se supone que Iván y yo estamos juntos. No estoy segura del todo, pero por lo que parece sí. Estoy muy bien con él, sé que me quiere.

En realidad todo esto ha sido bastante raro para mí. Ha pasado todo muy deprisa.

La semana pasó bastante rápida. Normao como cualquier otra.

Es viernes. Noviembre, Otoño.

Mañana viene Nicco. Invité a Ivan a casa el domingo para que se conozcan, ya que mañana tendremos mucho que contarnos. Han pasado muchos meses desde que no nos vemos.

Estoy muy emocionada, mañana volveré a ver a mi mejor amigo.

-Hey, ¿Pasa algo?-Dice Iván mirándome preocupado.

-No, tranquilo, bajemos del autobus, hemos llegado.

Comí y estuve toda la tarde encerrada en casa.

Tenía patatas,nutella,galletas,palomitas,refrescos, una tele y música. ¿Para qué salir?

Sobre las 10 de la noche encontré en mi móvil un mensaje de Nicco, hablándome sobre lo de mañana. Llegaría sobre las 5 de la tarde al aeropuerto, así que supongo que tendré que almorzar allí para no llegar tarde.

Realmente no estaba cansada; no había hecho absolutamente nada en todo el día. Era la mejor haciendo el vago.

Ya que no podía dormir, canté. Si! Canté.

Ya, pensáis que soy rara por cantar en la cama de noche intentando dormir, pero almenos no me aburro.

Tras unas cuantas canciones, entré en un ligero sueño.

La chica raraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora