Entré tras el en su casa y le seguí. Caminamos despacio y, en silencio, llegamos a su habitación.
-Ten, ponte esto.- Dice dándome algo de su ropa.
-¿Qué?.-Dije confusa.
-Vas a enfermar, deberías cambiarte de ropa y ponerte algo seco.-No aparta la mirada del suelo, está serio.
-Está bien...-Accedí con tal de no discutir por eso, pensé que ya estaba la cosa bastante liada.
El se sentó en su cama cara a la pared, mientras yo me cambiaba de ropa detrás.
-Lo siento. -dije mientras me cambiaba. No me dijo nada. -Pero no pasó eso que piensas.
-Que pasó entonces.-Dijo con un tono de voz algo ronco.
-Fué el quien me bes...-No pude terminar de decir la palabra. -¿Me crees?
-Yo...sí.-bajó su mirada al suelo.
Para mí toda esa tensión se esfumó. Me senté junto a él y le dí un beso.
-Te quiero.-Dice en susurro.
-Yo también. -Le dediqué una sonrisa, la cual me devolvió mostrándome sus hoyuelos situados a cada lado de su boca.
Al rato le envíe un mensaje de WhatsApp a Nicco preguntándole como estaba, simplemente me respondió que bien.
Iván me trajo algo calentito de cenar a su cama. En ese momento no existía nada mas para mí. Solo él, y entonces fue cuando comprendí cuanto le quería, lo que me importaba. Estaba enamorada de él.
Caí dormida entre sus sábanas. Estaba bien allí con él. Me sentía feliz cuando el estaba cerca mía.
Dormí a su lado, acomodada en su hombro.
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Cuando abrí mis ojos, lo primero que pude ver es la cara de Iván frente a la mía. Sus ojos se abrieron despacio y una sonrisa se dibujó en su rostro.
-Buenos días. -Dijo en voz baja. Su sonrisa aún seguía en su rostro.
-Buenos días bello durmiente.
-¿Qué día es hoy?
-Domingo.
-Odio los domingos.-Dice poniendo cara de cachorro triste.
-Lo sé.
-Tenemos que llevar a tu amigo al aeropuerto o se quedará aquí para siempre.-Dice sonriendo.
Nos levantamos y fui a cojer algo de ropa a casa. Entré silenciosamente por si Nicco estaba durmiendo, aun quedaban como 3 horas para el vuelo. Subí a mi habitación y lo encontré sentado en el marco de mi puerta durmiendo. Entré en mi habitación y tras encajar la puerta me cambié de ropa y me arregle un poco el pelo. Me agaché frente a Nicco y le desperté.
-Nicco, despierta. - dije tambaleándole un poco con la mano.
-Hola....-Dijo medio adormilado.
-¿Estás bien?, espera, ahora vengo, siéntate en mi cama.-Tras esto, fuí a por un botiquín que tenia guardado en el baño. Me senté junto a él en la cama, y le empecé a limpiar un poco la herida. Tenía parte de la cara hinchada y la nariz con sangre, ya medio seca.
-perdón.
-Tranquilo, no pasa nada.
-Es que... me dí cuenta de que no sé lo que tengo hasta que lo pierdo. Yo.... siento haberte dicho todo eso años atrás. Ahora, simplemente te hecho de menos y ya se que todo no va a volver a ser como antes pero simplemente ayer, yo...-Sus ojos se hinundaron. Nunca había visto a ningún chico así. -Yo... te quiero Anna.
Esas palabras hicieron que dejara lo que estaba haciendo. Me quedé paralizada mirándole a los ojos.
-¿Me perdonas?
-Ya estás perdonado baboso.-dibujé una pequeña sonrisa en mi cara.
-No me mires con cara de pena, no me gusta. -Dijo frunciendo el ceño, el cual enseguida dejó de hacerlo porque le dolía la cara. -Pero sin duda, Iván tiene fuerza. -Dijo haciendo una mueca de dolor.
-Anda, no te quejes más y Vamonos, que vas a perder el avión.-Me levanté de la cama y de unos pasos hasta la puerta de la habitación.
- No me importaría perderlo. -Giré mi cabeza al estilo "niña del exorcista" y le miré entre cerrando los ojos. -No empieces otra vez, anda.
-No empiezo, no empiezo...-Dice soltando una pequeña carcajada.
Salimos de la casa y nos reunimos con Iván, que nos estaba esperando dentro de su coche. Por el camino, el coche estaba totalmente en silencio, pero un silencio incómodo, de esos como cuando subes a un ascensor con gente que no conoces y se que quedan mirando en silencio y no sabes que hacer ni decir.
Para romper el hielo encendí la radio y estaban emitiendo la cancion de Imagine Dragons, "Radioactive".
Llegamos como a la media hora al aeropuerto. Realmente el viaje se me hizo bastante largo, pensé que llevaba en el coche media vida.
-Bueno, voy ya hacia dentro. Gracias por todo y perdón. Anna, te hablaré de vez en cuando babosa, la próxima vez te toca a tí visitarme a mi. Iván, perdón por lo de ayer, pero supongo que ya estamos en paz por la paliza que me diste en mi lado bonito de mi cara.-No pude evitar reír cuando Nicco dijo eso.- bueno, ya nos veremos.
Le dí un abrazo a Nicco y dió media vuelta hacia el interior del aeropuerto.
Le cojí de la mano a mi novio. Se acercó a mí y juntó nuestros labios unos instantes.
《No lo cambiaría por nada del mundo》
♥♥♥
