Todo Empezó En El Tejado

Querido Luke, todo empezó en el tejado...

Querido Luke:

Una carta más que nunca llegará. Es obvio el por qué. Tú estás en la cárcel esperando a ser juzgado. Yo estoy en el hospital intentando averiguar quién hizo esto. Quién me ha roto de esta manera. Según una pared, has sido tú. Eso dice mi cabeza, que te juzgue, que si Mark escribió eso es por algo. Pero mi corazón se niega a aceptarlo. Sé que no saldré de dudas hasta que Mark no me aclare lo que paso o tú lo hagas. Pero lo segundo no pasará. No me verás hasta que tenga todo claro. No quiero arriesgarme. Otra carta escrita… otra carta sin mandar… otro trozo de papel maltratado…

Tuya

Lea…

Releía esas palabras una y otra vez. Intentaba decidir si enviarla o no. Si verle o no… Como todas las otras veces, sabía que terminaría guardándola en la mesilla. En el segundo cajón… Levanté la vista y ahí seguía. Durmiendo como un niño, soñando como un ángel. En estos momentos solo deseé que despertara… Y no porque quisiera que me aclarara todo esto (que también) si no porque quería besarlo y, con suerte, ser correspondida. Si él decía la verdad, una vez más me habría salvado. No sé la razón por la que mi corazón acelera al escuchar su nombre. Al escuchar esta estúpida máquina que indica que sigue con vida. Que su corazón sigue latiendo… Porque solo el hecho de que exista ya me hace feliz.

Mi cabeza y mi corazón han entrado en una guerra que no se sabe cuándo terminará. Mi corazón, dividido, lucha contra la esperanza de besarlo y defiende a Luke como inocente. Mi cerebro separa nuestros cuerpos y dice que Mark escribió la verdad con su sangre…

Mi padre siempre me dijo que escuchara a mi corazón, y por un día así lo haría. Poco a poco cerré el espacio que quedaba entre nosotros y uní nuestros labios como en las películas. Pero sus labios estaban estáticos, inmóviles. Fríos y muertos… Pero mi cuerpo se negaba a separarse. Lo agarré del cuello y tiré acercándolo más. Aunque no respondiera, aunque solo estuviera allí dormido, necesitaba sentirlo junto a mí. Sólo me separé cuando la máquina de mi lado empezó a hace un ruido estridente. Algo en mi cerebro se activó. Ese sonido era música para mí. Ese sonido indicaba que su corazón latía más rápido. Me separé de él para ver el cacharro ese y llamar a alguien pero unos brazos me tiraron a la cama.

-No te alejes de mí. Nunca más…

Sus brazos rodeaban mi cuerpo no dejándome escapatoria. Sus palabras susurradas en mí oído como cuando me consolaba de pequeña. Pidiéndome algo que podría darle y que sin duda yo deseaba. Sus labios me llamaban. De una manera mágica. Pero no obedecería a mi corazón dos veces. No lo haría para no cometer un err…

Sus labios acariciaron los míos delicadamente y sus manos bajaron a mi cadera. Mi cuerpo tembló pensando en cómo estábamos. En la situación. Todo esto estaba mal pero se sentía tan malditamente bien… Finn entró interrumpiendo nuestro momento…

-¿Pero tú no estabas con…? Dejémoslo, me lo llevo a revisarle. Ahora te lo traigo.- Y guiñando el ojo me levantó de la camilla llevándosela consigo a saber dónde.

Mis ojos se hicieron agua y aguantaron las ganas de llorar. No puede ser. No puedo meterme en un trío amoroso. No. No. No. Nunca. Entonces tienes hasta mañana. Miro la hora en mi reloj. Las cuatro de la tarde… Unas cuantas horas aun por delante. ¿Suficiente como para decidir con quién pasaré el resto de mis días? Tendría que serlo. Si no solo sufriré más.

Volví a abrir la carta y releer una vez más mis palabras. Por Luke daría una vida pero por Mark las daría todas. De Mark nunca he dudado y solo me guío por mi instinto. Luke siempre ha sido un misterio, algo que no termino de entender, como si me faltara una pieza de este puzle. Mark siempre ha estado allí, siempre me ha dicho que me quería. ¿Lo ha estado Luke? Demasiada confusión. Por ahora, la decisión está clara. La mejor opción es Mark…

Tres horas más tarde volvieron a traer a Mark a su cuarto. Su pelo pelirrojo lo cubría una venda pero por lo demás se encontraba genial. Su sonrisa y sus ojos delataban lo que yo ya sabía. Que estaba enamorado. Supongo que mi cara estaría igual porque Finn simplemente se quedó en el marco de la puerta, esperando a que la magia simplemente sucediera. Y así fue, nos lanzamos el uno a los brazos del otro y cuando nos miramos a los ojos nos besamos. Como si jamás lo hubiéramos hecho. Como si esto no fuera un hospital. Como si no tuviera un novio en la cárcel. Como si mi padre no tuviera un tiro en un brazo ni me fuera a vivir con la bruja de mi madre. Ese momento era nuestro y solo existíamos nosotros dos. Y  ahí entendí que daba igual las veces que Luke y yo nos hubiéramos besado. Las veces que dormimos abrazados. Los momentos que compartimos en el tejado. Todo eso fue una especie de sueño con secretos ocultos. Mark ya había hecho eso antes…

*FLASHBACK*

Mark y yo apenas teníamos los 12 años pero yo los haría en una semana. Habíamos quedado en la vieja casa de mi familia para vernos y planear la mejor fiesta del siglo pero mi madre me lo prohibió.

-Tú solo… ve hacia tu ventana e intenta saltar al tejado. Podríamos vernos allí…

Esas palabras rondaban en mi mente. Si él lo había dicho era porque me veía capaz de hacerlo. Sería divertido. “Si te caes, yo te cojo” me dijo una vez. Así que, supongo que estará debajo de este estúpido callejón para que no me pase nada. Me armé de valor y tras la cuenta de tres salté hacia el vacio. En el último momento abrí los ojos y alcancé a ver que, si no estiraba los brazos, caería. Los estiré lo máximo que pude y conseguí agarrarme al borde. Una delicada mano sujetó la mía y tiró hacia arriba. Había comenzado a llover por lo que las tejas estaban resbaladizas. Mark se escurrió y ambos caímos el uno encima del otro. Nos miramos y, tras unos minutos de total silencio, pregunté.

-¿Para qué insististe tanto en vernos?

Sus ojos conectaron con los míos y una corriente recorrió mi cuerpo.

-Porque te amo. – Susurró sin despegar los ojos.

Acercamos nuestros rostros y nuestros labios se unieron por primera vez. Era nuestro primer beso para ambos así que fue torpe pero hermoso. Algo que no olvidaríamos en nuestras vidas…

*FIN FLASHBACK*

Todo a sido volver a vivirlo. Todo ha sido volver a empezar. Todo a sido continuar. Lo que empezó una tarde de otoño. Lo que empezó con dos críos enamorados. Subiendo a un tejado para declarar su amor. Continuando lo que empezó allí… Porque TODO EMPEZÓ EN EL TEJADO.

 ¡Hola! ¿Qué tal estan? Yo muy bien por subir este capítulo. Aquí tienen el verdadero significado de porque esta historia se llama así. Espero que os haya gustado y siento decir que hasta dentro de una semana no volveré a subir :(  También quiero decir que quedan pocos capítulos de esta novela y me gustaría que comentaran si les está gustando y si quieren segunda parte. Besos. Os Amo <3