Los Angeles, California.
Meghan Stark, era lo opuesto a Tony, tranquila, carismática, amable, sin perder el encanto Stark, extremadamente inteligente y un tanto sarcástica, era la hija menor de Howard y Maria Stark y la princesa y niña de los ojos de su hermano, ambos llevaban una gran relación pese a que al morir sus padres tomaron rumbos diferentes.
Antony en ese momento decidió que lo mejor sería que Peggy Carter, gran amiga de su padre cuidara y fuera tutora de la pequeña Meg, sin hacerse a un lado por completo de su vida, desde pequeña ha estado de internado en internado, tal y como su hermano había crecido, no era algo que ella reprochara, estaba acostumbrada, en la actualidad la ya no tan pequeña princesa contaba con 23 años, vivía en la soleada California, lejos de lo que implicaba la vida ajetreada de su hermano en Nueva York y oculta para los curiosos.
Era el secreto mejor guardado de Howard Stark, la pequeña que siempre deseo tener, aunque no pareciera, para él, sus hijos eran su mundo siendo recíproco ese sentimiento, un mundo que cambió la noche que tuvieron ese devastador accidente.
- ¿Que tal las clases en el conservatorio?, espero que las estés disfrutando sale muy caro complacerte- bromeó Tony a su hermana por teléfono.
- Pues, bailó sin descanso, como si mi vida dependiera de ello - respondió alegre, como cada que hablaba con su hermano - soy muy feliz, siento que avanzo y aprendo más que nunca.
- Me da gusto, mocosa - Meghan sintió la sonrisa de su hermano al otro lado del teléfono - tengo que colgar, tengo trabajo, hablamos más tarde ¿si?
- Claro, salúdame a Natasha y a Barton, te quiero, por favor no hagas locuras - se despidió cortando la llamada.
La pequeña Stark tomó rumbo para su dormitorio para poder descansar luego de una larga jornada de clases de ballet clásico, porque si, la pequeña Stark pese a tener grandes habilidades para la ingeniería e informática, decidió que su futuro estaría mejor en la danza, intentando llevar una vida no tan ajetreada.
Sokovia, Europa del Este.
El equipo de los vengadores se encontraba en una de las últimas bases de HYDRA existentes, buscaban desmantelar de una vez por todas a la organización Nazi que había logrado infiltrarse en altos rangos del gobierno y SHIELD durante décadas.
- ¡Mierda! - exclamó furioso Tony al toparse con la barrera que protegía la base de HYDRA.
- Lenguaje... - le advirtió El Capitan Rogers, alzo la mirada un momento - Jarvis, ¿Qué es lo que se ve por arriba?
- El edificio central está protegido por una especie de escudo de energía - respondió la IA a Rogers - La tecnología de Strucker es más potente que otras bases de HYDRA que hemos capturado.
- Aqui debe de estar el cetro de Loki - contestó Thor, mientras derribaba a más soldados pertenecientes a la base - Strucker no tendría este tipo de defensa - derribó a unos más con el martillo - Por fin.