一 COMENZÓ CON UN BRA 。

salida al wal-mart.

Saliendo de la facultad, tocaba ir al Wal-Mart por un nuevo pijama, ahora detestaba el que tenía por la ridiculez que hice mientras lo tenía puesto.

Camino por los pasillos y llego a la sección de ropa. ¡Bingo! Un pijama rosa, enterizo como de peluche. Aprovechando que vine, decidí también comprar chocolate, galletas y marshmallows para hacer s'mores cuando llegue a casa. De vez en cuando es bueno darnos un gusto, especialmente en situaciones como esta.

Pero cuando me acerco al pasillo de los chocolates, noto que sólo quedan dos de la marca que más me gusta y corro hacia ellos como si no existiera mayor problema.

Y escucho quejas de otra persona.

—¡Oye, eso es mío! Yo lo vi primero —creía haber oído esa voz en otro lado. La persona llevaba una mascarilla y lentes.

—¿Perdón? Yo lo agarré primero, es mío —respondí.

—Ah, ¡eres tú! La vecina loca. Da igual, es mío —no podía creer que me había topado con el vecino guapo.

—¿Qué? No me digas qu- —se quitó los lentes, y sí, era él.

—Buh. Te propongo algo, como favor de haberte devuelto el sujetador, me invitas a tu casa para unos s'mores. Yo pongo los toppings.

¡No, definitivamente no! Tenía la cara roja de la vergüenza, pero él tenía razón... le debía un favor, creo.

Y qué creen, efectivamente tuve que aceptar su oferta, así que tocó ir junto a él a casa, y no dejaré de decir que aún cargaba remordimiento. Peor aún sabiendo que ese hombre iría a mi territorio.

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—Es más linda por dentro, ¿eh? ¿Te importa si voy a la mía, tomo una ducha y luego vuelvo? Prometo no demorar —preguntó él.

—Claro, tómate el tiempo que necesites, ¡no hay problema! —reí falsamente.

¡Gracias Dios, se fue!

—Pero no por mucho... pronto volverá —dije.

Me lancé al sofá por un momento a revisar mis redes, tareas y demás. Ugh, mañana debo entregar el ensayo en inglés.

Cabe resaltar que el hecho que viva en este país, no me hace dominante de su lengua. A penas llevo dos años y medio aquí aprendiendo sus costumbres, ¡y la universidad viene a joder con un ensayo de mil palabras en inglés! Lo único bueno es que la temática debe ser ficticia.

Y otra cosa buena (felizmente), es que estamos cerca de finalizar el ciclo.

Amén.

No tomé control en la hora, pasé diez minutos pegada al celular tirada como un tamal en el sofá sin saber que el vecino toma baños rápidos.

El timbre sonó. —Ugh, mi noche está de la Devlin.

—Uhmm, ¡un momento, estoy cambiándome!—mentí gritando mientras rápidamente corrí a la cocina a armar la fuente de los s'mores.

No tardé mucho, pero lo suficiente para que el vecino grite que se moría de frío.

Eso le pasa por ocasionar el desorden cada fin de semana.

—¡Abre, me congelo!—continuaba sollozando.

Corrí a la puerta y con una notable lentitud, la abrí.

—¡Eres muy lenta, vecina! ¿Acaso no oías mis llantos? Cuando es de noche baja la temperatura.

—Claro, bueno. Ya está armado, toma asiento —lo llevé a la parte de la sala, dejándolo allí.

—¿Pero no falta decorarlos?—habló. Es realmente irritante.

—Ah, cierto. Bueno, hazlo tú. En un momento regreso —le dije y subí al segundo piso en camino a mi habitación para traer mi laptop y libros de inglés para hacer el ensayo.

Bajé nuevamente y me lo encontré en una llamada. ¡Hablando un inglés perfecto!

Encontré mi salvación.

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