¡es tu brassier!

1.2K 176 32
                                    

—¡¡¿¿Mi qué??!! —grito de manera histérica.

—¡Es tu brassier! —responde una voz masculina tratando de pretender ser una de mujer.

Me aproximo a la puerta agarrándome la cabeza. —Hoy no es el día de los inocentes, váyase.

—Pero acá es mi hogar, ábreme —continúa.

—No estoy para bromas, ¿quién eres?—me estaba hartando.

Y de un tiro jalé la puerta. ¡¿JungKook con mi brassier entre sus manos?!

—¡¿Qu-qué te sucede?! ¡¿Por qué tienes mi brassier, pervertido?!

—Ayer lo dejaste en mi casa, ¿no lo recuerdas?

—¡Por dios, bájalo! ¡No quiero que medio vecindario te vea con eso entre tus manos! Mejor pasa.

Lo jalé hacia adentro y cerré la puerta.

—Eres una desesperada, vecina.

—A ver, ahora sí cuéntame qué pasó porque no recuerdo nada nadita.

—¿Nada nadita?

—Nada nadita.

—Creo que es mejor así, nos ahorramos vergüenzas —rió.

—Qué es lo que hice, habla ya.

—Mejor... simplemente lo dejaré en tu mesa y me marcharé —dejó la prenda.

—¡Quiero saber, por favor!

—Bueno, si me lo pides... ¿por dónde comienzo? Te fuiste de la mesa de billar y pediste un trago, te pasaste de esos, demasiado diría yo. Bailaste a dos de mis amigos, vomitaste en la piscina y finalmente bailaste sobre la mesa. Fue ahí cuando te sacaste el brassier y lo lanzaste a la piscina.

—Creo que exageras... Nunca haría eso.

—Eso crees, tsss —rodó los ojos—. Lo peor de todo fue el vómito. En un rato llegarán los del mantenimiento de piscinas...

Diosito, te pedí que me protejas de no tomar tantos tragos.

一 COMENZÓ CON UN BRA 。Donde viven las historias. Descúbrelo ahora