You Lose Control, Again. [Thornute]

7.

Se mantenía senado, sereno, mirando las noticias desde la TV del bar.

Askelad, mientras sus hombres estaban intentando ligar con alguna chica, o bebían y hacían de sus tonterías, el rubio estaba distraído, mirando las noticias de asesinatos, robo, etc.

Bjorn, quien ha estado preocupado por la actitud de su jefe, y amigo, se acercó a él para sentarse a su lado.

-El mundo se está yendo a la mierda, ¿no?, Askelad.

-... Si.

Bjorn tomó un sorbo de su cerveza, y suspiro.

-Te preocupa el chico, ¿verdad?

Askelad, mantuvo unos segundos de silencio, miró el vaso de cristal, gordo y hondo, lleno del licor que a este tanto le gustaba. El rubio miraba su reflejo en este, mientras recordaba a Thorfinn y los sin número de encuentros que han tenido.

-¿Porque lo haría?

-Bueno, hace algunos meses que no lo vemos, y tú has estado actuando extraño.

Askelad, recordó la última vez que vio a Thorfinn, como es de costumbre, el menor lo reto a una pelea, para vengar a su padre.

Aún cuando Thorfinn usaba esas dos dagas, el mayor aún así podía ganarle.

Los hombres de Askelad siempre se preguntaban: "¿porque nunca mata a ese niño?".

Con el tiempo, Thorfinn fue aprendiendo a pelear gracias a la experiencia ganada, y las cosas que Askelad le decía, cada vez que ambos de encontraban, aún si fuese por casualidad, o porque Thorfinn lo persigue o busca, siempre es así.

Askelad, fingió una sonrisa y suspiro.

-No me preocupan los perros rabiosos.

Bjorn frunció el ceño.

-Pero...

-No, Bjorn, no me interesa. Es solo un perro rabioso, y nosotros una manda de lobos.-dijo.-Lo que nos diferencia, es que él ha sido domesticado desde nacimiento.

Bjorn entendió las palabras de Askelad, volvió a beber de la cerveza.

-Al parecer me equivoque.-espetó.

Askelad, a pesar de mantener su expresión de siempre, a la que la mayoría de sus hombres están acostumbrados a ver, en su mente, en el fondo de su ser, había un sentimiento de tristeza, o añoranza.

El rubio realmente quería volver a ver a Thorfinn, saber su estado y que tan fuerte se ha vuelto.

Pero Askelad no podía mostrar la empatia que sentía hacia el rubio, sintiendose responsable por lo que le hizo a su padre.

Esa fue la primera vez que Askelad se sintió responsable de algo. Ta hace mucho tiempo que no se siente así.

¿Tal vez fue la impresión que le dio ese hombre?

Thors...

Askelad nunca conoció a alguien como él. Jamás.

Canute, quien había recibido una llamada de Ragnar, se dirigió a una cafetería local del pueblo, donde ahí podían hablar y conversar.

-¡Canute!-el más bajo se lanzó hacia él y le abrazo.

-Ragnar,-sonrió.-¿Como has estado?

-Bien, todo bien.-rió.-¿Que tal tú?, ¿cómo te va con Thorfinn?, si ese punk te puso la mano encima, ya sabes que yo lo mató.

Canute al oír eso y ver la expresión de Ragnar, se ruborizo.

-T-todo va bien con él.-una risilla nerviosa escapó de sus labios.

Ragnar bufo.

-Me alegro.-expresó.-Ven, sentenonos y pidamos algo.

Canute y Ragnar estaban conversando, habían pedido dos tazas de té, para poder hacer el momento más agradable.

Ragnar mostraba los celos y preocupación que sentía cada vez que Canute le mencionaba algo sobre Thorfinn, hay que resaltar que Ragnar fue el primero en decir que no estaba de acuerdo con que Thorfinn y Canute viviera juntos, diciendo que Thorfinn sería una mala influencia para Canute, y que sólo Dios sabe que barbaridades le haría. Pero después de una conversación en la que tuvo que involucrarse tanto la madre como la hermana de Thorfinn, el mayor aceptó, a regañadientes, pero aceptó.

-Canute, no sólo te cite aquí para preguntar sobre tu estado, también lo hice porque quería decirte lo que le sucede a tu padre

Canute frunció el ceño.

-El Sr. Sweyn ha estado en problemas.

-¿Como cuáles?-cuestionó el menor.

Ragnar suspiro.

-Solo te diré que la peor persona, o bestia, está involucrada en esto.

-¿Quien?

-Thorkell.

En el muelle, Thorfinn mantenía su distancia sobre la de Thorkell, quien estaba eufórico por la pelea.

-¿Que no vas a atacar?-cuestionó burlon, Thorkell.-¡Quiero ver lo fuerte que eres!

Thorfinn chasqueo sus labios.

-Si quieres saber que tan fuerte soy, ven aquí y ataca tú primero.

-Daah, eso es lo que iba a hacer ya que tú no vienes.-dijo, mientras se sujetaba aún más el cinturón.

Thorkell se abalanzó contra Thorfinn, el menor al ver el gran puño del contrario, lo esquivo de inmediato, se dio cuenta de lo rápido que es Thorkell, así que se mantuvo cuidadoso.

-Me hubiese matado si me da ese golpe.

Thorfinn, esquivo uno de los tantos ataques de Thorkell, y golpeo sus costillas con un gancho, después su abdomen y nuevamente sus costillas.

Thorfinn se alejo.

-¡Oh!, ¡fascinante!, ¡que gran combinación!-comentó emocionado.-Y eres rápido, pequeño bastardo.

-Me está alagando, pero siento como si no le hice nada. Su cuerpo es muy resistente.

Thorkell, con una sonrisa de exaltación en su rostro fue tras Thorfinn una vez más.

Los dos chicos solo veían espectantes.

-¡Aquí voy, muchacho!