XXVI

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Para el artista era difícil mantener la mirada en la mujer que esperaba sentada en su sala.

La gran señora Jeon no era ni la sombra de lo que una vez fue, aquella elegante y sofisticada mujer, enfundada en trajes de diseñador, con manicura intacta e imagen de los mejores estilistas ahora eran solo un muy vago y lejano recuerdo en la memoria del menor. Realmente no podía creer que aquella imponente mujer ya no estaba.

En cambio ahora se encontraba con una caricatura de la misma, tan delgada, desmejorada, con ojeras y cabello graso.

Le sorprendió tanto que le hablara, que le pidiera hablar sin atisbo de burla o superioridad como siempre mostraros hacia él, pero lo que le convenció de hablar con ella fue le hecho de que se veía al borde del colapso. Se preguntaba cuando fue la ultima vez que la mujer comió algo decente, mintió diciendo que él estaba por comer algo y la invito a acompañarlo, realmente esperaba una negativa pero recibió un asentimiento silencioso. No se ofreció a ayudarlo o acompañarlo pero no le sorprendía, ya era demasiado para la bruja el tener que compartir espacio con quien ella tanto desprecio sin su hijo, como para añadirle algún otro gesto amable.

Taehyung busco entre su refrigerador cualquier cosa, pasa su suerte Dalilah había dejado preparado algunos platillos, la cosa era solo calentarlos.

Puso la mesa y la señora Jeon tomo lugar un tanto avergonzada.

¿Cómo era posible que el artista la considerará después de haber sido una mierda con él?

Taehyung sirvió dos platos y se acomodo frente a quien una vez fue su suegra.

La señora Jeon no tardó en comer lo que había en aquel plato, primero con cautela y después con un poco mas de emoción. Tenia bastante que no comía algo de lo que estaba acostumbrada, sopas instantáneas y agua embotellada no hacían mucho por saciar su hambre.

Ni cuenta se dio cuando tomo la comida del segundo plato, estaba tan sumergida en el placer de comer que poco le importo ver de donde provenía la comida pero Taehyung si lo vio y se sintió pésimo.

Si bien era cierto que apenas si toleraba a si ex suegra, poco le agradaba la situación en la que ahora vivía. Sabia que esto podría pasar si se divorciaba del menor pero, al principio no le tomo importancia, fielmente creía que un divorcio ni siquiera estaría cerca de su matrimonio.

Su error por dar algo por hecho.

- ¿Se le ofrece algo más? - pregunto el menor cuando la mujer al fin despego su vista del plato y tomo un vaso para beber agua.

- No, muchas gracias - Jeon Hye se sintió avergonzada de pronto, pero principalmente humillada.

Habia caído tan bajo por su egoísmo y soberbia que ahora, cualquier gesto amable que el menor tuviera con ella era un golpe a su orgullo. Pues jamas creyó que necesitara de alguien pues su apellido era lo suficientemente importante y ahora realmente no se creía merecedora de las atenciones de su ex yendo luego de haber arruinado su vida por completo.

La mujer se puso de pie y camino hasta quedar a un lado del artista, Taehyung se giro lo suficiente para poder verla y se sorprendió ante lo inesperado de su acción.

Hye se dejo caer sobre sus rodillas y tomo las manos del menor entre las suyas, Taehyung estaba impactado por el acto y en un shock que le impedía reaccionar.

- Perdóname Taehyung, nunca quise lastimarte tanto. Yo solo quería que tu y Jungkook se divorciaron, jamas fue mi intención hacerte tanto mal - aunque para la señora sonaba como una disculpa sincera y honesta, para el menor no fue agradable.

Si, ese era su sentir y nadie podía obligarla a sentir o pensar diferente pero el hecho de que declarara abiertamente que no le importaba atentar contra su matrimonio hacia que un peso incomodo se instalara en el estomago del menor.

Imagen. TaeGi/YoonTae.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora