Día 141

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-¡Wow! Te veo mucho mejor -Jinsol sonríe y piensa en voz alta apenas abro la puerta.

-Creo que lo estoy -admito mirando al piso-. ¿Qué te trae por aquí? Ha pasado algún tiempo -le digo mientras hago un gesto invitándola a entrar.

-Sólo pasaba para ver si necesitaban algo, ¿todo está en orden? ¿tienen suficiente comida?

Sonrío y asiento.

-De hecho, estoy a punto de cenar. No tienes que preocuparte tanto, estamos bien y además... he hablado con mis jefes y volveré a trabajar pronto.

-¿En serio? -ella se ve genuinamente alegre.

-Sí, así que intentaré conseguir un lugar para vivir en cuanto tenga mi sueldo completo otra vez -le digo con tranquilidad pero ella rueda sus ojos.

-Ya te he dicho que eso no importa, toma el tiempo que sea necesario. ¿Pero de verdad crees que ya estás lista para trabajar? ¿Te sientes bien? ¿Dónde está Jiwoo? -dice al final mirando alrededor- ¿No debería cuidarte? Ya es algo tarde.

Demasiadas preguntas. Intento responderlas en una sola y clara frase.

-Ella volverá en un rato, dijo que cenaría en su casa hoy y volvería aquí a pasar la noche pero... estoy bien como para quedarme sola -la tranquilizo-. En cuanto al trabajo, no será inmediatamente, pero ya estoy en proceso.

-Bien, eso me alegra -dice mostrándome una sonrisa-. Supongo que puedo irme entonces.

-¿No quieres quedarte a cenar? -la invito cordialmente.

-Te agradezco -niega con la cabeza y suelta un suspiro-. No estoy lista para eso todavía.

Aprieto los dientes y miro de reojo hacia abajo.

-Lo entiendo.

-Pero cuando todo esto pase de una vez quizás podríamos volver a ser amigas -me dice con algo de nostalgia y tengo que admitir que realmente me alegra escucharla decir eso.

-Sería magnífico -respondo sin ocultar mi emoción. Tantas veces había pensado en volver a ser amigas pero sentía una enorme vergüenza como para proponérselo. Pero ahora estaba bien, era probable que fuese sólo cuestión de tiempo para tener de nuevo a esa amiga incondicional de hace unos años. A pesar de que no la merezco, a pesar de todo.

La acompaño hasta la puerta caminando tras ella pero justo antes de salir la detengo un momento.

-Jinsol -le digo manteniendo la distancia y ella voltea a verme-. Gracias... y perdón.

-No te preocupes -me dice sonriendo a pesar de mi seriedad.

-Es que fui una idiota, debí haberte sido sincera desde un principio pero... -me detengo un momento- tú de verdad mereces ser feliz. Sé que encontrarás a alguien que te ame y te valore.

-No pienso en eso ahora, pero gracias -me dice casualmente mientras abre la puerta para salir-. Llámame si necesitas algo, y envíale saludos a Jiwoo de mi parte.

Luego de decir esto último termina de atravesar la puerta y cerrarla tras ella.

¿Cómo es que la vida me ha topado con personas tan bondadosas y compasivas incluso si yo soy todo lo contrario? ¿Será que el karma se tomó vacaciones esta vez?

Intento dejar eso de lado sólo un momento mientras me siento a cenar. Logro comer un poco más que la última vez y me felicito a mí misma.

Al terminar observo la hora y me emociona pensar que Jiwoo está por llegar. Ocupo mi tiempo ordenando la cocina aunque mis ansias se llevan el protagonismo en mi cabeza.

Liar  •【ChuuVes】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora