Parte II: Presente - Capítulo 32

201 35 11
                                    

Durante todo el proceso, Kyuhyun no habló con Sungmin.

Respondió a las preguntas del oficial y actuó de acuerdo con las instrucciones, pero ni siquiera lanzó una mirada hacia Sungmin durante todo ese tiempo.

Por supuesto, Sungmin no esperaba nada después de todo.

El viento era frío.

Estaba tan oscuro que no podían decir a qué la hora salieron de la estación.

Kyuhyun fue directamente a su auto estacionado cerca de la estación, y Sungmin, miró la espalda del otro por un par de segundos, giró en la dirección opuesta para caminar hacia donde tenía que ir.

Solo cuando se alejó unos pasos oyó la voz de Kyuhyun.

—Sube al auto—. Sungmin se detuvo en seco.

Era la primera vez en dos años que esa voz se dirigía a él.

Su corazón latía con fuerza; de hecho, había estado latiendo así durante todo el tiempo desde que Kyuhyun apareció en la estación.

Simplemente estaba tratando de no mostrarlo.

—Puedo tomar un taxi—. Dijo sin mirar atrás, y comenzó a caminar de nuevo.

—Dije—, espetó Kyuhyun. —Sube al auto.

Hubo un momento de silencio cuando Sungmin se abstuvo de temblar por la frialdad en la voz.

Titubeó.

No estaba seguro de lo que iba a pasar ni cómo iba a controlarse una vez que subiera al auto.

Pero pronto, dio un suspiro, regresó hacia el auto de Kyuhyun y se sentó en el asiento trasero diagonal al asiento del conductor sin una palabra de protesta, Kyuhyun también entró al auto.

Hasta que Kyuhyun sacó el auto del estacionamiento y se dirigió a la carretera principal, el silencio no se rompió.

Luego, en el semáforo, comenzó la conversación, de la manera más dolorosa posible.

—¿Creí que dijiste que tu teléfono estará lleno de números nuevos después de una noche en un club? —Kyuhyun murmuró mientras fijaba su mirada en el frente.

Sungmin decidió no responder. Kyuhyun tampoco estaba esperando una respuesta.

—¿Dónde te dejo?

Mirando por la ventanilla del auto, Sungmin reflexionó sobre cómo debería responder.

Después de considerarlo un poco, pensó que no había otra forma que decir la verdad.

—En... el estudio.

Ante eso Kyuhyun levantó los ojos hacia el espejo retrovisor para comprobar la expresión de Sungmin como si estuviera buscando indicios de si era verdad o mentira.

No planteó ninguna pregunta y continuó conduciendo cuando la luz se puso verde.

Porque Sungmin estaba diciendo la verdad.

De nuevo, hubo un pesado silencio entre ellos.

Kyuhyun mantuvo su atención en el camino, y Sungmin mantuvo su atención en la vista por la ventana.

Ambos fingían no estar pendientes el uno del otro.

Sin embargo, no podían evitar centrarse en la presencia del otro.

Habían pasado dos años desde la última vez que tuvieron juntos en un espacio tan pequeño.

El espacio era realmente pequeño.

En busca de un faro {KyuMin} [TRADUCCIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora